El Papa es sin duda una figura importante en todo el mundo. ¿Quién no ha escuchado hablar del Papa Francisco? Muchos dicen que escogió su nombre por San Francisco de Asís, aunque si no sabíamos por qué, parece que el amor que el Papa demuestra hacia los animales, puede darnos una pista. Conozcamos la historia de su saludo al perro San Bernardo.
San Francisco de Asís era conocido por su amor a los animales, y parece que el Papa Francisco no se queda atrás. te vamos a contar la historia de un perro San Bernardo que quiso conocer al sumo pontífice.
El Papa saluda al perro San Bernardo
Aunque los San Bernardo son conocidos por su amabilidad y su noble carácter, ¿qué harías si uno viniera corriendo hacia ti? ¿Te atreverías a tocarlo? Posiblemente no…
Pues cuando Magnum, un “pequeño” animal de 70 kilos fue corriendo hacia el Papa Francisco, este ni se inmutó y sin conocerlo, sin ni siquiera dejar que lo oliera, lo acarició y saludó, como si fuera un simple niño indefenso.
Lo que el Papa no sabía es que Magnum tenía mucho en común con él. Este “pequeño” San Bernardo forma parte de un proyecto que la Fundación Barry, ubicada en la rica ciudad de Suiza, ha preparado para ayudar a los más desfavorecidos.
El empeño de Claudio Rosseti por ir a conocer la Papa y además llevar a Magnum, su perro San Bernando, era presentarle el proyecto sin ánimo de lucro que tenían entre manos, así como a una de sus piezas fundamentales, o mejor dicho, una representación de estas, Magnum.
Proyecto de la Fundación Barry
El San Bernardo que el Papa saludó en el Vaticano no es más que uno de los 40 perros que la Fundación Barry está utilizando para ayudar los niños y los ancianos.
Estos perros ayudan anímica, mental y emocionalmente tanto a niños como ancianos que por una causa u otra están en hospitales. A modo de terapia, los canes hacen que su día a día tras las frías paredes de un hospital sea mucho más ameno y que su malestar sea más llevadero.
Dar a conocer esta importante labor a través de un personaje tan popular como el Papa ha sido sin duda un logro para esta fundación, ya que muchos ahora están enterados de ella así como de la existencia de Fundación Barry.
Con ello también quieren lograr que el Puerto del Gran San Bernardo sea un sello identificativo del país, y es muy probable que tras esta afortunada visita lo consigan. Se dice que de Suiza, de ese puerto en particular, surgió el primer San Bernardo.
Además, el proyecto está patrocinado y supervisado por la UNESCO, lo cual le da la importancia y seriedad que se necesita.
El Papa no se limitó tan solo a saludar a Magnum, sino que escuchó a Claudio explicar los detalles sobre su proyecto y hasta bromeó al decirle “que volvieran y que Magnum traiga la botella”.
Los San Bernardo suelen llevar una botella de whisky colgada al cuello que utilizan en labores de rescate. Sin duda es una de las mayores características de esta raza. Si ves uno y no estás muy seguro de si es o no un San Bernardo, solo mira su cuello y busca ese lindo barril que llevan colgado.
Lo que no quedó muy claro es por qué el Papa pidió que la llevaran, ¿le gustará el whisky?
Bromas aparte, lo que parece agradar a los creyentes de la religión que regenta el Papa es que parece que el pontífice argentino es cercano y está siempre dispuesto a gastar su tiempo por los demás.
Si le gustan los perros y los trata bien, seguro que ya ha ganado puntos con aquellos que, aunque no sean católicos, aman los animales.
¿Ganará la Iglesia más feligreses por ello? El tiempo lo dirá…