El maravilloso canto del cenzontle

Los cenzontle o sinsontes son paseriformes capaces de imitar el sonido de otras aves, otros animales o incluso el sonido de objetos.

Algunas aves son conocidas por sus vistosos colores y otras por su canto, como es el caso del cenzontle o sinsonte norteño (Mimus polyglottos). Esta pequeña ave paseriforme tiene la particularidad de imitar el canto de otros pájaros, tonos animales e incluso sonidos artificiales.

El cenzontle habita las tierras de América del Norte, Central y Caribe y en Puerto Rico se lo conoce como ruiseñor. A pesar de compartir nombre con él, no pertenece a la misma familia que el ruiseñor común, aunque físicamente ambos son muy parecidos.

¿Cómo es el cenzontle o sinsonte norteño?

El cenzontle es un ave paseriforme de unos 22 centímetros de longitud y de 31 a 36 centímetros de envergadura, similar al tamaño de un mirlo. Es de color gris, más oscuro en las partes dorsales y pálidas en las ventrales.

También presenta un par de franjas blancas en las alas, concretamente en los extremos de las plumas coberteras medianas y grandes y a ambos lados de la cola, que es larga, redondeada en el extremo y con una línea negra central.

Un cenzontle sobre una rama.

¿Por qué es famoso su canto?

Este pájaro imita las llamadas de otras aves y los sonidos de animales —o tonos artificiales—, pero la especie también cuenta con un canto primario que utilizan los machos para atraer a las hembras en primavera y comienzos del verano. Este puede tener ligeras variaciones en el patrón de sílabas de su canto entre territorios alejados.

En general, las aves mímicas —aquellas que imitan el canto de otras aves— prefieren los hábitats densos, con matorrales que ofrecen poca visibilidad. Así pues, para estas especies, el canto es una herramienta importante para relacionarse y lo hacen sin parar. Esto asegura, en parte, el éxito de su reproducción.

La selección sexual del cenzontle

Los sinsontes del norte son aves diurnas y solitarias. Los machos son territoriales y delimitan sus espacios mediante el canto, que también utilizan para atraer a las hembras. Durante el cortejo realizan exhibiciones que, junto al canto, sirven para llamar la atención de posibles parejas reproductoras.

El modo de cantar del sinsonte lo hace distinguible, independientemente de los patrones que utilice debido a la alta continuidad que posee su canto. Los pájaros de canto versátil tienden a ser cantantes continuos. Además, la imitación los ayuda a aumentar el carácter individual de una canción, ya que no es probable que 2 individuos tengan tonos exactamente iguales.

Los machos con repertorios de cantos más amplios tienen mayor ventaja a la hora de adquirir territorios, atraer parejas y excluir a posibles competidores de su terreno.

La edad y experiencia son indicativo de las habilidades de supervivencia y la obtención de recursos y se refleja en los diferentes cantos que pueda realizar un macho de cenzontle. Estas cualidades son las que valoran las hembras a la hora de elegir pareja y dejar descendientes.

Aunque ahora el sinsonte habita también las zonas urbanas, parece que ha retenido esta estrategia evolutiva de sus ancestros del bosque.

Otras aves mímicas

El sinsonte norteño o cenzontle no es la única especie de ave imitadora. Una de las más conocidas es el ave lira (Menura novaehollandiae), endémica de los bosques de Australia.

Este ave, parecida a un faisán, tiene un corto canto propio de la especie que se puede oír hasta a un kilómetro de distancia y también muestra dialectos locales como el sinsonte, pero lo más característico es su poder de imitación.

Los machos pueden imitar casi cualquier sonido, desde otros machos más viejos y otras especies de aves a sonidos mecánicos, como el obturador de una cámara, la alarma de un coche o hasta una motosierra.

Como ocurre con el cenzontle, el canto parece ser importante a la hora de buscar pareja y evitar competidores potenciales y la imitación otorga suficiente capacidad para hacerlo versátil.

El canto es una de las formas de comunicación en las aves, muy importante en muchos aspectos de su vida: marcar territorio, buscar pareja, ubicar y llamar a un compañero, entre otras. El canto tiene un componente innato y aprendido importante y, como hemos visto, no es único de una especie, ya que existen dialectos y aves imitadoras de otras aves.

Bibliografía

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  • Structure in Primary Song of the Mockingbird (Mimus polyglottos). (1965). The Auk, 82(2), 161–189.
  • Howard, R. (1974). The Influence of Sexual Selection and Interspecific Competition on Mockingbird Song (Mimus polyglottos). Evolution, 28(3), 428-438.
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