¿Sabías que los perros tienen noción del tiempo?

La noción del paso del tiempo es un concepto difícil de entender, pero fácil de aplicar. De hecho, varias especies animales —como los perros— la han desarrollado y la practican bastante en su vida diaria.

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 12 diciembre, 2023

La mayoría de los canes tienden a desarrollar diversos hábitos conforme se acoplan a la convivencia con su familia. Aunque casi todos son tan simples como seleccionar un sitio para descansar o hacer sus necesidades, otros son bastante curiosos, como el caso de exigir su comida siempre a la misma hora.

Por supuesto, esto no significa que sean capaces de «leer» el reloj, pero es claro que los perros tienen cierta noción del paso del tiempo. Contrario a los humanos, los caninos domésticos carecen de habilidades cognitivas complejas que les permitan interpretar el sistema horario.

Sin embargo, no es necesario conocer cómo funciona un reloj para tener noción del paso del tiempo. Es gracias a esto que los canes son capaces de «construir un horario» y anticiparse a ciertos eventos habituales en su día a día. Sigue leyendo este espacio y descubre más sobre la noción del paso tiempo en los perros.

¿Qué es la noción del tiempo?

Para empezar, es necesario definir dos cosas: tiempo y noción del tiempo. El tiempo es un concepto complejo que las personas utilizan de manera innata para distinguir el pasado, el presente y el futuro. Visto de otra manera, es una unidad de medida que sirve para ordenar los eventos que acontecen en el universo observable.

Por otro lado, la noción del tiempo se refiere a la percepción que tiene cada ser vivo sobre el paso del tiempo. Es decir, cómo viven, cómo experimentan y cómo interpretan los diferentes eventos que ocurren en un lapso determinado.

Claro está, dicha percepción depende de cada observador, por lo que es posible que dos individuos independientes «sientan» que su tiempo transcurre de forma distinta.

Los perros perciben el paso del tiempo

Según menciona un artículo publicado en International Journal of Developmental and Educational Psychology, la noción del tiempo en los humanos está influenciada por el desarrollo psicomotor y la percepción espacial.

De hecho, aunque no se conozca a profundidad el concepto de «tiempo», la noción de este se adquiere por experiencia e interacción con el entorno.

Lo anterior permite inferir que los seres vivos no necesitan conocer el concepto del «tiempo» ni sus implicaciones para percibirlo. Por lo tanto, especies sin capacidades cognitivas complejas, como los perros, podrían tener su propia noción del tiempo y la habilidad para «predecir» ciertos eventos repetitivos.

A pesar de que no es posible establecer cómo «perciben el tiempo» los perros, existen algunos estudios que han demostrado su capacidad para distinguir la duración de ciertas actividades. Por ejemplo, un estudio publicado en la revista Psychology & Neuroscience, encontró que los perros pueden discriminar entre eventos de larga y corta duración.

Es importante resaltar que aunque los perros sean capaces de «calcular» el tiempo que transcurre entre un evento y otro, necesitan experimentarlo de manera consecuente para no «olvidarlo». Esta es la razón por la que, en su mayoría, «predicen» las actividades más repetitivas de su día o las que reciben un refuerzo positivo, como salir a pasear, comer o jugar.

Limitantes de la noción del tiempo en los perros

Un aspecto interesante de la noción del tiempo en los humanos, es que se suele basar en otras pistas sensoriales, como la posición corporal o la vista, para «calcular» el tiempo transcurrido. Por supuesto, aunque esto eleva la precisión de la percepción temporal, no garantiza su eficacia.

De una manera similar, los perros también usan ciertas pistas visuales y auditivas para calcular el paso del tiempo.

En una investigación publicada en la revista Journal of Comparative Psychology, se emplearon señales auditivas y visuales para comprobar si eran capaces de estimar su duración. Los resultados fueron interesantes, pues lograron cumplir la tarea con éxito, pero no de la manera que se esperaba.

El estudio antes citado, menciona que, de manera independiente, los perros son capaces de estimar la duración tanto de las señales auditivas, como de las visuales. Sin embargo, cuando se presentan al mismo tiempo, los ejemplares deciden enfocarse solo en una de las pistas sensoriales (en este caso en las auditivas).

La información anterior sugiere que la noción del tiempo en los perros pasa por alto varias pistas sensoriales, lo que incrementa el margen de error de sus «predicciones». Es cierto que esto no tiene mucha relevancia ni un impacto sustancial en su vida diaria, pero genera varias situaciones interesantes.

Los perros necesitan pistas para «percibir» el tiempo

Un estudio divulgado a través de la revista Applied Animal Behaviour Science menciona que los perros son capaces de estimar el tiempo que tardan en llegar a casa sus tutores. Sin embargo, también recalcan que no parecen «extrañarlos», sino que en el momento que reciben pistas sensoriales, «recuerdan» que se han ido y están próximos a llegar.

Esto no es nada extraño, pues se conoce que los perros priorizan las pistas sensoriales para determinar cuánto tiempo ha transcurrido. Es claro que esto no es eficiente ni fiable. Aun así, dicho mecanismo es más que suficiente para que un perro comience a «predecir» ciertos eventos del día.

La noción del tiempo de los perros no es igual que la de los humanos

Cada especie e individuo percibe el transcurso del tiempo de una manera diferente, por lo que es entendible que la noción del tiempo de los perros no sea igual que la de los humanos. No obstante, las diferencias son aún más grandes de lo que parecen.

Por ejemplo, existen varios tutores que se sorprenden cuando salen solo por unos minutos y sus perros los reciben como si hubieran tardado horas. En parte, la responsable de este comportamiento es la percepción del tiempo de los canes y sus limitantes.

Como se mencionó con anterioridad, los perros utilizan varios tipos de señales sensoriales para «calcular» el paso del tiempo. En este caso, las pistas fundamentales que ellos reciben es la salida y el regreso de sus tutores.

Siempre que el can advierta que su tutor ha salido y entrado, sin importar el tiempo que sea, actuará como si hubiera transcurrido las mismas horas que están acostumbrados a pasar solos la mayoría de las veces.

Visto de otra manera, el perro solo sabe que pasa mucho tiempo desde que sale su dueño hasta que llega. Por lo tanto, incluso aunque se le deje solo por unos minutos, su cerebro interpreta que ha pasado el mismo periodo de siempre, lo que lo hace volverse loco de emoción.

Claro está, dichos eventos de frenesí son propiciados por problemas de estrés y ansiedad, los cuales modifican la percepción temporal del perro. Estos factores, a su vez, se encuentran muy relacionados. De hecho, si el can no tuviera alguna noción del paso del tiempo, es poco probable que padezca trastornos como la ansiedad por separación.

La percepción del tiempo en los perros es única

Como se puede observar, la noción del paso del tiempo en los perros es única en su tipo y tiene varias particularidades. Por supuesto, aún no se comprende por completo su función y su impacto en la vida diaria de la mascota. No obstante, es bastante interesante que el mejor amigo del hombre sea capaz de «predecir» algunos eventos de su ambiente.