10 medicamentos para tratar la ansiedad en perros

Los medicamentos más comunes para tratar la ansiedad en perros tienen un efecto directo sobre el sistema nervioso del animal. Aquí te contamos cómo funcionan y cuáles son.
10 medicamentos para tratar la ansiedad en perros
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 30 julio, 2022

La salud mental, cuyos cuidados están cada vez más presentes en la vida cotidiana de las personas, empieza a tomar relevancia también en la de los animales que viven con nosotros. Por eso, es común encontrar que se recetan medicamentos para tratar la ansiedad en perros, uno de los problemas más comunes en los hogares.

No obstante, la elección de medicar a un can para tratar sus trastornos mentales está sujeta a la misma polémica que con los humanos: tomar una pastilla no puede ser la única solución. Por eso, en este espacio podrás explorar este tema en profundidad y conocer los fármacos más comunes en el tratamiento de esta afección. No te lo pierdas.

¿Qué es la ansiedad en perros?

La ansiedad es un estado mental que seguro que conoces, pues todo el mundo la ha experimentado alguna vez: es esa sensación angustiosa que aparece cuando se percibe un peligro en el futuro. Los perros la experimentan de la misma manera.

No obstante, los cánidos no tienen las herramientas necesarias para comunicarnos en nuestro idioma qué les preocupa o cuáles son sus sentimientos. Debido a ello, se hace necesario observar su comportamiento para determinar que un perro tiene ansiedad. Algunos de los síntomas más comunes son los siguientes:

  • Comportamientos destructivos.
  • Defecación y micción dentro de casa (aunque sepa aguantar hasta salir a la calle).
  • Vocalizaciones continuas, como ladridos, aullidos o gemidos.
  • Conducta velcro con el tutor.
  • Hiperactividad, aunque haya realizado ejercicio durante el día.
  • Otros comportamientos anómalos, como la pica, la coprofagia, los temblores o las conductas posesivas o territoriales.
¿Por qué mi perro aparta la cara cuando me acerco?

¿Qué hago si mi perro presenta alguno de estos comportamientos?

Si sospechas que tu can podría tener ansiedad, lo primero que debes hacer es acudir al veterinario, pues antes de hacer un diagnóstico sobre salud mental se deben descartar causas físicas para el malestar del animal. Si el profesional determina que el perro sufre un trastorno de ansiedad, lo primero que hará será redirigirte al educador para comenzar una terapia.

Como en cualquier especie, algunos perros sufren ansiedad en mayor o menor medida. Para aquellos casos más graves, en los que la terapia con el etólogo no dé resultados, es posible que se recurra a una base farmacológica que permita avanzar a nivel de entrenamiento.

Existen varios tipos de medicamentos para la ansiedad en perros que se pueden utilizar según las características del trastorno. En el siguiente apartado tienes los principios activos que más se emplean en este tipo de casos.

Medicamentos más utilizados para el tratamiento de la ansiedad en canes

Aunque se suele pensar en el grupo de las benzodiazepinas (los ansiolíticos más empleados en humanos, como el lorazepam), también es posible encontrar antidepresivos como los tricíclicos. Vamos a verlos de forma detallada:

  1. Alprazolam: también conocido por su nombre comercial, ®Xanax, esta benzodiacepina actúa como una droga depresiva del sistema nervioso, ayudando a los perros con fobias situacionales tales como tormentas o pirotecnia.
  2. Amitriptilina: se trata de un antidepresivo tricíclico indicado para casos graves de ansiedad por separación. Aumenta los niveles de serotonina y norepinefrina en el cerebro, de forma que mejora el estado de ánimo. No es apta para perros diabéticos.
  3. Buspirona: este ansiolítico es útil para aquellos animales que sufren un estado de ansiedad generalizado. Por tanto, requiere un uso continuado para ser efectivo, ya que no tiene un efecto muy fuerte.
  4. Clomipramina: su nombre comercial es ®Clomicalm. Sirve tanto para ansiedad situacional como para la situacional, como las fobias o la ansiedad por separación. Se necesitan varias semanas de uso para observar efecto terapéutico.
  5. Dexmedetomidina: este medicamento es un agonista selectivo de los receptores adrenérgicos, es decir, que tiene un efecto sedante sobre el organismo. Aunque se suele utilizar como medicación preanestésica, también se receta para fobias específicas a ruidos fuertes.
  6. Diazepam: seguramente te suene más su nombre comercial, ®Valium, pues existe una presentación veterinaria de este medicamento. Se usa tanto como ansiolítico y relajante muscular.
  7. Flouxetina (®Prozac): indicado para la ansiedad por separación, este fármaco inhibe la recaptación de serotonina, por lo que permite que este neurotransmisor permanezca más tiempo en el cerebro, haciendo efecto.
  8. Lorazepam: perteneciente al grupo de las benzodiazepinas, este sedante deprime ciertas partes del sistema nervioso. Está indicado para situaciones de ansiedad concretas.
  9. Paroxetina: este es otro inhibidor de la recaptación de la serotonina. Sin embargo, este medicamento se prescribe cuando existen comportamientos específicos y destructivos relacionados con la ansiedad, tales como agresiones y automutilaciones.
  10. Sertralina: al igual que el anterior, este fármaco previene la recaptación de la serotonina. Su uso se circunscribe a cuadros de ansiedad generalizada con comportamientos que amenazan la salud del animal.

¿Son efectivos los medicamentos para tratar la ansiedad en perros?

La controversia que afecta a este tipo de fármacos tiene que ver con el hecho de que muchas veces se recetan sin acompañarse de un tratamiento psicológico. Por eso, la mayoría de los veterinarios y etólogos caninos recomiendan que se administren ansiolíticos y otros psicofármacos solo como tratamiento de apoyo a la terapia psicológica.

Por otro lado, se trata de sustancias que afectan al comportamiento habitual del can y que, en muchas ocasiones, tardan varias semanas en hacer efecto. Muchos tutores abandonan los tratamientos antes de terminarlos por esta razón, lo que supone un peligro en aquellos casos en los que el principio activo requiera de una retirada paulatina.

Por tanto, si te encuentras ante esta tesitura, recuerda apoyarte siempre en los profesionales que atienden. No siempre se da con el tratamiento adecuado para el can a la primera, pero recuerda que cada animal es un mundo y que lo importante es colaborar para ayudarle a tener una vida libre de estrés. No tires la toalla, pues la ansiedad se supera en todas las especies.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Mundell, P., Liu, S., Guérin, N. A., & Berger, J. M. (2020). An automated behavior-shaping intervention reduces signs of separation anxiety–related distress in a mixed-breed dog. Journal of Veterinary Behavior37, 71-75.
  • Kurachi, T., & Irimajiri, M. (2019). Preliminary study on the effects of attendance at dog training school on minimizing development of some anxiety disorders. Journal of Veterinary Behavior34, 13-17.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.