Guía para cuidar un insecto palo fácilmente

Bajo las condiciones adecuadas, puedes hacer que un insecto palo se sienta como en casa. ¡Descubre las mejores estrategias y los cuidados necesarios para el bienestar de esta exótica mascota!
Guía para cuidar un insecto palo fácilmente
Sebastian Ramirez Ocampo

Escrito y verificado por el médico veterinario y zootecnista Sebastian Ramirez Ocampo.

Última actualización: 22 marzo, 2024

Los insectos palo hacen parte del grupo de los fásmidos, especies que se caracterizan por el asombroso mimetismo que han conseguido a lo largo de años de evolución. Entre los principales cuidados de un insecto palo destacan una alimentación con especies vegetales, así como el acondicionamiento de un espacio con 3 veces la longitud de su cuerpo y dos veces su ancho. 

Aunque a simple vista pueden parecer delicados y difíciles de atender, la realidad es que son mascotas fáciles de mantener. En esta guía encontrarás cómo suplir las necesidades fisiológicas básicas de un insecto palo en cautiverio, así como información sobre su comportamiento en la naturaleza. ¡No dejes de leer este contenido y conviértete en un experto en la materia!

Características de los insectos palo  

Antes de iniciar con los aspectos relativos a su cuidado, es pertinente conocer cómo es el hábitat, la morfología y los comportamientos de los insectos palo en la naturaleza. Gracias a ello, se podrá tener una mejor idea de sus necesidades básicas en cautiverio.

Distribución y hábitat

De acuerdo con una publicación de la Revista IDE@ – SEA, la familia Phasmatidae comprende más de 3000 especies, entre las que también se incluyen los insectos hoja. Cuentan con una distribución casi global, con mayor presencia en las regiones tropicales y subtropicales.

En los ecosistemas ibéricos hacen vida los insectos palo:

  • 12 especies
  • 2 subespecies
  • 1 introducida por la acción del hombre

Tienen predilección por los siguientes hábitats, donde pasan gran parte del día inmóviles bajo las hojas de las plantas:

  • Jardines
  • Pastizales
  • Bosques húmedos

Morfología

Insecto palo (Phaenopharos khaoyaiensis) sobre la mano de un humano.
Phaenopharos khaoyaiensis es originario de los bosques tropicales de Tailandia y Bangladesh. Su esperanza de vida es de 12 a 16 meses. Crédito: Fungus Guy/Wikimedia Commons.

Como su nombre lo indica, el físico de estos insectos se caracteriza por la imitación de los troncos o las ramas de la vegetación donde habitan. Su cuerpo alargado está provisto por las partes que se mencionan a continuación:

  • Un par de antenas.
  • 6 patas articuladas.
  • 2 alas que pueden ser funcionales o no para el vuelo (en algunos casos).

Según una descripción de National Geographic, el tamaño de las especies varía entre media pulgada y las 13 pulgadas. De igual forma, algunos ejemplares pueden alcanzar las 21 pulgadas con las patas extendidas. Por esta razón, se catalogan como una de las familias de insectos más grandes del planeta.

Por regla general, las hembras son más largas que los machos.

Un artículo de la revista Methods In Enzymology indica que su coloración se manifiesta en función de los carotenoides presentes en las plantas que consumen. En este sentido, los insectos palo pueden exhibir los siguientes tonos:

  • Verdes
  • Rojizos
  • Marrones


Comportamientos

Son animales de hábitos nocturnos, pues durante el día permanecen casi que inmóviles y aprovechan la oscuridad para alimentarse y reproducirse. Su dieta es a base de especies vegetales, las cuales varían según la especie:

  • Endrino
  • Zarzamora
  • Escoba rubia
  • Espino blanco
  • Rosal silvestre
  • Manzano europeo

Además, como lo expone un estudio difundido en la revista Ecology Letters, los insectos palo tienen la capacidad de cambiar y adaptarse a nuevas plantas hospedantes. Esto quiere decir que pueden ampliar su nicho de alimentación e incluir nuevas especies vegetales como hábitat o fuente de nutrición.

Por otro lado, son capaces de reproducirse tanto de forma sexual como por partenogénesis. En el primer caso, es necesario un macho y una hembra para crear descendencia. Mientras que, en el segundo, la hembra pone huevos sin necesidad de fecundación, los cuales dan origen a nuevas crías al cabo de 4 a 6 meses.

Con frecuencia, se cree que el 100 % de las crías nacen hembras.

Este curioso fenómeno natural ha llevado a pensar que algunas poblaciones de insectos palo se componen del género femenino, de forma exclusiva. Sin embargo, sí se ha descubierto el nacimiento de un macho por partenogénesis, en el Reino Unido. Este hallazgo indica que pueden existir más.

Cuidados de un insecto palo en casa

Como pudiste observar, el estilo de vida de los insectos palo en la naturaleza no es demasiado complejo. Solo requieren de plantas para alimentarse y refugiarse, además de algunas condiciones ambientales que se detallarán a continuación.

¿Cómo adecuar el hábitat para su llegada?

En primer lugar, entre los cuidados de un insecto de palo debe considerarse que el insectario donde vivirá la mascota cuente con ciertas medidas especiales. Se debe recordar que necesitan un espacio de 3 veces la longitud de su cuerpo y 2 veces el ancho de este, como se indicó en las primeras líneas.

Por ejemplo, para una especie de tamaño medio, se puede adecuar un sitio con dimensiones de por lo menos 40 centímetros de alto, 30 centímetros de ancho y 35 centímetros de largo.

Esto se debe a que, a lo largo de su vida, los insectos palo realizan de 5 a 7 mudas de su exoesqueleto para poder crecer. Por lo tanto, es posible que al adquirir uno de estos animales, aún falte tiempo para conocer su tamaño real en etapa adulta. El insectario puede ser de vidrio o de una malla especial para insectos.

Para acondicionar de manera adecuada su hábitat en el hogar, es necesario cubrir el suelo con un material que absorba la humedad. Se pueden utilizar los siguientes elementos:

  • Vermiculita
  • Fibra de coco
  • Tierra de maceta
  • Piedras pequeñas

En cuanto a las condiciones ambientales, la temperatura óptima debe estar entre los 17 °C y 27 °C. Asimismo, la humedad debe oscilar entre un 60 y 70 %, como lo recomienda el Centro Veterinario de Animales Exóticos de Madrid.

Esto se puede lograr al rociar agua con un atomizador en las primeras horas de la mañana.

Sin embargo, debe realizarse con sumo cuidado, para no aplicar directo al insecto. En el caso de que se opte por un insectario de vidrio, es importante que cuente con un lugar por el que pueda ventilarse, pero que no permita el escape de las especies.

En el mercado existen muchas opciones de insectarios para los fásmidos. Crédito: Clínica Amik Veterinaria.


¿Cómo debe ser su alimentación?

Este es un punto clave dentro de los cuidados que requiere un insecto palo en cautiverio. Como se mencionó en líneas anteriores, se les puede proporcionar varias especies vegetales, aunque las más comunes y aceptadas son las mencionadas a continuación:

  • Rosal
  • Zarzamora
  • Manzano europeo
A la hora de elegir las plantas para incluir en el insectario, se deben evitar aquellas que se encuentren cerca de carreteras o en lugares donde se acostumbre a echar pesticidas químicos.

Para que se mantengan frescas, lo ideal es colocarlas sobre un jarrón con agua y cambiarlas cuando las hojas estén deterioradas o el tallo se encuentre seco. Recuerda que son especies que necesitan de alimento constante para sobrevivir.

Entre otras cosas, también se pueden añadir ramas o palos de otras especies vegetales, que, a pesar de que no las consuma, servirán para enriquecer su entorno.

¿Cómo debe ser su manejo?

Para evitar accidentes, lo mejor es extender la mano para que el insecto se pose sobre ella y al manipularlo, lo ideal es sujetarlo desde su torso. El motivo es que sus extremidades son muy frágiles, además de que pueden desprenderse como método de defensa al sentirse atrapados.

¿Cuál es la esperanza de vida de un insecto palo?

Bajo buenos cuidados, este puede llegar a vivir entre 10 meses a 1 año. Tal y como se describió, su ciclo biológico comprende varias etapas de muda, que inician cuando el insecto mide unos 3 centímetros de largo. Luego, cada mes realiza este proceso hasta alcanzar los 7 meses de edad, momento en el que se considera un adulto.

¿Qué hacer si empieza a reproducirse?

Ya sea por reproducción sexual o partenogénesis, en algún momento tendrás huevos en tu insectario. Estos se pueden diferenciar de las heces fecales porque se parecen a una pequeña semilla. Para su cuidado, se recomienda recogerlos del insectario e incubarlos en un lugar aparte con otras condiciones ambientales.

La manipulación de los huevos debe ser con pinzas, pues la mayoría son frágiles y pueden destruirse con la presión de los dedos.

La humedad ideal debe rondar entre un 70 y 80 %. Por su parte, la temperatura debe estar entre los 20 °C y 25 °C. Para evitar problemas como el crecimiento de moho, es mejor mantener los huevos separados hasta la eclosión, al igual que brindar una buena ventilación.

¿Cada cuánto se debe limpiar el insectario?

Teniéndose en cuenta los niveles de humedad del insectario y la alta cantidad de excretas que generan estos animales, lo mejor es cambiar todo el sustrato cada semana. No obstante, si manejas piedras o vermiculita, los puedes tamizar y eliminar solo los desechos.

Para finalizar, recuerda que es importante cambiar la vegetación por una fresca, al igual que el agua del recipiente en el que se encuentran.

Los insectos palo: compañeros silenciosos

Ahora que conoces todos los cuidados de un insecto palo, te puedes aventurar sin problemas en el mundo de estas exóticas mascotas. Ten en cuenta las recomendaciones que se brindan en este contenido y asegúrate de ofrecerle la calidad de vida y bienestar que merece un animal de estas características. ¡Te sorprenderá la conexión que puedes lograr con una especie! 


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.