Poliquetos: qué son, ejemplos y hábitat

Los poliquetos se presentan en muchas formas, tamaños y colores. Conoce aquí mejor a estos misteriosos animales.

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 12 diciembre, 2022

Desagradables a la vista, interesantísimos sobre el papel: los poliquetos son conocidos por todos, aunque no siempre por ese nombre. Lo más normal es llamarlos gusanos, pero se trata de un término demasiado general para denominar las cerca de 30 000 especies que existen de estos animales.

Por tanto, en este artículo vas a encontrar una descripción específica de esta clase taxonómica, así como de la diversidad de sus hábitats, su dieta y su reproducción. Ya seas de los que disfrutan de los animales impopulares o no, lo que viene a continuación no te dejará indiferente. No te lo pierdas.

¿Qué son los poliquetos?

Los poliquetos (Polychaeta) con una clase escindida del filo de los anélidos, conocidos estos últimos como “gusanos de tierra” de forma popular. Polychaeta es el grupo más numeroso de estos, con más de 12.000 especies descubiertas hasta el momento. Son animales acuáticos.

Su nombre proviene del griego y significa “muchos quetos”, es decir, que hace referencia a la segmentación del cuerpo que presentan. Se puede dividir su anatomía en 3 partes principales:

• Cabeza o prostomio: esta parte del cuerpo está diferenciada y contiene la agrupación de órganos sensoriales. Cuentan con ojos, antenas, palpos y apéndices para alimentarse (peristomio).
• Tronco o metastomio: formado por los segmentos o metámeros, iguales entre sí. Aquí se sitúan también los parapodios, las “patas” que usan para desplazarse.
• Pigidio: esta última división es un anillo independiente donde se sitúa el ano y, en ocasiones, los cirros anales o uritos.

Destacan las quetas o sedas, mechones de acículas quitinosas (similares a pelillos) que portan en los parapodios. Su función es la de facilitar la locomoción del animal. No obstante, diferenciados de estos, los poliquetos errantes, existen también los poliquetos sedentarios, que se mantienen fijos al sustrato gracias a que sus parapodios se han modificado para convertirse en uncinos y sujetarse.

Hábitat

Como podrás imaginar, la variedad de hábitats y de condiciones ambientales para los poliquetos es muy amplia, dado su gran número de especies. Sin embargo, se puede afirmar que son animales que viven en medios acuáticos, principalmente en el mar. Las aguas que habitan, dulces o salobres, también son diversas, pues soportan todo tipo de condiciones.

En general, se dice que son bentónicos, es decir, que se mueven por el fondo de la columna de agua. Los que son sedentarios fabrican tubos con secreciones de células epidérmicas y viven dentro de ellos. Los errantes, por su parte, fabrican tubos, pero los abandonan para moverse libremente.

Alimentación de los poliquetos

Entramos en otro aspecto de los poliquetos bastante diverso. Vamos a ver las formas de alimentación que presentan las diferentes especies:

• Carnívoros: presentan mandíbulas. Suelen ser errantes.
• Herbívoros: también tienen mandíbulas, pero adaptadas a la materia vegetal.
• Detritívoros: consumen materia en descomposición o residuos orgánicos producidos por otros organismos.
• Filtradores: se alimentan de partículas suspendidas en el agua, principalmente de plancton. Es la forma de alimentación principal de los poliquetos sedentarios.
• Depositívoros: consumen lo que se acumula sobre el suelo bentónico.

Reproducción

La mayoría de los poliquetos son unisexuales, si bien no presentan dimorfismo. Sin embargo, no presentan órganos sexuales, sino que liberan los gametos al medio acuático a través de conductos nefridiales o mediante la ruptura del tegumento. Por tanto, la fecundación es externa.

Una excepción curiosa son los nereidos, unos poliquetos que, en el momento de reproducirse, se metamorfosean a un estadio llamado heteronereis. Por otro lado, los sílidos tienen un tipo de reproducción diferente, la esquizogamia, consistente en desarrollar un estolón repleto de gametos.

Algunos ejemplos de poliquetos

Es posible que te cueste imaginar a uno de estos animales solo con su descripción. Por eso, aquí tienes algunos ejemplos sobre los que puedes buscar información:

• Plumero del Pacífico (Sabellastarte sanctijosephi): se puede encontrar en los arrecifes de coral del Indopacífico con aspecto de pluma gracias a sus branquias externas.
• Ratón de mar (Aphrodita aculeata): parece un pequeño bulto peludo, de ahí su nombre. Está recubierto de quetas iridiscentes.
• Gusano árbol de Navidad (Spirobranchus giganteus): este poliqueto tubícola se introduce en corales vivos y deja al descubierto dos coronas espirales de colores intensos, de ahí su nombre.
• Phyllodoce lineata: tiene 300 segmentos en su cuerpo y que mide 2 centímetros de largo. Se encuentra en el noreste del Atlántico, en sustratos arenosos o fangosos.

Valor para los ecosistemas

Al tratarse de animales tan diminutos, los poliquetos se suelen alimentar de plancton o partículas más pequeñas que ellos, lo que les convierte en animales limpiadores (en especial aquellos cuya dieta consiste en detritus). Por otro lado, también son el alimento de otros animales, como peces o crustáceos.

Por tanto, son elementos clave de la cadena trófica y, en general, de la homeostasis de los ecosistemas. No son agradables a la vista para la mayoría, son pequeños y casi invisibles, pero también una muestra más de que no se puede prescindir de nadie a la hora de conservar el planeta.