Cómo desinfectar las heridas de mi perro en casa

Los cortes en tu mascota se pueden curar en el hogar, para lo que hay que tomar medidas para evitar que se lama o rasque, aunque primero hay que evaluar si se trata de un daño menor; en caso de que el percance sea grave –por ejemplo, hemorragias intensas o que asome el hueso– habrá que acudir inmediatamente al veterinario

Curar heridas de perro

Los cortes son algo habitual en todos los animales; nos pasa a los humanos, a los gatos y, por supuesto, a los perros. La mayoría de ellos son minúsculos y no requieren atención, pero cuando son cortes muy grandes, hay que desinfectar y tratar la herida para que no se convierta en un problema mayor.

Desinfectar las heridas de mi perro

Las infecciones son una de las enfermedades más recurrentes en los animales, lo que las hace también la principal causa de complicaciones en la mayoría de los casos. Una herida mal tratada puede complicar la vida de nuestra mascota.

Pero no debemos alarmarnos, la clave para curar y desinfectar las heridas está en mantener la calma, evaluar la situación y saber si somos o no aptos para tratar la herida de la mascota. Una vez que logremos comprobar la gravedad de la herida, es hora de proceder a curarla

Para ellos, los elementos necesarios se pueden conseguir en cualquier farmacia, y no necesitamos de alguna medicina especial para mascotas.

Cómo evaluar una herida

Cuando nuestras mascotas juegan o hacen su trabajo, es recurrente ver que el animal se queje de ciertos síntomas a lo largo del día. Si el llanto o grito es muy frecuente, es aquí cuando debemos examinar a nuestro compañero para ver lo que le aqueja.

Alternativas al collar isabelino

Al detectar una herida, nunca debemos tocarla con las manos desnudas o lavarla con agua sola, debido a que podríamos provocar una infección y empeorar la situación.

La mayoría de los expertos recomiendan colocarle un bozal al can para evitar que nos muerda durante el tratamiento; de esta forma no nos complicaremos en su cuidado y se hará más fácil su atención. De igual forma, nos recomiendan cortar el pelo alrededor de la herida con una tijera pequeña.

Si se observan tendones, hueso o una hemorragia constante, pues la herida está más allá de nuestra experticia. Así que lo mejor es trasladar al paciente lo más pronto posible al veterinario. Os recomendamos aplicar presión en la herida durante el traslado para calma la hemorragia.

Por el contrario, si la herida deja de manar sangre de forma hemorrágica y solo muestra la carne, somos aptos para tratarla eficazmente. Pero antes debemos saber cómo desinfectar la herida.

Proceso para desinfectar las heridas de mi perro

En primer lugar, debemos limpiar la zona afectada de mugre y otros elementos que puedan estar presente. Para ello, se debe utilizar un antiséptico con yodo o agua jabonosa; este proceso lo puedes hacer echando el líquido directamente o con una gasa antiséptica.

El agua templada te ayudará además a que el perro permanezca tranquilo, lo que será sumamente útil durante el resto de la curación. Este lavado debe prolongarse al menos durante dos minutos.

Evitar que el perro se lama la herida

Os recomendamos la gasa, ya que no deja fibras en la herida; en contraste con el algodón, que sí lo hace. Una vez hecho esto, es hora de aplicar la solución fisiológica que ayudará a terminar de limpiar la herida, empezar a cerrarse y continuar con el proceso de cicatrizado.

La zona afectada podría inflamarse con el paso del tiempo, así que aplicar una par de bolsas con hielo para calmar el dolor no están de más. Recuerda que si quieres aplicar otros productos sobre la herida –pomadas, cicatrizantes, entre otros– debes cerciorarte primero que son aptos para el uso en animales.

Para concluir

Una vez que hayamos desinfectado la herida, es hora de dejarla en paz, y tratemos de evitar que nuestra mascota llegue a abrirla de nuevo o rascarla incesantemente. La mayoría de las veces, solo basta con dejar la zona afectada al aire libre para que cicatrice más rápido.

Sin embargo, si nuestra mascota es inquieta durante estos casos, lo mejor es vendarla para evitar algo roce indebido. Adicional a esto, debemos colocarle a nuestro paciente un collarín de plastico o isabelino para evitar que la lama o quite la venda con sus dientes.

Es recomendable revisar la herida vendada para verificar que esté sanando adecuadamente. Si observas que la hinchazón no para, la herida tiene presencia de pus o algún otro elemento extraño, de inmediato debes llevar a tu mascota al veterinario.

Por el contrario, si la herida está en mejor estado y no presenta novedad alguna, es hora de quitar el collarín a tu mascota, que a buen seguro que te lo agradecerá.

Scroll al inicio