Los perros no solo son conocidos por ser animales muy fieles, también lo son por protagonizar muchas frases que forman parte del folklore popular. Quién no ha escuchado en alguna oportunidad la expresión “Pelo de perro”, “Está lloviendo gatos y perros” o “Trabajar como un perro”, pues en este artículo te contamos cuál es el origen de estos famosos enunciados.
Pelo de perro
La expresión “pelo de perro” suele emplearse en aquellas personas que toman mucho alcohol. Según una vieja creencia, para curar la resaca se puede emplear un remedio casero que tiene un ingrediente muy especial: pelo de perro. Supuestamente la creencia se originó cuando un hombre fue mordido por un perro con rabia y tras beber un brebaje que contenía ese particular componente, se curó rápidamente del padecimiento. Pero ¿qué tiene que ver la rabia y el exceso de alcohol? La correlación sugiere que aunque el alcohol puede ser el culpable de la resaca -como el perro es para el ataque-, una pequeña porción de la misma voluntad, paradójicamente, actúa como una cura. Si bien no existe evidencia científica sobre esta particular poción, mejor no vale la pena probarlo.
Días de verano de perro
Entre julio y septiembre, al norte del Ecuador, el verano se encuentra en su mayor esplendor. Los días se alargan y el calor es el protagonista. ¿Pero sabías que esa temporada del año también se identifica con los perros? o ¿acaso nunca escuchaste la frase “días de verano de perro“? Esta expresión , sin duda, nace de la observación. Si te fijas, en esa temporada del año, los pequeños peludos se acuestan bajo la sombra y pasan allí sus mañana, tardes y por qué no, hasta noches.
Noches de tres perros
La fuente geográfica de esta frase se ha debatido más de una vez. Nadie está seguro de si se originó en el interior de Australia o fue acuñada por los esquimales en América del Norte. El significado sin embargo, es bastante claro. La frase es un indicador de la temperatura nocturna. Los perros acurrucados con los seres humanos generan calor. Si el clima es frío “funcionan” como si fueran un abrigo tapado. Según se cuenta, la expresión surgió cuando tres perros ayudaron a un hombre a evitar la congelación.
Cada perro tiene su día
De acuerdo a diferentes sitios webs, Charles Kingsley escribió “La sangre joven debe tener su curso, muchacho; y cada perro su día”. El significado es en realidad que todo el mundo tendrá su momento. Andy Warhol explicó la frase diciendo que todo el mundo tendrá sus quince minutos de fama.
Vida de perro
Si bien esta frase hace referencia a la desafortunada vida que supuestamente llevan nuestros adorables amigos, lo cierto es que hay muchos de ellos que viven como reyes. Quizás el origen de esta frase se haya dado haciendo referencia a perros abandonados y a quienes los almaceneros echaban de su local de manera poco grata. Lo cierto es que ellos, por mal que se vean, siempre están dispuestos a dar una muestra de afecto a quien los trata bien.
Está lloviendo gatos y perros
La primera cita a esta frase se ubica en 1651. Por esa fecha, el poeta británico Henry Vaughn utilizó la expresión en uno de sus escritos. Más tarde, el dramaturgo Richard Brome también hizo una referencia a la aclamada expresión. Su origen no es muy claro. Nadie sabe con certeza si esta cita se originó en la mitología nórdica. Cuentan que Odín, dios de las tormentas, se refería a ella para hacer referencia a la presencia de perros y lobos. Los marineros en cambio, a menudo identifican la frase con la lluvia.
Por otro lado, en la mitología medieval, las brujas tomaron a los gatos como sus familiares y cabalgaron con ellos a través del aire, incluso durante las tormentas. Quizás de esa imagen provenga la popular expresión.
Trabajar como un perro
Finalmente, otra de las frases populares que hacen referencia a nuestros pequeños amigos es aquella que dice: “trabajar como un perro”. Esta expresión no se refiere solo al trabajo duro. Los perros trabajan duro, es cierto, pero también trabajan por una recompensa. El perro estará encantado de hacer su tarea para la recompensa verbal o sabrosa al final de su “turno”. Se complacen en su estado y trabajan duro para mantener su lugar. Un perro va a trabajar para obtener al final de un día agotador, un masaje en el vientre. ¿Cuántos seres humanos podría decir lo mismo?