¿Por qué mi pájaro tiembla?

Las aves son conocidas por ocultar los síntomas de una enfermedad hasta que ya están en un estado grave de salud. Por eso, cualquier tutor se puede alarmar (y con razón) cuando su pájaro tiembla y preguntarse a qué se debe.

Una ave no siempre tiembla por enfermedad, pero es necesario que sepas distinguir cuándo puede estar sufriendo y cuándo se agita por otras razones. Si quieres descubrirlas, aquí te ayudamos a hacerlo. No te lo pierdas.

¿Por qué mi pájaro tiembla?

Son muchas las razones por las que un pájaro tiembla. Para conocer la causa hay que prestar atención a otras señales adyacentes, como la calidad de las plumas, la temperatura ambiental o el estado de ánimo del animal. Te contamos algunos de los motivos por los que una ave puede adoptar esta conducta en las siguientes líneas.

El pájaro tiembla porque tiene frío

La razón más sencilla por la que una ave puede temblar es la más cercana a nuestro entendimiento: tiene frío. Cada especie de pájaro requiere un rango de temperatura óptimo para su bienestar y comodidad que debes controlar. Cuando el intervalo térmico no se cumple, el animal temblará para generar algo de calor interior.

Cuando una ave tiene frío, también observarás que eriza sus plumas. Esto lo hace para llenar de aire el espacio entre sus plumas, lo que le ayuda a conservar el calor corporal.

Porque tiene calor

En la otra cara de la moneda, una ave que tiene calor puede dar una rápida sacudida a sus plumas para remover el aire que se encuentra entre ellas. De esta manera se refresca, ya que las bolsas de aire caliente se disipan y entra otro un poco más fresco.

Aunque pueda parecer un temblor, este acto no lo es y se trata de un movimiento voluntario. Tu pájaro dará también otras muestras de estar acalorado, como separar las alas del cuerpo y respirar con el pico abierto. Es necesario cambiar la jaula de sitio o poner una pequeña piscina de agua para aliviar su sintomatología en estos casos.

Porque está emocionado

Una emoción positiva también puede ser causa de que tu ave tiemble. Quizá ocurra cuando vuelves a casa y se alegra o cuando un juego le emociona mucho. Este motivo es más común en los pájaros comportamentalmente complejos, como pueden ser las psitácidas.

Junto a estos breves temblores verás que el ave está más activa, eriza las plumas, dilata las pupilas y vocaliza. Si tiene cresta (como es el caso de las cacatúas), esta estará levantada.

El pájaro tiembla porque está estresado o asustado

Después de un susto desagradable es común ver que un pájaro tiembla. Por lo general, tendrá las plumas pegadas al cuerpo, respirará agitadamente y estará inmóvil mientras tiene pequeños temblores. Este comportamiento se ve a menudo tras escapar del ataque de un depredador o después de una pelea con un congénere.

Por otro lado, el estrés es una fuente común de temblores en las aves. En ocasiones puede ser difícil identificarlo, pero los pájaros domésticos son muy sensibles a los cambios en su entorno. Un detalle que a ti no te parece relevante a ellos les causa temblores hasta que se acostumbran (pero mejor si retiras el estímulo estresor).

El estrés puede ir acompañado de comportamientos estereotípicos, como acicalarse demasiado o el picaje.

El ave sufre una enfermedad

Además del estrés, esta es la razón por la que un pájaro tiembla que mejor debes saber identificar. Como se decía al principio, cuando una ave muestra signos de enfermedad lleva ya un tiempo ocultando síntomas, así que saber verlos antes de que sea tarde puede salvarle la vida.

En periquitos, por ejemplo, los temblores son un signo muy típico de la psitacosis, una enfermedad mortal y muy contagiosa.

Un ave enferma, además de temblar, se mostrará letárgica, tendrá las plumas erizadas y las alas caídas. Tampoco responderá a la interacción humana ni se subirá a lugares elevados.

¿Qué puedo hacer si mi pájaro tiembla?

Una vez has identificado la razón de los temblores, es el momento de hacer algo al respecto. A continuación tienes una serie de consejos generales que sirven para garantizar un bienestar básico para tu ave:

• Mantén la temperatura ambiental dentro del rango óptimo: cada ave necesita una temperatura propia de su hábitat original, por lo que tendrás que evitar cambios bruscos hacia el frío o el calor para prevenir enfermedades derivadas.
• Evita cambios bruscos en la configuración de su ambiente: para evitar el estrés conviene que crees un entorno tranquilo, sin ruidos fuertes ni peligros cercanos (como el acceso de depredadores al recinto).
• Si el pájaro tiembla por alguna causa temporal, no debes preocuparte: es el caso de que esté emocionado o tenga un poco de frío tras el baño. Se le pasará sin mayores contratiempos.
• Qué hacer cuando el ave está enferma: mientras esperas a llegar al veterinario o en el posterior tratamiento, procura mantener a tu pájaro siempre caliente y no le des sobresaltos, pues el estrés empeorará mucho la condición que padezca.
• Si el ave enferma convive con otras de su especie, aíslala cuanto antes para evitar contagios: monitoriza también al resto de sus compañeras.
• Afina los cuidados del ave: una dieta variada, grandes cantidades de enriquecimiento y una buena educación harán que tu pájaro goce de una salud de hierro. Esto, además de prevenir enfermedades, mejora el pronóstico de recuperación en caso de sufrir una.

Por último, recuerda que un ave que tiembla, no responde a estímulos, está aletargada o que se queda en el suelo de la jaula está muy enferma. Seguramente necesite atención inmediata, así que no lo dejes para mañana.