10 Insectos que comen madera

Los insectos que comen madera son imprescindibles para el correcto funcionamiento de los ecosistemas. Aquí presentamos varias especies poco conocidas.

Insectos que comen madera.

En la naturaleza, toda la materia orgánica presente es aprovechada. Aunque sea poco nutritiva o difícil de digerir, ciertas especies son capaces de alimentarse y aprovechar esos recursos. Estos organismos permiten que esos nutrientes que no pueden digerir el resto de especies se pongan de nuevo en circulación dentro del ecosistema. Los insectos que comen madera son un claro ejemplo de este hecho.

En este aspecto los insectos, una clase de artrópodos, presentan una gran diversidad de especies y formas de alimentación diferentes. Todos ellos tienen como característica común que presentan 3 pares de patas, 2 pares de alas y 2 antenas. En esta oportunidad, nos centraremos en los insectos xilófagos.

¿Qué es la xilofagia?

La xilofagia es un término usado en ecología para describir los hábitos de un consumidor primario cuya base alimenticia es la madera. En muchas ocasiones, los animales xilófagos tienen relaciones simbióticas con otros microorganismos para poder digerir la madera, ya que esta tiene elevadas cantidades de celulosa y lignina que dificultan su digestión y aprovechamiento.

Los insectos que comen madera son unos de los pocos animales que consiguen aprovechar este material como alimento, por lo que realizan un papel de descomposición fundamental en la naturaleza. Aún así, en ocasiones acarrean problemas a la industria e infraestructuras humanas.

¿Por qué los insectos comen madera?

La existencia de insectos que comen madera es posible, según estudios, gracias a su microbiota. En ella podemos encontrar protistas, hongos, arqueas y bacterias, aunque las 3 primeras se encuentran principalmente en insectos xilófagos.

Estos microorganismos benefician enormemente a sus hospedadores, regulando la fisiología y desarrollo de los insectos y protegiéndolos de patógenos y sustancias nocivas. Se encuentran en el tracto digestivo del invertebrado y, además, posibilitan que pueda obtener energía de material de origen vegetal, como la celulosa.

La digestión de la madera supone romper enlaces complejos presentes en la celulosa y la lignina. Por ello, la gran mayoría de insectos que comen madera poseen unas mandíbulas especiales que les permite triturar el alimento. Una vez ingerida, los microorganismos y hongos de la flora intestinal se encargan de romper estos enlaces complejos, permitiendo así a los insectos aprovechar sus nutrientes.

Hay una gran cantidad de insectos que se alimentan de madera. A continuación, te presentamos unos cuantos.

Termitas de la madera

Las termitas son insectos pertenecientes al orden Blattodea e infraorden Isoptera. Se confunden normalmente con hormigas aladas, aunque filogenéticamente están más emparentadas con las cucarachas. En la actualidad hay descritas cerca de 3000 especies, de las cuales 150 son consideradas plagas.

Las termitas se encuentran prácticamente en todos los continentes y son insectos eusociales. Viven en una sociedad con diferentes funciones y sus miembros se diferencian en castas. Como en las hormigas, se puede distinguir a la reina de las obreras, por ejemplo.

De todas formas, a diferencia de hormigas y abejas, las colonias están lideradas tanto por un macho como por una hembra. La pareja reproductora está junta de por vida y la reina puede llegar a vivir 25 años y poner más de 1000 huevos al día. Encontramos 4 familias diferentes de termitas:

  • Familia Kalotermitidae: son las conocidas como termitas de madera seca. Producen sus colonias dentro de la propia madera y tienen adaptaciones metabólicas para conservar el agua, lo que les permite tolerar largos períodos de sequía. Sus mandíbulas están modificadas con zinc para poder consumir la madera seca, mucho más dura que la que tiene humedad.
  • Familia Rhinotermitidae: son termitas primitivas que nidifican bajo tierra, generalmente en raíces y tocones. Las colonias son pequeñas y difíciles de detectar.
  • Familia Termitidae: aquí se encuentra el mayor número de géneros y especies conocidos. Construyen nidos subterráneos, epigeos y arbóreos.
  • Familia Termopsidae: estas termitas realizan sus nidos en madera con un alto porcentaje de humedad. Suelen colonizar tocones, árboles caídos o aquellos colonizados por hongos.

Algunas curiosidades sobre las termitas

Las obreras son las encargadas de obtener y procesar el alimento. La degradación de la madera se consigue gracias a unos protozoos con los que tienen una relación de simbiosis. Una vez procesado el alimento, lo reparten al resto de la colonia, vomitándolo y poniéndolo a disposición de los demás integrantes.

Las termitas soldado son las únicas que no son capaces de producir su propio alimento, debido a la adaptación de sus mandíbulas a la defensa, mientras que las obreras pueden atravesar elementos como el hormigón para acceder a la madera. Además, para conseguir la microbiota necesaria, los juveniles necesitan ingerir las heces de los adultos.

A parte de ser insectos que comen madera, también en ocasiones son caníbales (comen individuos heridos o enfermos), necrófagos (consumo de cadáveres) y practican oofagia (consumo de huevos) para ayudar a mantener limpio el termitero. Sin duda, estos insectos lo aprovechan todo.

Las termitas son animales que construyen sus propios hogares.

Polillas de la madera

Estos artrópodos presentan un ciclo de vida en 4 fases (huevo, oruga, crisálida, polilla) y es en la fase de oruga en la que se alimentan de madera. Hay muchas especies de lepidópteros xilófagos y su estado larvario puede llegar a durar 3 años y causar daños importantes a múltiples especies de árboles. Destacan por su importancia económica los siguientes taxones:

  • Mariposa de taladro rojo (Cossus cossus): una vez eclosiona el huevo, las larvas de esta especie se mueven hacia el interior de la corteza y empiezan a horadar un túnel. Se alimentan de madera sana, que pueden predigerir gracias a una sustancia que segrega su piel. Cuando alcanza su máximo tamaño, la larva abandona el árbol y termina su ciclo bajo tierra.
  • Familia Hepialidae: dentro de esta familia hay una gran cantidad de especies que se alimentan de madera. Son relativamente fáciles de identificar, pues sellan la entrada del tronco con una cubierta llamada vestíbulo, la cual está formada por seda y madera.
  • Aepytus sp: el estado larvario dura aproximadamente 2 años y las larvas realizan túneles profundos (de hasta 15 centímetros) en árboles jóvenes y sanos.

Uno de los problemas más recientes que se está encontrando es la gran presencia de especies invasoras de varios lepidópteros xilófagos. Al carecer de depredadores naturales, son una plaga difícil de erradicar. Un ejemplo de ello es Paysandisia archon en la península ibérica, una especie que está causando grandes daños a los palmerales.

Una larva de mariposa de taladro rojo.
Una larva de mariposa de taladro rojo.

Escarabajos de la madera

Uno de los principales insectos que comen madera son los coleópteros. Los escarabajos se diferencian por su aparato bucal masticador y por el élitro, que es su primer par de alas modificado a modo de armadura. Su ciclo de vida consta de una metamorfosis completa con estados de larva, pupa e imago.

Las principales familias de escarabajos que se alimentan de madera son las Cerambycidae, Melolonthidae, Passalidae y Tenebrionidae. Se pueden encontrar unas familias u otras en el ambiente dependiendo del grado de descomposición de la madera. Las galerías de estos insectos suelen ser invadidas por depredadores en las últimas fases de descomposición, a través de las propias galerías.

Los coleópteros también poseen una fuerte relación de simbiosis con los microorganismos intestinales. Se ha comprobado que, en muchas especies, si las larvas —e incluso los adultos— no se alimentan de las propias heces son incapaces de digerir la madera. Dentro de los insectos que se alimentan de madera, destacan las siguientes especies:

  • Carcoma grande de la madera (Hylotrupes bajulus): los huevos de la especie son depositados en oquedades de la madera. Cuando las larvas nacen, se alimentan junto a los adultos con gran voracidad. Se pueden distinguir de otras especies por la forma irregular de las salidas al exterior y por la gran cantidad de polvo que generan.
  • Escarabajo del reloj de la muerte (Xestobium rufovillosum): su nombre viene dado por el ruido que hace el macho con la cabeza en la madera para atraer a las hembras. La especie consume árboles caducifolios como robles y hayas, aunque también puede verse en coníferas. La fase larvaria dura 3 años, aunque puede ser menor si la madera tiene hongos.
  • Carcoma común de los muebles (Anobium punctatum): es la especie más común y suele afectar a muebles en las viviendas. No ocasiona daños estructurales, y a diferencia de otros escarabajos, cuando las larvas van a realizar la metamorfosis se colocan cerca de la superficie, ya que los escarabajos adultos carecen de mandíbulas especializadas para comer madera.

Un escarabajo, de los insectos que se alimentan de madera.

Avispas de la madera

Las avispas de la madera pertenecen al orden de los himenópteros. Se diferencian de otras avispas gracias al ovopositor que presentan las hembras, especializado en hacer un pequeño orificio en la madera e introducir los huevos. Las más conocidas son las de la familia Siricidae.

A diferencia de otros insectos que comen madera, las larvas de estas avispas se alimentan principalmente de un hongo, con el que la hembra reproductora infecta al tronco. Además, también añaden un mucus tóxico que impide la circulación de agua y nutrientes dentro del tronco, lo que puede llegar a causar la muerte del árbol infectado.

Normalmente, las larvas ocupan troncos o ramas caídas y árboles enfermos, por lo que no suponen grandes problemas a la industria ni a las infraestructuras. Cuando van a terminar su ciclo, se colocan cerca de la superficie del tronco. Pueden estar hasta 5 años en forma de larva, dependiendo de la humedad de la madera. Algunas especies a destacar son las siguientes:

  • Avispa de la madera del pino (Sirex noctilio): esta avispa se caracteriza por poner sus larvas principalmente en pinos vivos, a los que normalmente causa la muerte. En este caso, es el hongo que inoculan (Amylostereum areolatum) junto a una toxina lo que más daños provoca al árbol.
  • Avispa gigante de la madera (Urocerus gigas): normalmente, se encuentra a esta especie en maderas blandas de troncos talados o de árboles enfermos. Las larvas pueden estar hasta 3 años dentro del tronco, y cuando emergen, pueden llegar a medir de 10 a 40 milímetros de longitud.
  • Urocerus albicornis: esta especie también se encuentra en simbiosis con un hongo. Destaca sobre el resto por ser invasora en gran parte del mundo, como Japón o la península ibérica, donde se cree que ha llegado en cargamentos de madera infectados.

Curiosidades sobre las avispas de la madera

A parte de estas especies cuyas larvas se alimentan de madera, hay varios himenópteros que utilizan la madera para construir sus nidos, como la avispa común (Vespula vulgaris) o la avispa de papel europea (Polistes domicula). Para ello, utilizan sus mandíbulas para obtener madera y fibras, y junto a su saliva, generan una pasta de papel con la que construyen sus nidos.

Por otro lado, encontramos avispas que generan agallas en los árboles, interfiriendo en la producción del fruto, debilitando al árbol haciéndolo sensible contra patógenos y hongos que le pueden causar la muerte. Un ejemplo conocido es la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus).

Otros de los insectos que comen madera.

¿Cómo tratar a los insectos que comen madera?

Los insectos que comen madera son imprescindibles para el correcto funcionamiento de los ecosistemas. Son grandes descomponedores de materia orgánica, pues permiten que los nutrientes entren de nuevo al sustrato, aumentando en muchas ocasiones el rendimiento de los cultivos.

Además, aquellos artrópodos que realizan sus principales funciones en la zona del suelo consiguen un aumento de la aireación de las raíces y de la absorción del agua y los nutrientes. Realizan labores tan importantes para los suelos como las lombrices.

Por otro lado, muchos de estos animales (como las termitas) se están comenzando a explotar para el consumo humano y ganadero, debido a su alto aporte de proteínas y su bajo coste de producción. Aún así, en muchas ocasiones suponen un conflicto con las infraestructuras humanas.

Los xilófagos y las construcciones humanas

Detectar el problema mediante revisiones periódicas del material es clave para poder combatirlo. Una vez localizado, hay que identificar la especie de la que se trata, y dependiendo de ello, se utilizarán unos tratamientos u otros.

La mejor técnica para evitar problemas es la prevención de los mismos. Para evitar que los insectos xilófagos se asienten en una instalación, se pueden poner barreras, con el fin de dificultar el ingreso a las construcciones o impregnar la madera con ciertos materiales (como el cromo) para evitar la aparición de nidos.

En caso de tener ya instalada una colonia de alguno de estos animales, se puede tratar mediante la introducción de sus depredadores naturales, la eliminación de la humedad y los choques térmicos de calor frío. El uso de insecticidas o componentes químicos será la última opción, debido a su alta toxicidad y compleja aplicación en muchos de los casos.

Unos de los insectos que comen madera.

Convivir con estos insectos puede llevarnos a conseguir múltiples ventajas a la hora de aumentar la productividad de los cultivos (mediante su microbiota, aireación del suelo y liberación de nutrientes al medio). Quizás así se pueda compensar la mala fama que tienen, debido a las pérdidas económicas que algunas especies ocasionan al ser humano.

Bibliografía

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