El pez cofre cornudo es un peculiar organismo marino que se caracteriza por presentar dos cuernos largos que sobresalen de su frente. Además, exhibe coloraciones vistosas que son típicas de los peces que viven en arrecifes coralinos. Si bien es cierto que la especie es famosa, el pez cofre cornudo aún resguarda muchas curiosidades sobre su biología.
El nombre científico de esta especie es Lactoria cornuta. Pertenece a la familia Ostraciidae, un grupo colorido que se encuentra bastante emparentado con los peces globo. Sigue leyendo este espacio y descubre varias curiosidades más sobre el peculiar pez cofre cornudo.
¿Cómo es el pez cofre cornudo?
Esta especie de pez tiene un cuerpo rectangular que mide alrededor de 10 centímetros de largo, aunque algunos ejemplares son capaces de llegar hasta los 50 centímetros. Además, presenta dos pares de cuernos, los primeros se encuentran en la frente y los segundos debajo de la aleta caudal (cola). Debido a estas estructuras, la morfología del pez adquiere un aspecto similar a una caja o un cofre.
Contrario a otros organismos marinos, el pez cofre cornudo presenta escamas alargadas en forma de placas que se fusionan y forman un caparazón sólido. De esta coraza sobresalen una aleta dorsal y una aleta caudal que le proporcionan movilidad. Sin embargo, debido a que el caparazón es rígido, los ejemplares no suelen ser capaces de desplazarse a gran velocidad.
Por si fuera poco, algunos individuos de la especie exhiben coloraciones brillantes (amarillas o verdes), con un patrón de puntos que pueden ser blancos, azules, verdes o marrones. Claro está, también existen ejemplares menos vistosos con tonalidades monocromáticas (grises o marrones).
Datos poco conocidos de los peces cofre cornudos
A pesar de que el pez cofre cornudo es una especie interesante y popular entre los acuaristas, existen varias curiosidades sobre su biología que muchas personas ignoran.
1. No tiene varias aberturas para las branquias
Las branquias forman parte del sistema respiratorio de los peces y se encargan de extraer el oxígeno del agua. Por lo común, la mayoría de estos organismos acuáticos presentan varias aberturas longitudinales que permiten el acceso del agua a este órgano. Sin embargo, en el caso del pez cofre cornudo, las aberturas se sustituyen por un agujero localizado a ambos lados de su cuerpo.
2. Tiene un nado único
Los tejidos musculares de los peces se constituyen por miómeros, un tipo especial de músculos con forma de «V» que permite la flexión lateral de su cuerpo. Gracias a ello, son capaces de balancear su cola de izquierda a derecha para nadar. No obstante, la morfología rígida del pez cofre cornudo le impide lograr este tipo de nado. De hecho, solo es capaz de mover su cola, lo que se conoce como nado ostraciforme.
3. Exhibe una coloración aposemática
En la naturaleza, los animales que son tóxicos llegan a exhibir coloraciones vistosas o brillantes que advierten a sus depredadores sobre su peligro (aposematismo). Esto mismo sucede con el pez cofre cornudo, el cual produce una toxina mortal para los peces.
Debido a que no es capaz de inyectar esta sustancia, es poco probable que sea considerada un riesgo para los humanos. Claro está, a menos que se consuma la carne de la especie. Según un reporte de caso publicado por la revista Internal Medicine, el consumo de otras especies del mismo género (Lactoria) podría llegar a ser mortal.
4. Produce sonidos con sus músculos
Una de las curiosidades más remarcables del pez cofre cornudo es su habilidad para producir sonidos a través de sus músculos. Según un estudio publicado en la revista Journal of Anatomy, produce dos ruidos principales: tarareos y clicks. Como se puede suponer, los tarareos son largos y generan una serie de vibraciones a lo largo de su cuerpo, mientras que los clicks son más cortos y fuertes.
5. Los cuernos le pueden volver a crecer
Contrario a lo que podría parecer, los cuernos del pez cofre cornudo tienen diferentes utilidades en su vida. Para empezar, estas estructuras impiden que sus depredadores los puedan ingerir con facilidad. Asimismo, también sirven como unas lanzas que se pueden utilizar para dañar a sus agresores. Debido a su importancia, el cuerpo del pez propicia la regeneración de los cuernos en caso de que se rompan.
Además de que el pez cofre cornudo exhibe una apariencia única, resguarda varias curiosidades enigmáticas e interesantes sobre su biología. Esta es una de las razones por las que muchos acuaristas buscan tenerlo como mascota. Sin embargo, su toxicidad hace que sea un poco difícil de manejar en cautiverio. Por ello, es mejor dejar que esta curiosa especie viva su vida silvestre sin ningún impedimento.
Bibliografía
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