Hongos: ¿animales o plantas?

Los hongos son seres vivos que aún continúan siendo, en parte, un misterio para la comunidad científica. Las relaciones filogenéticas entre los grupos menos conocidos que comprenden al reino Fungi aún siguen bajo estudio, por lo que no es extraño que se realicen cambios en la nomenclatura de diversos géneros y especies.

Con características tanto de plantas como de animales, los hongos pertenecen a un reino lleno de secretos y matices. Si quieres saber más acerca de estos curiosos seres vivos, te animamos a seguir leyendo.

Sobre los reinos y la vida

Según la Real Academia Española, un animal se define como “un ser orgánico que vive, siente y se mueve por propio impulso”. En cambio, este mismo organismo oficial describe a las plantas como “seres vivos autótrofos y fotosintéticos, cuyas células poseen pared compuesta principalmente de celulosa y carecen de capacidad locomotora.”

Como podemos ver en esta pequeña sección de lingüística, los hongos tienen características de ambos pero no se catalogan correctamente en ninguno de los dos grupos:

• Estos seres vivos son heterótrofos, es decir, requieren de materia orgánica para producir energía, a diferencia de los vegetales, que la fabrican a partir de luz y compuestos inorgánicos (autotrofía).
• Los hongos no se mueven por impulso propio y además, presentan una pared celular compuesta por quitina que no está en las células animales.

Así pues, los hongos no son ni animales ni plantas, aunque estudios filogenéticos demuestran que están más emparentados con los animales que con los vegetales. Siguiendo esta clasificación, nos quedan cinco reinos de seres vivos bien delimitados:

• Reino Animalia: seres vivos eucariotas (con células nucleadas), heterótrofos, pluricelulares y con tejidos.
• Reino Plantae: seres vivos eucariotas, fotosintéticos y sin capacidad locomotora, cuyas paredes celulares están compuestas de celulosa.
• Reino Fungi: son los mohos, levaduras y organismos productores de setas.
• Reino Protoctista: todos los organismos eucariotas que no forman parte de los reinos anteriores.
• Reino Monera: comprende a los organismos microscópicos unicelulares sin núcleo delimitado (procariotas). Aquí encontramos a las bacterias.

Tal y como se muestra en esta clasificación, los hongos son seres vivos que se han quedado a medio camino entre el reino animal y el vegetal. A continuación, te mostramos algunas de sus características más llamativas.

El mundo de los hongos

Los hongos han colonizado diversos hábitats. Desde un punto de vista ecológico, existen distintos tipos:

• Saprófitos: se alimentan de los restos de organismos vivos, ya sean piel, cadáveres, hojas caídas o excrementos, entre otros.
• Liquenizados: levaduras que viven en la superficie de los líquenes, con una función de simbiosis aún desconocida.
• Micorrizógenos: hongos en simbiosis con plantas mediante una interconexión con sus raíces. Las plantas obtienen del hongo nutrientes minerales y agua, mientras que este recibe vitaminas e hidratos de carbono de origen vegetal. Se calcula que un 80 % de las especies de plantas terrestres realizan este tipo de simbiosis.
• Parásitos: se instalan sobre un organismo (en su piel, por ejemplo) o dentro de él para obtener nutrientes, a costa del perjuicio del ser vivo invadido.

Como podemos observar, los hongos se las han tenido que ingeniar para conseguir materia orgánica de forma eficaz sin poder moverse o cazar como hacen los animales. Esto nos hace preguntarnos, ¿cómo es posible que unos seres vivos que no son capaces de buscar alimento hayan podido perdurar en la historia evolutiva?

La clave está en la reproducción

La respuesta es sencilla, pues los hongos presentan una impresionante capacidad reproductiva. A diferencia de lo que se cree, el ser vivo no es la seta en sí misma. El aparato vegetativo del hongo está compuesto por el micelio, un conjunto de hifas (filamentos pluricelulares) que se extienden bajo la tierra. La seta es el cuerpo fructífero que contiene las esporas, las cuales se dispersan por el medio para dar lugar a nuevos individuos.

Las esporas son transmitidas por el medio ambiente de forma aérea, por gravedad, o utilizando vectores tales como otros seres vivos para su dispersión en distintos ecosistemas. Debido a su resistencia y capacidad de dispersión, la espora como método de reproducción ha asegurado el éxito evolutivo de los hongos.

Seres vivos silenciosos de gran interés

Como hemos podido ver, los hongos, de forma usual, suelen pasar desapercibidos por su falta de movimiento y visibilidad escasa. A pesar de ello, son unos seres vivos fascinantes de costumbres muy atípicas que no se observan en el reino animal.

Además, los hongos han jugado un papel muy importante en la cultura humana, pues nos han otorgado alimento, bebidas como la cerveza o fármacos tan importantes como la penicilina.