6 datos curiosos sobre el cachalote

El cachalote, con su cabeza cuadrada característica, ha sido la inspiración de grandes relatos y fantasías. A pesar de su tamaño, avistar a estos mamíferos fascinantes es una tarea difícil y llegar a conocerlos, cuestión de años de paciencia y muchos viajes en embarcaciones.

Hasta ahora, se han descubierto varias cosas interesantes sobre los cachalotes que puedes leer en los siguientes párrafos. Desde su estructura dentaria hasta su mecanismo respiratorio y de inmersión, este titán de los mares no deja indiferente a nadie.

Características del cachalote

El cachalote (Physeter macrocephalus) es una especie de mamífero marino, el único miembro del género Physeter. A pesar de su aspecto, no se trata de una ballena, sino de un odontoceto, más cercano a delfines y orcas que a ballenas con barbas. Se distribuye por las zonas cálidas de todos los océanos.

Los cachalotes son cetáceos cazadores que se alimentan de calamares y peces, sumergiéndose hasta 3 kilómetros bajo el agua. Algunas de sus presas son cefalópodos gigantes, pues en ocasiones se pueden ver las cicatrices en forma de ventosas a lo largo de su piel. Normal que estos gigantes hayan inspirado leyendas, ¿verdad?

Además, cabe destacar que los odontocetos suelen viajar en pequeños grupos familiares, ya que son animales gregarios. Se reproducen en ciclos de entre 3 y 4 años y tienen una sola cría: la gestación dura 14 a 16 meses y la lactancia entre 19 y 42 meses. Aunque las crías maman casi año y medio, se han llegado dar casos de jóvenes que lo hicieron hasta los 13 años.

Ya solo por su propia idiosincrasia son animales curiosos, como puedes comprobar. De todas formas, si te has quedado con ganas de más, aquí tienes 6 datos curiosos sobre el cachalote que no te puedes perder.

6 datos curiosos sobre el cachalote

Los cachalotes han adaptado su vida en todos los sentidos a la supervivencia en mar abierto. Como su interacción con el medio terrestre es nula, han desarrollado una serie de características impresionantes. A continuación, te las contamos.

1. La cabeza más grande del mundo

El cachalote tiene la cabeza y el cerebro más grandes de la Tierra. Los machos adultos pueden alcanzar hasta 20,5 metros de longitud y un peso de hasta 57 toneladas, lo que convierte a esta especie en el cetáceo más grande qué existe. Para que te hagas una idea, su cerebro es 5 veces más pesado que el de un ser humano, con unos 10 kilos de masa total.

2. En realidad, todo en el cachalote es grande

Los cachalotes no solo tienen el récord de tamaño en lo que a la cabeza se refiere, ya que también portan los dientes más grandes del mundo. De hecho, son piezas muy valoradas en los pueblos del océano Pacífico. El corazón tampoco se queda atrás: pesa más o menos lo mismo que 2 humanos adultos.

3. El animal más ruidoso del mundo

El nivel de presión sonora más alto jamás registrado de un animal fue el de un cachalote en la costa del norte de Noruega. Ese chasquido alcanzó los 235 decibelios. Para que te hagas una idea de la magnitud de este sonido, un ser humano solo puede aguantar 85 decibelios durante 8 horas seguidas antes de ponerse en riesgo.

El cachalote utiliza estos chasquidos como parte de la ecolocalización, sentido que usan para orientarse y buscar presas. Sin embargo, existe la hipótesis de que, con estos chasquidos, también es capaz de matar o aturdir a sus víctimas con la potencia de la onda sonora.

4. Moby Dick era un cachalote

La famosa ballena blanca de la novela no era tal, pues estaba basada en 2 ejemplares: una ballena que hundió el barco Essex y un macho de cachalote llamado Mocha Dick. Este último era albino, lo que inspiró la coloración y cabeza cuadrada de la criatura de la novela.

5. Sus heces son de lo más preciado del mar

Sí, las heces de los cachalotes son de una importancia ecosistémica inestimable. Cuando las expulsan y flotan hacia la superficie, actúan como fertilizante del fitoplancton. La fotosíntesis de este último produce la mayor parte del oxígeno que respiramos, así que debemos dar las gracias por el abono natural del cachalote.

Además, las heces suelen ir recubiertas del ámbar gris, una sustancia secretada en el intestino para proteger a los animales de los restos de presas difíciles de digerir —como los picos de los calamares—. En el pasado, este compuesto era tremendamente caro, por su capacidad fijadora y por formar parte fundamental de algunos perfumes.

6. Los cachalotes duermen en vertical

Primeramente, se pensaba que estos animales marinos tenían sueño unihemisférico, como los delfines y otros cetáceos, pero parece ser que no es el caso. Por eso, para tener el espiráculo cerca de la superficie —y porque su cabeza es lo que mejor flota del cuerpo—, los cachalotes duermen en posición vertical.

Este animal, aunque es una maravilla, a veces solo es buscado para matarlo por el valor de sus piezas dentales y el ámbar gris, por las creencias de sus capacidades curativas y afrodisíacas. Aunque afortunadamente ya se están tomando medidas para proteger a los cachalotes, aún queda mucho camino para asegurar que estos titanes sigan surcando los océanos.