10 animales de la tundra

Se la conoce como la ‘llanura sin árboles’ y es un ecosistema caracterizado por fuertes vientos, bajas temperaturas y muy pocas lluvias. Esto no significa que no haya vida… ¡Todo lo contrario! En este artículo te informamos sobre los animales de la tundra, los cuales llevan una existencia bastante sacrificada.

Además de las temperaturas extremas, la tundra es un desafío de supervivencia en toda regla por la falta de materia alimenticia y escondites. Sin duda, los seres vivos que te vamos a mostrar a continuación destacan por su capacidad de mantenerse hasta en las condiciones más inclementes. ¡No te lo pierdas!

Características de la tundra

Antes de hablar de los animales de la tundra sería bueno aprender sobre este ecosistema presente en tres zonas del planeta: Ártica (Canadá y Alaska principalmente), Alpes (donde están las montañas más altas y no crecen árboles) y Antártica (incluido sur de Sudamérica y todo lo que está ‘debajo’ o bien al sur del mundo).

Debido a la proximidad con los polos, la tundra tiene un clima frío, con temperaturas bajo cero la mayor parte del año. En invierno las condiciones pueden alcanzarse los -35 °C y en verano no supera los 10 °C. Además, se registran muchos vientos, nevadas continuas, lluvias ligeras y días completamente oscuros.

En la tundra no hay casi árboles. La única vegetación que sobrevive son las plantas bajas, algunas de ellas con flores. Crecen en forma dispersa, como ‘parches’ entre la nieve y las rocas.

Los animales de la tundra

En cuanto a la fauna de este ecosistema, merece la pena indicar que son especies adaptadas al clima gracias a su pelaje, capacidad para hibernar y capas de grasa que protegen su organismo. Algunos de ellos son de color blanco para camuflarse en la nieve y, aunque no lo creamos, hay muchos más animales de la tundra de lo que suponemos. Algunos de ellos son los siguientes.

1. Caribú

También conocido como reno, el caribú (Rangifer tarandus) es un cérvido del hemisferio norte también presente en la taiga. Los ejemplares machos son más grandes que las hembras y, si bien ambos sexos poseen cornamenta, en los masculinos son de mayor tamaño y más ramificadas.

El caribú tiene pelaje espeso de color marrón con áreas blancas, más oscuro y corto en verano. Gracias a sus pezuñas ‘sobresalientes’ de las patas puede caminar sin problemas entre la nieve y el hielo. Las hembras se agrupan en rebaños matriarcales y los machos son solitarios.

2. Perdiz nival

Esta ave (Lagopus muta), familiar de las gallinas, habita en las regiones frías del Ártico, aunque algunas subespecies se encuentran en áreas montañosas de Asia y Europa. La perdiz nival mide poco menos de 40 centímetros, tiene una cola de alrededor de 10 centímetros y cuando abre las alas presenta una envergadura de 60 centímetros.

En invierno es de color blanco casi por completo, denso y voluminoso, lo que lo hace ver más grande y robusto. Sus patas también están cubiertas de plumas y las huellas que deja en la nieve son similares a otros de los animales de la tundra, como la liebre. La perdiz nival suele ser más activa por las mañanas y prefiere volar distancias cortas.

3. Lemming

Este roedor (Lemmus lemmus) de la tribu de los leminos habita no solo en la tundra, sino también en las praderas árticas y en las estivas. Se alimenta de frutos, raíces y hierbas, que acumula en una madriguera que realiza él mismo.

El lemming es de pequeño tamaño, su pelaje es de colores brillantes en tonos marrones, amarillos y arena y su ciclo reproductivo es bastante corto, por lo cual puede convertirse en una plaga al poco tiempo. Para sobrevivir a las temperaturas inclementes, pasa los inviernos bajo la nieve en su madriguera.

4. Búho nival

Otro de los animales de la tundra, el búho nival (Bubo scandiacus), es conocido por su belleza y por su gran capacidad para cazar a sus presas en pleno vuelo. Se alimenta de liebres, aves pequeñas, peces o roedores como el lemming. Por desgracia, se encuentra en una situación vulnerable en lo que a taxonomía se refiere.

El macho es blanco puro y la hembra presenta manchas oscuras en sus plumas. De cualquier manera, ambos se camuflan muy bien en la nieve y el hielo. Pueden medir hasta 150 centímetros de envergadura y están muy bien adaptados al clima ártico.

5. Zorro polar

Otro de los animales de la tundra de este listado es un cánido que se puede observar en las laderas del norte de Eurasia y Norteamérica. Con unos 55 centímetros de largo y unos tres kilos de peso, el pelaje del zorro polar (Vulpes lagopus) es blanco en invierno y pardo-grisáceo en verano.

Para evitar la pérdida de calor tiene orejas muy pequeñas, y su cola es densa y larga; cuando duerme se enrolla en ella para calentarse. Es uno de los pocos ejemplares de esta lista que no hiberna cuando hace frío, se alimenta de aves y pequeños mamíferos, y se reproduce en marzo.

6. Liebre ártica

La liebre ártica (Lepus arcticus) es un mamífero perteneciente a la familia de los lepóridos (Leporidae). Se puede encontrar en las zonas de tundra de Escandinavia, Groenlandia, Canadá y Alaska. Tiene una longitud estimada de hasta 70 centímetros y su peso ronda los 4-5 kilos en promedio. 

Este tipo de liebre se escinde en 4 subespecies diferentes.

7. Armiño

El armiño (Mustela erminea) es otro de los animales de la tundra que se dedican a cazar a otros pequeños vertebrados, como roedores y pájaros. De todas formas, se trata de un carnívoro aguerrido que es capaz de matar a conejos y otras presas bastante más grandes que él. Esto es un auténtico hito, ya que rara vez alcanza los 300 gramos de peso. 

El armiño está muy extendido por Europa y habita tundras, bosques y estepas principalmente. Por desgracia, su capacidad adaptativa ha justificado que se incluya entre las 100 especies potencialmente invasoras más peligrosas del mundo.

8. Oso gris

A pesar de su nombre común, el oso gris (Ursus arctos horribilis) se considera a día de hoy como una subespecie de oso pardo. Se conoce a nivel poblacional como grizzly y habita el noroeste de Estados Unidos, Canadá y península de Kamchatka. De todas maneras, su población más grande se localiza en Alaska. 

A pesar de su fama depredadora, la dieta de estos osos se compone de materia vegetal hasta en un 90 % durante la mayor parte del año.

9. Pato arlequín

No esperabas una ave primariamente acuática entre los animales de la tundra, ¿verdad? El pato arlequín (Histrionicus histrionicus), perteneciente al grupo de las anátidas, se distribuye por América del Norte septentrional, Rusia oriental, el sur de Groenlandia y en Islandia.

Los machos de esta especie son increíbles a nivel cromático, ya que presentan un plumaje complejo con tonos blancos, negros, marrones y grises. Alcanzan un máximo de 45 centímetros de longitud y 600 gramos. Se alimentan de moluscos, crustáceos y otros invertebrados acuáticos.

10. Oso polar

El oso polar (Ursus maritimus) es el último de los animales de la tundra que te vamos a nombrar en esta lista y comparte familia con el grizzly. El 60 % de los ejemplares vivos a día de hoy se encuentran en Canadá, si bien también existen poblaciones en Groenlandia, Alaska y el norte de Rusia. 

Este es uno de los mamíferos no acuáticos más imponentes que existen, pues un ejemplar adulto puede alcanzar hasta 680 kilogramos de peso y 2,6 metros de largo. Es la especie más carnívora de todos los osos existentes y basa su dieta sobre todo en animales grandes acuáticos (como belugas o focas) y peces.

Por desgracia, el imponente aspecto del oso polar no le salva del cambio climático y sus efectos.

Aquí te hemos presentado 10 de los animales de la tundra, pero no son los únicos que existen. Aunque esta zona sea inclemente y difícil de navegar, algunos seres vivos son capaces de reproducirse y dejar su huella en ella. Sin duda, la naturaleza no dejará jamás de sorprendernos.