Hiena rayada: hábitat y características

Las hienas son animales muy populares por los típicos gemidos similares a risas burlonas. En la actualidad existen 4 especies que habitan en Asia y África. Una de ellas es llamada hiena rayada, quien recibe esa denominación debido al aspecto de su pelaje, con varias franjas en sus patas y su torso.

Se encuentra agrupada en la familia Hyaenidae y su nombre científico es Hyaena hyaena. Se trata de una de las hienas más pequeñas, no obstante, no menos importante en su ecosistema. Conoce todos los detalles sobre su vida salvaje, dónde habita, sus características y su estado de conservación. No te quedes sin leer.

¿Cuál es el hábitat y distribución de las hienas rayadas?

El hábitat de este mamífero incluye regiones áridas, semiáridas y montañosas. Puede abarcar zonas de vegetación boscosa con matorrales o áreas más abiertas como las sabanas con pastizales o arbustos espinosos. Sin embargo, prefiere los lugares despejados, con disponibilidad de agua y trata de evitar los de abundante densidad de árboles y altitudes elevadas. Aunque se han encontrado hasta a 3300 metros sobre el nivel del mar.

Estos hiénidos pueden andar cerca de asentamientos humanos. Les gusta alimentarse de la basura y su carroña, por lo que no le temen al hombre.

Estas hienas poseen una distribución amplia en África, abarcando parte del norte, el este y occidente. De igual manera, están presente en el Medio Oriente, el subcontinente indio y Asia. Se extienden hasta el Cáucaso.

La hiena rayada y sus características

El cuerpo de la hiena rayada tiene por una cabeza con un hocico puntiagudo (al igual que sus largas orejas), 4 patas con 4 dedos cada una y uñas retráctiles. Además, tiene una cola larga con pelos gruesos. Las patas posteriores son más cortas que las anteriores.

El tamaño de este carnívoro es mediano, con una media de alrededor de un metro y de 65 a 80 centímetros de altura. No existen diferencias entre machos y hembras en relación con estos valores, por lo que presentan dimensiones similares.

El carácter más distintivo es su coloración gris o marrón con unas líneas negras resaltantes, horizontales en las piernas y verticales en el torso. La garganta también se presenta rayada. Este patrón es el motivo de su nombre común.

El pelaje es largo y se ha determinado que pueden erizarlo con el fin de parecer más grandes de lo que son. Así, emplean este comportamiento para defenderse e intimidar a sus enemigos. El hocico es de color negro.

Comportamiento

Por lo general, la conducta de H. hyaena es solitaria y nocturna. No obstante, durante cortos períodos de tiempo puede verse en grupos familiares, en especial en la guarida. Para alimentarse también prefieren hacerlo de manera individual, cazar en conjunto es una práctica que en esta especie es poco habitual, a diferencia de otros tipos de hienas.

Con relación a las vocalizaciones, no se encuentran muy desarrolladas. El repertorio vocal no es variado, pero incluye gruñidos, gemidos y las aparentes risas características de estos animales.

Los encuentros sociales entre diferentes individuos involucran acciones de olfateo de nariz y la región ano genital. Esto debido a que estas hienas poseen unas glándulas anales que utilizan para comunicarse.

¿Qué come la hiena rayada?

La principal fuente de sustento de H. hyaena es la carroña y los desechos humanos. Su dieta es muy variada, incluye animales vertebrados e invertebrados. En especial mamíferos de considerable tamaño como cebras, gacelas y ñus. Su mandíbula es muy fuerte, lo que le permite partir los huesos sin problema.

Este comportamiento como carroñeros, es lo que convierte a estas hienas en animales indispensables en el reciclado de nutrientes y la limpieza de los ecosistemas donde habitan.

Para complementar su alimentación también incluyen alimentos vegetales (como frutas), por lo que pueden ser consideradas omnívoros. Sin embargo, esto lo hacen más que todo en temporadas de escasez. Además, suelen consumir animales más pequeños como reptiles, aves, roedores e insectos.

Reproducción de Hyaena hyaena

La reproducción de este carnívoro es de tipo sexual. Se ha descrito gracias a las observaciones realizadas en cautiverio. El macho persigue unos días a la hembra hasta que esta le permite aparearse. La cópula se produce varias veces en 24 horas.

La gestación de la hiena rayada es de 3 meses (90 días). Tras este período prepara su madriguera para el parto. Puede dar a luz alrededor de 1 a 5 cachorros por camada. Las crías nacen indefensas, ciegas, con el color del pelaje de blanco a gris y sus rayas negras son claras.

Las madres nutren a sus crías con leche materna por algunos meses, sin embargo, comienzan a introducir alimentos sólidos a partir del primer mes. Para ello, seleccionan piezas de comida que llevan hasta la guarida. Machos y hembras alcanzan la madurez sexual entre los 2 y 3 años.

Estado de conservación

A pesar de su amplia distribución, este hiénido se encuentra clasificado en la categoría de “casi amenazado” de la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, por lo que no está excepto de peligros en su hábitat natural. Además, en la región del Mediterráneo está catalogado como “vulnerable”.

Sus principales amenazas involucran al ser humano, ya que se trata de un animal muy perseguido por atacar los cultivos y saquear tumbas. También se utilizan algunas partes de sus órganos en la medicina tradicional o se comercializan sus pieles de manera ilegal en algunas localidades. Además, aunque parezca extraño en ciertas áreas se usan los jóvenes como mascotas.

En resumen, la hiena rayada es un mamífero muy importante en su ecosistema, ya que se encarga de reciclar los nutrientes y limpiar el ambiente de los desechos que dejan otros animales. Esto debido a su preferencia por la carroña, lo que nos recuerda que todos los seres vivos somos indispensables para el equilibrio ecológico, incluyendo a estos carnívoros que pueden parecer desagradables.