5 señales de auxilio que debes reconocer en tu perro

5 señales de auxilio que debes reconocer en tu perro

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 25 septiembre, 2022

Querer y cuidar a tu perro también implica que aprendas a reconocer los motivos de algunas de sus acciones y comportamientos. Recuerda que a veces, ciertas actitudes que incluso pueden parecernos graciosas en los peludos, en realidad están indicando que algo no está funcionando del todo bien. Te indicamos cómo reconocer estas señales de auxilio.

1. El perro arrastra su trasero por el suelo

Autor: myri_bonnie
Autor: myri_bonnie

Lo más probable es que si tu mascota restriega su ano sobre el piso es que acaba de hacer caca y está limpiando algún resto. Sin embargo, si está acción se vuelve repetitiva y va acompañada de, por ejemplo, un lamido constante de la zona, seguramente hay una inflamación o infección de sus glándulas anales. Esta circunstancia le provoca, por lo general, picazón y dolor.

Estas dos pequeñas glándulas, también conocidas como sacos anales, se encuentran a cada lado del ano y son las que producen un olor característico que le sirve a los peludos para identificarse y comunicarse. Es por esta razón que los canes se huelen esa zona y también sus heces.

Cuando estos sacos se bloquean y no pueden eliminar por sí solos el líquido -de color marrón o amarillento- es casi seguro que tu perro empezará lo que tú puedes creer que es un show cómico: arrastrará su culito por el suelo.

Así que en lugar de reirte o grabar su gracia y compartirla en las redes sociales, mejor ve al veterinario para que vacíe los sacos anales de tu peludo.

Conoce cuáles son las señales de auxilio que da  tu perro y que puedes llegar a confundir con actitudes graciosas.

2. El animal persigue persistentemente su rabo

Quién no se ha divertido viendo a un perro tratando de atrapar su cola.

En estos casos también hay que prestar atención. Mientras las cosas sucedan normalmente, en su justa medida, no ocurre nada extraño.

El problema aparece cuando la acción se vuelve compulsiva. Y es que un can que persigue su rabo de forma permanente es muy probable que esté desarrollando una conducta estereotipada.

Esta suele ser causada por aburrimiento, ansiedad y estrés. Y se da en animales que no reciben suficiente estímulo y pasan demasiado tiempo solos o encerrados.

También puede suceder que un can que quiere atrapar su cola esté padeciendo algún dolor en la columna o presente algún problema dermatológico. El veterinario es el indicado para realizar un diagnóstico e iniciar un tratamiento.

3. Se restriega a menudo la cara, otra de las señales de auxilio que da tu peludo

Si un can soba reiteradas veces su cara contra cualquier cosa que encuentra a su paso, más que un signo de que se encuentra cómodo es otra causa de alarma.

Quizá el animalito está sufriendo una infección en sus ojos u oídos. Por tal motivo, intenta aliviar la picazón o el dolor restregando su cara contra distintas superficies.

Otra posibilidad es que tu mascota tenga algo atrapado entre sus dientes -por ejemplo, restos de comida- y que esté tratando de eliminarlo con este procedimiento.

Entonces, si la actitud persiste, acude una vez más a la consulta profesional.

4. El perro se agacha solo con las patas delanteras

Entre las señales de auxilio que pueda estar dando tu mascota está la de agacharse solo con sus patas delanteras.

Aunque suele ser una actitud vinculada al juego, fuera de contexto y de manera reiterada puede significar que el animal sufre de un fuerte dolor abdominal.

Es recomendable que acudas cuanto antes a la consulta médica. El animalito podría estar padeciendo, por ejemplo, una pancreatitis.

5. El can se rasca de forma excesiva con las extremidades traseras

perro rascando

La pose que suelen adoptar los perros cuando se rascan con sus patas traseras es francamente graciosa.

Pero una vez más, si este rascado se da de forma continua, lo más recomendable es que trates de averiguar qué le está pasando a tu amigo de cuatro patas.

En estos casos, lo más seguro es que esté padeciendo un problema dermatológico provocado por, entre otra cosas:

Una vez más, la consulta con un profesional es lo más recomendable para la salud de tu peludo.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.