Los tucanes se caracterizan por presentar un hermoso pico alargado y colores vistosos. Dichos rasgos los han hecho populares en diferentes países, aunque su distribución se restringe al ecosistema de clima tropical del continente americano. El aspecto típico del tucán está adaptado para su alimentación, por lo que su apariencia no es solo una forma de lucir rasgos fantásticos.
Estas aves pertenecen al grupo de los ranfástidos (Ramphastidae), el cual está constituido por varias especies. Algunos de ellos viven en selvas tropicales en las que abunda la vegetación, los frutos y los insectos, por lo que su dieta suele adaptarse a sus modos de vida. Sigue leyendo y conoce más acerca de la alimentación del tucán.
Características del tucán
Estas aves llegan a tener tallas entre 30 y 65 centímetros de altura, con picos grandes que alcanzan los 20 centímetros de largo. Por si fuera poco, cuentan con un plumaje colorido y brillante que les hace exhibir tonalidades azules, amarillas, rojas y verdes, pero con una elegante base de plumas negras. Además, en algunas especies los ojos resaltan por estar rodeados de los colores brillantes.
Los tucanes no son un grupo que esté muy adaptado al vuelo constante, así que sus alas son pequeñas y redondeadas. En contraposición, sus patas son mucho más fuertes y pasan la mayor parte de su vida sobre los árboles. De hecho, los dedos también juegan un papel importante en este caso, ya que la mitad están hacia el frente y los demás hacia atrás, lo que les ayuda a sujetarse mejor a las ramas.
¿Qué come el tucán?
Los bosques tropicales suelen tener una vasta cantidad de recursos alimenticios y los tucanes tienen muchas presas para escoger. No obstante, estas aves prefieren consumir frutos por su alto contenido en agua y azúcares. Esto no significa que sean frugívoras por completo, pues también consumen una gran variedad de artrópodos, huevos, pichones de otras aves e incluso algunas culebras.
Según un artículo publicado en la revista científica The Condor, la mayoría de especies de tucanes consumen solo frutas. Por esta razón, se clasifican como animales frugívoros, aunque algunos llegan a comer otras presas que son más ricas en proteínas. Dicha estrategia parecer ser una adaptación para solventar la demanda de energía durante la época de reproducción.
La dieta cambia por la altura
Los tucanes también son capaces de vivir a diferentes altitudes, desde cadenas montañosas hasta selvas al nivel del mar. Por esta razón, no es raro observar que la dieta de las aves cambie según el lugar en el que se desarrollen. Sin embargo, estas modificaciones parecen ser un poco más sutiles de lo que se podría pensar.
En una investigación realizada por la Universidad Estatal Paulista se observó que los tucanes que viven cerca del nivel del mar tienen una dieta basada casi por completo en frutas. Por el contrario, aquellos que habitan en las montañas tienden a alimentarse de insectos, plantas y frutas.
Esto parece estar ligado a la escasez de frutos en bosques de gran altitud, lo que provoca que el ave adapte su dieta para compensar los nutrientes ausentes en forma de frutos.
Visto de otra forma, la flexibilidad de la dieta de estas aves les permite compensar la deficiencia de nutrientes de sus hábitats. Gracias a ello, son capaces de vivir en muchas zonas y soportar las condiciones adversas.
Beneficios del tucán en el ecosistema
El papel que tiene el tucán en el ecosistema es muy importante, ya que se encarga de dispersar las semillas que están dentro de los frutos que come. Además, su estómago pequeño y su metabolismo rápido lo hacen capaz de procesar su alimento en apenas una hora.
En consecuencia, el tucán necesita comer varias veces al día para poder mantener los nutrientes necesarios en su dieta, lo que mejora su capacidad para dispersar semillas.
El pico del tucán
El tamaño del pico del tucán le permite sostener y comer casi cualquier tipo de fruta. Esto no solo se debe a la longitud, sino que también presenta una ligera dentición que sirve para cortar o triturar los alimentos. De hecho, esta estructura no es tosca ni pesada, ya que tiene una forma especial que favorece la liviandad.
La función del pico no termina ahí, pues sirve como un termorregulador del cuerpo de los tucanes. Trabaja de manera similar a la lengua de un perro: hace pasar sangre a lo largo de la estructura para enfriarla con el aire. Con esto, el ave puede mantener su temperatura corporal sin tener que gastar mucha energía.
¿Puedo tener un tucán de mascota?
Es probable que pienses que estas aves son una excelente opción como mascota. Sin embargo, en la mayoría de los países es ilegal tener a estos ejemplares, lo que hace imposible adquirirlos. Esto no solo se debe a que algunas especies se encuentran en categoría de riesgo, sino a que las necesidades de estos animales son muy costosas y pocos tutores las cumplen en su totalidad.
Los tucanes esconden bastantes secretos detrás de su colorido aspecto. Esto incluye su gran habilidad para adaptarse a los recursos de su ambiente, así como su manera de utilizar todas las características a su favor para sobrevivir. Sin embargo, esto no siempre es suficiente para hacer frente a problemas como la cacería ilegal y la deforestación de su hábitat.
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