» Salud

10 señales de que tu pogona va a morir

No siempre es posible detectar que tu mascota tiene alguna enfermedad y podría morir. Por ello, es recomendable acudir a revisiones frecuentes con el veterinario para confirmar que todo se encuentra en orden.

La pogona es uno de los animales domésticos que hibernan.

El dragón barbudo o pogona es un increíble reptil con una peculiar apariencia espinosa. Posee un temperamento dócil y un aspecto maravilloso, por lo que se ha convertido en una mascota exótica popular. Claro está, necesita de cuidados y atenciones especiales en cautiverio, pues con cualquier descuido su vida podría correr riesgo.

Detectar problemas en la salud de los reptiles no es una tarea fácil, ya que en muchos casos los signos de alerta no son tan perceptibles. Por esta razón, las enfermedades suelen agravarse y se pone en riesgo al ejemplar. Aunque en muchos casos no se puede hacer mucho para evitar un desenlace fatal, existen algunas señales que indican que tu pogona podría morir pronto. Descubre algunas de ellas en este espacio.

Señales de alerta en la pogona

Una de las mascotas exóticas que parecen dragones.

Los animales no tienen la capacidad de comunicarse de la misma forma que los humanos, de modo que es complicado identificar sus síntomas durante una enfermedad. Esto ocasiona que la mayoría de los tutores pasen por alto los signos de alerta en sus mascotas. En consecuencia, se les provoca problemas serios que amenazan la vida o incluso ocasionan su muerte.

A pesar de que los reptiles no se suelen expresarse demasiado, algunos ejemplares como la pogona exhiben ciertas señales cuando están a punto de morir. Aunque parezca increíble, en este tipo de escenarios aún es posible hacer algo para salvar su vida, pero se necesita actuar de inmediato y acudir con un veterinario especializado. La siguiente lista recopila algunos de los signos de alerta más importantes para tener en cuenta.

1. Pérdida de peso

La pérdida de peso es una de las señales en la pogona que indica problemas con su salud, pues su cuerpo no es capaz de asimilar bien los nutrientes e incluso podría morir. En consecuencia, su sistema inmunitario comienza a fallar y no puede hacerle frente a los patógenos. Todo en conjunto debilita bastante el cuerpo de la mascota y termina por provocarle la muerte.

Al ser animales de talla mediana, pueden resistir un poco la pérdida de peso. Sin embargo, precisan de atención veterinaria inmediata para corregir su salud. El peso promedio de una pogona adulta oscila entre los 300 y 450 gramos, de modo que cualquier medida inferior a estos parámetros debe ser revisada por un profesional de la salud animal.

2. Ausencia de heces

Las heces constituyen una de las mejores formas de identificar si existe algún problema con la salud de los reptiles. Por esta razón, el simple hecho de que no aparezcan heces en el hábitat de la pogona es una de las señales de que podría morir. Esta situación suele ser indicio de un padecimiento denominado impactación intestinal, el cual consiste en una obstrucción de los intestinos que impide la salida de las heces.

Dicha condición es bastante peligrosa y debe ser atendida a la brevedad, ya que la presión de la obstrucción podría ocasionar una ruptura del intestino y la muerte del ejemplar. Se puede detectar este problema al palpar ligeramente el vientre de la pogona. Si la región inferior se siente un poco dura y aparte no hay evidencia de heces durante varios días, acude de inmediato con un veterinario.

3. Ojos hundidos

Los ojos hundidos en las pogonas indican un serio estado de deshidratación. Esta condición puede ser ocasionada por varias patologías o descuidos en el mantenimiento de la mascota. Sin embargo, el que aparezca esta señal de alerta significa que la situación se ha complicado y es necesaria la atención veterinaria.

Es normal observar este problema en conjunto con la pérdida de peso, lo cual suele incrementar la gravedad de la condición. Existen varios métodos caseros para rehidratar a la mascota tales como agregar un recipiente con agua en el hábitat o aumentar la humedad sin exceder el 40 %. A pesar de esto, siempre es recomendable acudir antes con un veterinario para que tenga el tratamiento adecuado.

4. Letargia

Las pogonas con letargia se caracterizan por mantenerse estáticas durante mucho tiempo. Además, evitan salir a explorar su ambiente e incluso no salen a asolearse. Esta condición puede ser ocasionada por una baja temperatura en su hábitat. Sin embargo, si estás seguro de que este no es el caso, es probable que signifique un problema en la salud de la mascota.

La inactividad de un reptil aparece debido a la falta de energía y debilidad muscular. Por lo tanto, es frecuente que se presente cuando existe algún proceso patológico que afecta su cuerpo. Ten en cuenta que la situación puede agravarse con facilidad y poner en riesgo la vida de la pogona. Así que cuando detectes esta señal de alarma, acude de inmediato con un profesional de la salud animal.

5. Apatía

La apatía se caracteriza por la ausencia de reacción ante estímulos como la comida, las caricias, la manipulación o los ruidos fuertes. Cuando no existe una respuesta por parte de la pogona, lo más probable es que se encuentre enferma y vulnerable. Aunque no todas las patologías conllevan un riesgo inminente, la debilidad es un síntoma que puede agravarse y provocar una muerte súbita.

6. Heces con aspecto diferente

Como se mencionaba más arriba, las heces son una de las formas más eficientes para detectar problemas en los reptiles. El cambio en la textura, el color, el aspecto o el olor de las defecaciones constituyen una señal de alerta, pues lo normal es que esto sea provocado por parásitos o infecciones intestinales. A pesar de que ambas parecen poco peligrosas, existen excepciones que podrían ocasionar la muerte del ejemplar.

Las heces con aspecto diferente suelen aparecer antes que otros síntomas peligrosos como la pérdida de peso, los ojos hundidos, la apatía y la letargia. Por ello, si observas que las excretas de tu pogona son más húmedas o tienen un color diferente, acude de inmediato con un veterinario.

7. Pérdida del apetito

La pérdida del apetito no se suele considerar como un signo peligroso, pues puede ser ocasionado por una gran cantidad de razones. De hecho, si el hábitat no cumple con los parámetros óptimos de la especie o si se cambia de lugar, es posible que la pogona se estrese y deje de comer. Por ello, antes de sacar conclusiones precipitadas comprueba que las condiciones de su hogar son adecuadas.

Si has revisado todo lo anterior y tu reptil no recupera su apetito normal, lo más probable es que tenga algún problema de salud. En este tipo de situación, no lo dudes más y acude de inmediato con un profesional de la salud animal. La desnutrición conlleva una pérdida de peso y una deficiencia del sistema inmunitario, por lo que su vida podría correr riesgo pronto.

8. Bultos en el cuerpo

Cualquier bulto en el cuerpo de la pogona significa un problema serio de salud, pues es una de las señales de que podría morir pronto. Estos abultamientos son provocados por tumores, quistes o parásitos. A pesar de la fama fatalista que tienen la mayoría de las causas anteriores, no todos los casos corresponden a un problema letal o sin solución. Sin embargo, esto último solo puede determinarlo un veterinario.

9. Complicación para respirar

Una de las patologías más frecuentes y letales que afectan a los reptiles son las del sistema respiratorio. El mayor conflicto con ellas es que pasan desapercibidas durante mucho tiempo, por lo que la mayoría de los casos se detectan cuando se han agravado demasiado. En consecuencia, no siempre se puede hacer algo para salvarlos.

Si observa que tu pogona hace ruidos al respirar o abre la boca cuando inhala, es muy probable que padezca este tipo de enfermedades. Por ello, acude de inmediato con un profesional de la salud animal para que lo revise. El pronóstico de estos problemas es difícil, pues cambia según el patógeno y el avance de la infección. Claro está, existen más probabilidades de que la mascota se recupere si acudes pronto con un profesional.

10. Pérdida de color en la piel

Las enfermedades comunes en pogonas son múltiples.

Las pogonas suelen lucir coloraciones intensas, las cuales hacen muy llamativa a la especie. Por esta razón, si aparecen tonos más opacos o disminuye el brillo de su cuerpo son señales de que el ejemplar tiene alguna patología importante. Así que cuando detectes un cambio en la apariencia física de tu mascota, acude pronto con un veterinario.

Recuerda que los rasgos de un animal son sustentados por el aprovechamiento de los nutrientes en su dieta. Esto significa que cualquier cambio en la apariencia del ejemplar conlleva un problema interno en el metabolismo. En consecuencia, el sistema inmunitario de la pogona se encuentra comprometido y es probable que muera si no se atiende.

Aunque las señales anteriores sirven para reconocer problemas serios en la pogona, la mejor opción siempre es acudir con un veterinario ante cualquier síntoma extraño. El comportamiento de las mascotas puede ofrecer mucha información sobre ellas, de modo que se les debe poner mucha atención para detectar el peligro a tiempo e incluso salvarles la vida.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • Doneley, B. (2006, January). Caring for the bearded dragon. North American Veterinary Conference.
  • Rowland, M. (2009). Veterinary care of bearded dragons. In Practice, 31(10), 506-511.
  • De Vosjoil, P., Sommella, T. M., Mailloux, R., Donoghue, S., & Klingenberg, R. J. (2016). The Bearded Dragon Manual: Expert Advice for Keeping and Caring for a Healthy Bearded Dragon. Fox Chapel Publishing.
  • Raiti, P. (2012). Husbandry, diseases, and veterinary care of the bearded dragon (Pogona vitticeps). Journal of Herpetological Medicine and Surgery, 22(3-4), 117-131.
  • Hannon, D. E., Garner, M. M., & Reavill, D. R. (2011). Squamous cell carcinomas in inland bearded dragons (Pogona vitticeps). Journal of Herpetological Medicine and Surgery, 21(4), 101-106.
Scroll al inicio