Síntomas de enfermedades en aves
Las aves se han convertido en una elección popular como mascota, pues es sencillo mantenerlos en cautiverio y disfrutar de su compañía. Sin embargo, también son susceptibles de padecer diversas enfermedades, de manera que resulta importante aprender a reconocer los síntomas para actuar de inmediato.
Es común pensar que las aves de compañía no necesitan ir al veterinario, pues no se les da la verdadera importancia que tienen como mascotas. Además, pocos profesionales se especializan en la salud de estos animales y no siempre es posible acudir con ellos. Por lo tanto, es necesario poner atención a los síntomas de las enfermedades para reaccionar a tiempo y buscar ayuda pronto. Conoce algunos de estos a continuación.
Síntomas de que un ave está enferma
Las aves no suelen ser manipuladas por sus tutores, de manera que pocas veces se les pone atención a las anomalías que aparecen en su cuerpo. En consecuencia, solo se detectan los problemas de salud cuando la enfermedad ya ha avanzado demasiado. A pesar de ello, existen ciertos síntomas que son perceptibles si se les pone la suficiente atención a las aves. Algunos de ellos son los citados a continuación.
1. Plumas erizadas
Es normal que las aves ericen sus plumas durante algunos minutos cuando tienen mucho calor o antes de dormir. Sin embargo, si el plumaje permanece de esta forma durante mucho tiempo, es indicativo de que algo no se encuentra bien con su salud. De hecho, este fenómeno les da una mala apariencia, lo que debería ser una señal de alerta para el tutor.
2. Sonidos al respirar
De la misma manera que sucede con otros animales, las infecciones del sistema respiratorio en aves pueden llegar a provocar sibilancias al respirar. Estos sonidos son uno de los síntomas más peligrosos que existen, pues el manejo de los problemas respiratorios en aves no muy sencillo. En cuanto detectes este signo de alerta, acude de inmediato con un veterinario.
3. Pérdida del apetito
El metabolismo de las aves es uno de los más altos entre los vertebrados, lo que significa que gastan grandes cantidades de energía en sus actividades diarias. Por esta razón, no dejan pasar la oportunidad de alimentarse cuando tienen la oportunidad. Cuando pierden el apetito, es un claro signo de que algo en su cuerpo no se encuentra bien y necesitan atención urgente.
4. Respiran por la boca
Al igual que los humanos, las aves poseen dos orificios en su pico (narinas) que sirven como si fueran narices, por las cuales respira y expira sin problemas. No obstante, la presencia de alguna enfermedad en el sistema respiratorio es capaz de obstruir estos conductos. En consecuencia, las aves abren la boca para respirar. Esto es uno de los síntomas más peligrosos, así que no dejes pasar mucho tiempo y acude al veterinario.
5. Plumaje descuidado y opaco
Las aves presentan un comportamiento de acicalamiento con el que cuidan y procuran sus plumas. Debido a esto, la mayor parte del tiempo lucen hermosas y bien ordenadas. No obstante, cuando las aves padecen alguna enfermedad, tienden a dejar de realizar este acto y sus plumas parecen descuidadas. Por lo tanto, su apariencia descuidada se convierte en uno de los síntomas frecuentes de enfermedades en las aves.
6. Acicalación constante
El exceso de acicalación también puede ser un síntoma evidente de diversas enfermedades en aves. Por lo común, esto es ocasionado por parásitos que irritan su piel y les dan escozor, lo que intentan remediar al acicalarse o al arrancarse las plumas (picaje). Aunque este signo no representa una emergencia clínica, lo mejor es acudir con el veterinario por prevención.
7. Pérdida del plumaje
La pérdida del plumaje fuera de la temporada de muda es un signo claro de que padece alguna enfermedad. Las plumas de estos organismos funcionan como un aislante y protector, por lo que no es normal que se caigan sin razón aparente. En la mayoría de los casos, este fenómeno es provocado por infecciones bacterianas, infecciones fúngicas o quistes.
8. Cambios en su conducta
Las aves presentan ciertos hábitos de conducta que con el paso del tiempo se vuelven comunes para los tutores. No es normal que estos comportamientos cambien de manera drástica, por lo que cualquier anomalía en este sentido debería considerarse un signo de alerta.
9. Heces extrañas
A pesar de que las heces de las aves cambian según la dieta de la que se alimentan, las excretas con coloraciones rojas, amarillas o negras son un síntoma evidente de enfermedad. Por lo habitual, esto es ocasionado por parasitismos que afectan el sistema digestivo, lo que cambia las características de las heces.
10. Secreciones nasales o inflamación
Las secreciones nasales son uno de los síntomas frecuentes en las enfermedades respiratorias de aves. Es importante tener cuidado en estos casos, pues las secreciones pueden transmitir la patología a otros ejemplares cercanos. Así que trata de limpiar bien la zona y acude pronto con un veterinario.
11. Ojos con irritaciones o secreciones extrañas
Los ojos de las aves suelen ser bastante sensibles a ciertas condiciones en su ambiente. Debido a esto, se pueden irritar con facilidad si no existe la higiene adecuada en su hábitat. Asimismo, algunas infecciones provocan la aparición de secreciones extrañas en los ojos. En caso de que detectes cualquier anomalía en el ojo de tu mascota, lo mejor es acudir con un profesional a revisión.
A pesar de que no es común pensar en las enfermedades que afectan a las aves, los tutores deben estar atentos a todo tipo de síntomas o anomalías que se presenten en la mascota. Recuerda que estos animales de compañía merecen los mismos cuidados que un perro o un gato, así que ofréceles un buen ambiente y la atención veterinaria que necesitan.
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