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¿Cómo puedo saber la raza de mi perro?

Una prueba de ADN es la mejor manera de comprobar cuál es la raza de un can. Sin embargo, existen otros métodos confiables, como la revisión de un profesional o la evaluación física.

¿Cómo puedo saber la raza de mi perro?

Saber con certeza la raza de un perro no siempre es una misión simple y esto se debe a muchos motivos, como el parecido que hay entre algunas razas o las variaciones que se presentan en algunos ejemplares. La tarea se vuelve más difícil cuando hablamos de canes mestizos, porque no siempre exhiben de forma clara las características de sus progenitores.

Si tienes un perro y no sabes qué raza es, a continuación, te ofrecemos algunas modalidades para identificarla. Estos métodos van desde la observación de las características físicas hasta el uso de herramientas tecnológicas.

1. Revisa las características físicas del animal

El tamaño y las características físicas del can, como el peso, el hocico, el pelaje y las orejas, pueden darnos pistas clave de la raza ante la que estamos.

Peso del perro

Infografía sobre la clasificación de los perros según su peso
Esta clasificación comprende desde los perros toy, como el pomerania, hasta los gigantes, como el mastín napolitano.

De acuerdo con organizaciones como la Fédération Cynologique Internationale y la American Kennel Club, que se encargan de dictar las normas de cría de perros, podemos hablar de cinco tipos de tamaños de perros:

  • Toy (de 1 a 3 kilos)
  • Pequeños (de 3 a 10 kilogramos)
  • Medianos (de 10 a 25 kilos)
  • Grandes (de 25 a 45 kilos)
  • Gigantes (desde 45 kilos)

Saber esto te ayudará a descartar ciertas razas de perros. Por ejemplo, si tu mascota pesa menos de 3 kilos, es muy probable que se trate de un perro toy, como pueden ser los chihuahuas o los pomeranias. En caso de pesar entre 3 y 10 kilos, estamos ante razas pequeñas, como los pugs.

Por otro lado, hay unas 47 razas de perros medianos, por lo que si tu perro pesa entre 10 y 25 kilos, puedes considerar la posibilidad de que se trate de alguna de ellas. Si tu can pesa más de 45 kilos, estás ante un gigante, como el San Bernardo, el mastín tibetano o el gran danés.

Pelo del perro

caniche, bichón frisé, labrador, beagle
Razas como el caniche y el bichón frisé (arriba) tienen el pelaje rizado, mientras que razas como el labrador y el beagle (abajo) tienen el pelo alisado.

¿Qué puede decir sobre la raza?

Lo cierto es que existen pelajes cortos, medianos y largos, así como de diferentes texturas: liso y suave o más bien duro y rizado. Por supuesto, por sí solo, observar el pelaje del animal no te dirá ante qué raza te encuentras; sin embargo, en conjunto con otras características del perro, puede darte una pista.

Por lo general, los pelajes rizados pertenecen a los llamados «perros de agua», como el caniche, o a razas como el bichón frisé. Los pelos más alisados son propios de canes como el labrador o el beagle.

Perros dóberman, dálmata, lebrel afgano, collie.
Dóberman y dálmata (arriba); lebrel afgano y collie (abajo).

Respecto a la longitud del pelo, algunas razas de pelo corto son el bóxer, el dóberman o el dálmata, mientras que perros como el lebrel afgano o el collie tienen pelo largo.

Hocico del perro

Dogo, mastín, galgo, saluki
Dogo argentino, mastín español (arriba); galgo y saluki (abajo).

En cuanto al hocico, puede ser corto y arrugado o largo y delgado. Los arrugados suelen pertenecer a los perros de tipo moloso, que son robustos y guardianes, como el dogo o el mastín. Los hocicos más largos suelen ser de los lebreles, que son perros esbeltos, como el galgo o el saluki.

Orejas de los perros

Pastor belga, border collie, fox terrier, corgi.
Pastor belga malinois y border collie (arriba); fox terrier y welsh corgi (abajo).

Las orejas de un perro también pueden ayudar a identificar su raza. Pueden ser erguidas, como las de un pastor belga malinois; semierguidas, como las de un border collie; caídas, como las de un beagle; con forma de botón, como las de un fox terrier; o como las de un murciélago, como las de un welsh corgi.

2. Valora su comportamiento

Golden retriever, perro salchicha, pastor alemán, rottweiler.
Los perros pueden tener comportamientos puntuales según su raza. Golden retriever, perro salchicha (arriba); pastor alemán y rottweiler (abajo).

Aunque existe la creencia de que la raza determina por completo el comportamiento del perro, investigaciones han concluido que solo determina el 9 % de su actitud. Esto puede ayudar a librarnos de prejuicios que asociamos con ciertas razas, como que un golden retriever es un perro familiar y que un pitbull es un perro agresivo.

De acuerdo con las conclusiones de la investigación, el comportamiento de un perro está influenciado en gran medida por diversos factores:

  • Entorno
  • Socialización
  • Entrenamiento
  • Experiencias individuales

Sin embargo, sí es cierto que existen algunas actitudes que pueden guiarnos para saber ante cuál de las más de 350 razas de perros estamos. Por ejemplo, los perros que muestran una fuerte inclinación por cavar pueden estar relacionados con razas como el terrier o el dachshund, que históricamente fueron criados para la caza de animales pequeños bajo tierra. Del mismo modo, los perros que son muy protectores de su familia pueden tener ancestros de razas de canes guardianes, como el pastor alemán o el rottweiler.

3. Consulta con un profesional veterinario

Para resolver la inquietud de cómo saber qué raza es mi perro, lo mejor siempre será consultar con un profesional. Por ejemplo, un veterinario es una de las pocas personas que puede decirte, con total certeza, que se trata de una raza pura o de una mezcla entre razas.

Llevar a tu mascota a un especialista es importante si quieres averiguar su raza o las razas de sus antepasados. También es esencial para que realice una valoración sobre el estado de salud del peludo, sobre todo si lo has adoptado de un refugio o de la calle.

4. Mediante un análisis de ADN

La ciencia y la tecnología pueden ayudarnos a identificar la raza de un perro o aquellas que han podido intervenir en un ejemplar cruzado. Incluso, es posible conocer qué proporción de cada una de ellas están presentes en su material genético.

Por lo general, el test consiste en pasar un hisopo por la boca del perro e introducirlo en un envase, enviarlo al laboratorio y recibir los resultados.

Esta prueba, además de decir cuál o cuáles son las razas de tu perro, también es útil para señalar si existe alguna enfermedad hereditaria en el animal o advertir futuros problemas.

Son muchos los laboratorios privados que ofrecen este servicio, como Wisdom Panel, Embark o Ancestry. La Universidad Complutense de Madrid también tiene un servicio para averiguar la raza y los antepasados de tu peludo.

5. Con una aplicación móvil

Por último, existen aplicaciones móviles que nos pueden ayudar cuando nos preguntamos cómo saber qué raza es mi perro. Algunas de las más conocidas son las mencionadas a continuación:

  • CatchIt Dog
  • Dog Scanner
  • Dog Breed Scanner
  • Identify Dog Breeds
  • What Dog (desarrollada por Microsoft)

Por supuesto, la tecnología puede tener un margen de error, ya que hay razas que, como mencionamos, son muy parecidas entre sí. Las aplicaciones móviles, por sus limitaciones, solo pueden brindar una evaluación a partir de las características físicas del can, por lo que su resultado puede tener algunos fallos.

¿Cómo determinar las razas de un perro mestizo?

Los perros mestizos o criollos son aquellos que no pertenecen a una raza específica reconocida por organismos oficiales de cinología. Estos canes provienen de una mezcla de distintas razas, por lo que pueden presentar una amplia gama de características físicas y diversidad de temperamentos.

Por todo esto, averiguar la ascendencia de los canes mestizos es más difícil que comprobar la raza de los perros de raza pura. Si tienes un peludo mestizo y quieres saber cuál es su origen, las mejores alternativas son las mencionadas pruebas de ADN, ya que pueden analizar la composición genética fácilmente.

¡Conoce la raza de tu perro!

A mucha gente no le interesa en realidad cuál es la raza de su perro o de cuáles proviene. Sin embargo, tener este dato puede ser útil por muchas razones. En primer lugar, conocer su historia nos permitirá saber si es propenso a sufrir algún tipo de enfermedad o afección asociada a una raza en particular.

Eso no es todo: saber si nuestro can es de raza pura, por ejemplo, nos permite obtener su pedigrí e incluso llevarlo a competencias caninas. En última instancia, conocer la historia de nuestro amigo de cuatro patas también puede hacer que nos sintamos aún más conectados con él.

Bibliografía

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