Los casos de abandono canino se siguen presentando de manera recurrente en varios lugares del mundo. A continuación te contamos otra de esas historias que rompen el corazón.
El hecho se presenció en Sudáfrica, donde un hombre depósito a un perro de raza Teckel en una caneca y lo dejó abandonado en la calle. Además, al comenzar a alejarse manifestó que la razón por la que lo dejaba era porque el animal se encontraba enfermo desde hace mucho tiempo.
No obstante, por fortuna cerca de aquellas instalaciones se encontraban funcionarios de un refugio para animales llamado Boksburg. De esa manera, se acercaron a la caneca y se dieron cuenta de que el perro estaba en unas condiciones lamentables.
Sin embargo, cuando el animal salió de la trampa en la que lo había metido la cruel persona, los funcionarios se dieron cuenta de que aún podía caminar. Por esa razón, se llenaron de más esperanza y procedieron a auxiliar al canino de manera inmediata.
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El inicio de la salvación
El pequeño perro llamado Oliver fue llevado a una veterinaria cercana para evaluar de manera detallada su estado de salud. Allí, después de un análisis exhaustivo, se confirmó que tenía patologías que se tenían que tratar con urgencia.
Pues, sufría de anemia y tenía un daño en uno de sus ojos. Debido a ello, los especialistas le proporcionaron los medicamentos correspondientes y le realizaron una cirugía exitosa para corregir la afección ocular.
Además de ello, en la veterinaria se percataron que Oliver tenía parásitos. Por lo cual, también le realizaron el tratamiento correspondiente para contrarrestar ese inconveniente y salvar la vida del adorable perro.
La llegada de Oliver a un lugar lleno de amor
Después de la fase de tratamiento, Oliver fue llevado al refugio para que se siguiera recuperando de la mejor manera. Además, al llegar recibió 4 baños que le ayudaron a refrescarse y deshacerse de toda la suciedad.
Junto a ello, se le brindó un buen plato de comida y el perro no se demoró en saciarse. De esa manera, los integrantes del refugio se dieron cuenta de que la salud de Oliver estaba teniendo una mejora considerable.
Ahora, después de haber salvado la vida del cachorro, el plan es encontrarle una familia que lo llene de todo el amor que se merece. A causa de ello, el refugio se encuentra haciendo todos los trámites correspondientes para que Oliver quede en las mejores manos y tenga una vida digna.
Reflexión final
Adoptar es un acto de amor y estos casos son ideales para animarse a tomar la decisión. Pues, mediante la adopción se ayuda a disminuir el alto número de caninos que se encuentran sin un hogar.
Además, es la oportunidad de acoger a un animal que ha pasado por una gran cantidad de sufrimientos. De esa manera, se le comienza a brindar todo el cariño que se merece, se atienden todas sus necesidades y se la hace sentir importante.
Después de la adopción, un perro llega a alegrar la vida de las personas porque les ofrece una lealtad y atención incondicional. De la misma manera, el animal mejora su estado de ánimo porque identifica que ha llegado a un lugar en el que lo valoran y le brindan protección.
Bibliografía
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- Ortiz E. La vida con un perro es más feliz [Internet]. España: Editorial Planeta; 2018 [citado 28 de septiembre de 2021]