¿Qué comen los conejos?
Es fácil verlos si los sorprendes mientras descansan, pero te será complicado saber qué comen los conejos si los buscas en la naturaleza, ya que son esquivos y muy rápidos cuando huyen. Sin embargo, todos sabemos que son animales herbívoros por cultura general.
La alimentación que tienen en cautividad cambia ligeramente respecto a lo que comen en libertad. Por eso, en este artículo podrás informarte de la dieta de esta especie en ambas condiciones de vida. No te lo pierdas.
Características del conejo
El conejo (Oryctolagus cuniculus) es una especie de mamífero lagomorfo de la familia Leporidae. Además, es el único miembro viviente de su género, Oryctolagus. Sus características más llamativas son las grandes orejas que tiene y las fuertes patas traseras, las cuales le permiten al conejo dar grandes saltos y correr a toda velocidad.
El pelaje del conejo silvestre es pardo grisáceo, lo que le permite fundirse con su entorno para evitar a sus depredadores. Los lagomorfos criados para ser mascotas, por el contrario, presentan una gran variedad de tonalidades en su manto, pues esta característica responde a una búsqueda estética por parte del humano. A día de hoy, se han aceptado hasta 50 variantes de la especie.
El conejo es un animal gregario y territorial que crea amplias redes de madrigueras interconectadas, llamadas conejeras. En ellas, los ejemplares pasan la mayor parte del día, pues no es hasta el crepúsculo que salen a alimentarse al exterior.
¿Cómo es su sistema digestivo?
A pesar de que se trata de una especie monogástrica (cuyo estómago no se divide en cámaras), su fisiología digestiva es similar a la de los rumiantes. Los conejos poseen un estómago ácido (entre 1 y 3 de pH), un intestino delgado corto y un ciego muy desarrollado, pues es ahí donde extraen la energía de la celulosa que consumen mediante la fermentación.
No obstante, la materia vegetal sigue siendo muy poco calórica, por lo que el conejo procesa el alimento 2 veces antes de expulsarlo. Lo consigue mediante la coprofagia: en el primer ciclo digestivo, el animal produce heces blandas y en forma de racimo, llamadas cecotrofos. Estas heces son difíciles de ver, pues las consume directamente cuando salen del ano.
Gracias a esto, los conejos consiguen procesar aquellas fibras de celulosa que han quedado sin romper en el primer ciclo, además de recuperar algo de agua. Tras esta fase se producen las heces que se visualizan de manera habitual: las pequeñas bolas secas formadas por materia vegetal.
Alimentación del conejo
Si te preguntas qué comen los conejos, una respuesta acudirá con rapidez a tu mente: la hierba. Sin embargo, la realidad es más compleja que esa palabra, sobre todo cuando se trata de ejemplares criados en cautividad. Más adelante lo tienes en detalle.
Dieta del conejo en libertad
Dentro de lo que los humanos conocemos como “hierba”, los conejos silvestres seleccionan plantas compuestas, leguminosas y gramíneas que no se levantan demasiado del suelo. Es decir, prefieren los tallos y las hierbas que crecen a la altura del césped.
Un adulto es capaz de llegar a consumir medio kilo de materia vegetal en un día.
En invierno, cuando la hierba escasea, estos lagomorfos también se alimentan de tallos y cortezas de arbustos. Es fácil verlos excavar en la tierra para encontrar raíces, semillas y bulbos, con los que completan su dieta ante la ausencia de tallos verdes.
¿Qué comen los conejos en cautividad?
A pesar del proceso de domesticación por el que ha pasado esta especie (primero para su explotación y después como mascota), su alimentación en casa sigue siendo un factor a controlar con precisión. Una mala alimentación suele ser la causa más frecuente de los problemas que acaban con la vida del animal o, antes que eso, de muchas visitas al veterinario.
Estos animales, en cautividad, no comen igual que en su medio natural. La dieta para un conejo adulto que viva en un hogar humano es la siguiente:
- Heno disponible a todas horas: es su alimento principal, ya que los conejos suelen comerlo durante todo el día.
- Agua fresca ad libitum: son grandes bebedores, así que deben tenerla disponible y de calidad.
- Una ración diaria de verdura fresca: principalmente hoja verde, como escarola, canónigos, hoja de zanahoria, rúcula u hoja de roble.
- Una ración diaria de pienso especializado para conejos, preferiblemente en pellets.
- Premios: estos animales pueden tomar algún pellet de pienso o semilla como premio, nunca nada procesado o con azúcar o sal.
Puedes dividir la hoja y el pienso diarios en 2 o 3 tomas al día. No se les debe aportar estos alimentos ad libitum, ya que los conejos dejarían de comer heno: es como dejarle una hamburguesa a un niño al lado del plato de ensalada. Además, hay ciertos alimentos no recomendables para ellos, entre los que destacan los siguientes:
- Productos fabricados para humanos: pan, bollos, etc.
- Tubérculos crudos, como patata, zanahoria o calabaza.
- Frutas muy dulces: pueden fermentar en el intestino.
- Coles: coliflor, repollo y brócoli, entre otros.
No controlar bien qué comen los conejos da lugar a multitud de problemas de salud: desde sobrecrecimientos dentales hasta parálisis digestiva o disbiosis severa. Se trata de una especie a la que todavía le queda camino para adaptarse a vivir como mascota, así que piensa muy bien si puedes proporcionarle los cuidados que necesita antes de adoptar un conejo.
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- Oryctolagus cuniculus (European rabbit). (s. f.). Animal Diversity Web. Recuperado 5 de enero de 2022, de https://animaldiversity.org/accounts/Oryctolagus_cuniculus/
- Brotóns, N. J., & Blasco, M. (2004). Hipomotilidad gastrointestinal en conejos: 7 casos clínicos. Clínica veterinaria de pequeños animales, 24(4), 0211-219.