Periodos aleatorios de actividad frenética ¿qué son y por qué ocurren?

Los perros suelen tener sus periodos aleatorios de actividad frenética durante el día, mientras que los gatos los tienen durante la noche.
Periodos aleatorios de actividad frenética ¿qué son y por qué ocurren?
Cesar Paul Gonzalez Gonzalez

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 03 diciembre, 2021

Si eres tutor de un perro o un gato, seguro que te has topado con momentos en los que tu mascota comienza a correr o dar vueltas sin razón aparente. A estos eventos se les denomina periodos aleatorios de actividad frenética, los cuales son resultado de un aumento súbito de energía que hace a los animales querer moverse a toda velocidad.

Los periodos aleatorios de actividad frenética no son un peligro para la mascota, ya que representan una forma de liberar el estrés y el exceso de energía. Sin embargo, se deben tener ciertos cuidados, pues no todos los animales logran dimensionar los riesgos de sus actos. Sigue leyendo este artículo para que conozcas a fondo qué son y por qué suceden estos eventos.

¿Qué provoca los periodos aleatorios de actividad frenética?

Los periodos aleatorios de actividad frenética son provocados por una acumulación de energía y estrés en la mascota. Por lo tanto, si tu compañero animal no hace el ejercicio suficiente, es más susceptible de presentar este tipo de conductas. De hecho, este suceso no es aleatorio por completo, ya que existen factores específicos que pueden desencadenar el frenesí.

Las acciones que provocan esta actividad frenética cambian en cada animal. A pesar de esto, suelen ser tan simples como la presencia de su tutor, el estrés acumulado después de un baño o la emoción de un nuevo juguete. En consecuencia, no existe un orden en los desencadenantes, por lo que no es fácil evitar estos eventos frenéticos.

¿Los periodos aleatorios de actividad frenética son malos para las mascotas?

El frenesí que se produce durante estos momentos es una forma de liberar el exceso de estrés y de energía. Por esta razón, los periodos de actividad frenética son muy saludables para la mascota. Sin embargo, ten en mente que el animal no es capaz de pensar en las consecuencias de sus acciones y debes estar atento de que no se lastime.

A pesar de que puede verse como un beneficio para tu pequeño amigo, es importante tener en cuenta la frecuencia con la que se produce este evento. En otras palabras, si tu mascota presenta una gran cantidad de periodos frenéticos, esto podría significar que se encuentra bajo mucho estrés. Gracias a esto, podrías identificar si tu compañero necesita salir a jugar o a pasear con más frecuencia.

¿Cómo se observan los periodos aleatorios de actividad frenética en los animales?

Dichos eventos son muy conocidos en las mascotas, pero esto se debe a la convivencia tan cercana que tienen con sus tutores. De hecho, varios animales silvestres también pueden presentar eventos de frenesí. Algunos de los organismos domésticos y salvajes en los que se conocen este tipo de conductas son los siguientes.

Perro

Esta es la mascota en la que los periodos de frenesí son más efusivos y carismáticos. Por lo común, el can se encuentra estático antes de salir corriendo hacia cualquier dirección. Además, durante el trayecto salta y cambia de dirección con mucha gracia. Este proceso es divertido y relajante para el perro y no hay necesidad de preocuparse. S olo durará algunos minutos como máximo.

Mecanismos animales para adaptarse al frío.

Gato

El periodo frenético de los gatos suele ser un poco diferente al de los perros. Esto se debe al carácter peculiar que tiene cada uno de ellos. No obstante, se les puede ver correr a toda velocidad por la casa, aunque es más fácil detectarlos escalando con su increíble flexibilidad. Además, otra diferencia con los canes es la extensión del periodo de frenesí, ya que en la mayoría de los casos dura algunos segundos.

Un gato saltando del tronco de un árbol.

Wombat

El wombat es un representante famoso de la fauna australiana, ya que su apariencia es bastante carismática. Por si fuera poco, este pequeño animal también puede presentar periodos aleatorios de actividad frenética, durante los cuales comienza a correr por todo el espacio disponible que tiene.

Uno de los tipos de marsupiales.

Conejo

Los periodos frenéticos de los conejos son muy particulares, ya que utilizan sus pequeños saltos para moverse de un lado para otro. De hecho, según un estudio del Journal of the American Association for Laboratory Animal Science, el estrés de la jaula no incrementa la cantidad de estos eventos.

A pesar de que las condiciones de su hábitat sean correctas, los animales seguirán presentando periodos de frenesí.

Hurón

El hurón es otra de las mascotas (y animales salvajes) que también puede presentar este tipo de conductas. Estos animales son muy curiosos, por lo que les gusta escalar y escabullirse por los rincones. En consecuencia, es probable que sea difícil diferenciar un evento frenético de su comportamiento usual.

Un hurón grande.

Pon atención a las conductas de tu mascota

A pesar de que los periodos aleatorios de actividad frenética no son malos para la mascota, es posible que se confundan con otros problemas conductuales. Por ejemplo, si un perro persigue su cola de manera efusiva, podría significar que padece un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).

Esto puede generar la duda sobre cuándo un comportamiento es malo para el animal. Sin embargo, los tutores no están capacitados para dar una respuesta a ello. Por lo tanto, la mejor opción es acudir con un veterinario para que analice bien la situación. Además, también puedes grabar un video cuando tu mascota presente dicha conducta, ya que esto podría ser de ayuda para dar con un diagnóstico certero.

Los periodos aleatorios de actividad frenética no son un problema para la salud de los animales. De hecho, es un evento benéfico que les permite gastar toda su energía y sentirse tranquilos. A pesar de esto, siempre es bueno mantenerlos vigilados durante el frenesí, ya que podrían lastimarse por accidente. Recuerda que, si aún te quedan dudas, lo mejor es acercarte a un profesional de la salud animal para que las resuelva.


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