Técnicas de adiestramiento canino

Los canes son animales intuitivos, que generan sus propios hábitos según el hogar que los acoge. Las técnicas de adiestramiento canino ayudan a la adaptación del perro en casa. Veamos las diferentes opciones, con sus pros y sus contras, para adiestrar a tu mascota.

La actividad de aprender trucos juntos puedes ser un gran estímulo para la relación.

Adiestramiento en positivo

Esta técnica se basa en recompensar al perro cuando hace algo que nos gusta. Al darle un premio por el buen comportamiento, el perro deseará repetirlo. Lo que más se usa para premiar son los alimentos y las caricias, pero también entienden de halagos. Por esta razón, se trata de generar un código entre humano y animal.

Por ejemplo, al jugar nos llevamos al extremo, tanto el animal como el humano corren por una pelota en un parque, pero cuando uno se cansa se detiene, y eso es señal de que el juego debe suspenderse. Tanto las personas como los animales comprenden la situación.

Su contra, según algunos adiestradores, está en que este entrenamiento no es suficiente. En especial en perros de trabajo.

Diferentes tipos de adiestramiento canino en positivo

Estas son las diferentes técnicas que se aplican en el momento de dar órdenes o preparar al animal para una emoción:

• Con clicker: asocia el sonido de un clicker con la recompensa. Luego el perro relacionará el sonido a la orden, haya o no premio.
• Extinción: evita reforzar los comportamientos indeseados con caricias. Por ejemplo, al ladrar.
• Conducta incompatible: le damos un comportamiento para evitar que realice otro.
• MAR (marca de ausencia de refuerzo): si el perro no obedece, no es premiado y se le indica con un gesto que no habrá premio.
• Contracondicionamiento: intenta cambiar la emoción de un estímulo. Si le dan miedo las bicis, al ver una le damos un premio.

Adiestramiento tradicional de caninos

Este tipo de adiestramiento está basado puramente en el castigo. Se utilizaba para adiestrar otros animales, además de los perros. Casi en desuso y muy criticado por las organizaciones de los derechos y cuidado animal.

Está demostrado que el perro no comprende el castigo. Y al castigarlo, el animal pierde la confianza, con el consecuente deterioro del vínculo. Resulta en perros nerviosos y estresados cuyo comportamiento puede llegar a ser impredecible y posiblemente con consecuencias nefastas.

Nuevos tipos de adiestramiento

Estos son tipos de adiestramiento complementarios y pueden aplicarse junto con los tradicionales:

• Adiestramiento basado en la etología o comportamiento de la raza: se basa en la observación del comportamiento natural del perro y es muy popular. Respeta sus instintos y fomenta sobre todo el grupo social.
• Adiestramiento de obediencia básica: al perro se lo condiciona para que se comporte de manera adaptada a la vida en sociedad con el humano. Se emplea el adiestramiento positivo para enseñarle órdenes básicas.
• Adiestramiento para funciones especiales: es el entrenamiento para perros de trabajo, como los perros guía o los rescatistas. También se incluyen los de guardia, de protección, de competencia deportiva, etc.

¿Cómo elegir una técnica de adiestramiento canino adecuada?

Para elegir una técnica debes tener en cuenta el carácter de tu perro y tus propias habilidades para enseñarla. Si te resulta fácil o difícil determinará tu elección. Lo aconsejable es que la técnica se base en el carácter de tu perro. Respetar su comportamiento natural y reforzar vuestro vínculo es fundamental.

La actividad de aprender trucos juntos puedes ser un gran estímulo para la relación. Y si lo prefieres, puedes acudir a un entrenador canino. Existen distintos tipos de cursos de adiestramiento que puedes tomar junto a tu mejor amigo.

Para adiestrar por tu cuenta a tu mascota, ten en cuenta estos puntos de preparación:

• Reduce el estrés: los perros estresados tienen mal comportamiento. Por ello te aconsejamos que bajes el nivel de estrés, estimulando con caricias al animal.
• Practica la paciencia: adiestrar al perro es una tarea para toda la vida. Requiere tiempo y esfuerzo hasta llegar a obtener resultados.
• Comunícate con tu perro: debes aprender a entenderte con tu mascota. Puede que no obedezca porque no te entiende y no porque no desee hacerlo.
• Comprende a tu perro: es solamente un perro y hace cosas como tal, no mete la pata por maldad. No te enfades. Si se porta mal, suele ser por errores nuestros en el cuidado diario y la falta de adiestramiento.

El adiestramiento no es una costumbre de sumisión de unos a otros. Es una buena costumbre que pacifica la convivencia y establece normas y límites. Sus beneficios incluyen una mayor seguridad en el animal, horarios específicos y muebles sanos.

En especial, si se tiene en cuenta el carácter del animal, educarlo para que cumpla con sus instintos y esté satisfecho hará la diferencia entre un amigo y un perro neurótico.