5 distintas razas de galgo
Todos sabemos qué tipo de perro es un galgo, pero ¿sabías que hay distintas variedades y que son muy diferentes entre ellas? Te hablamos de cuáles son las razas de galgos más conocidas y cómo son sus características.
Las distintas razas de galgo
Galgo afgano
Este es uno de los galgos más llamativos (foto que abre este artículo) por su larguísimo pelo, que destaca sobre cualquier otra característica de su cuerpo. Su pelo es liso y sedoso, de brillante color dorado. Aunque parezca que esto podría ser un impedimento para desempeñar su trabajo, para nada lo es.
Este animal es capaz de alcanzar los 60 km/h y pude trotar a unos 20 km/h de manera indefinida. Proviene de Afganistán, tal y como su nombre indica, y hasta hace poco era casi imposible tener un ejemplar de esta raza, pues las civilizaciones antiguas lo consideraban como uno de los tesoros nacionales.
De hecho, todos los perros afganos que habían en el país eran propiedad del monarca, hasta que llegaron las colinas británicas y lo importaron a su país, desde donde se extendió por Occidente.
Galgo ruso
Si hay un galgo elegante, alto y delgado con un porte que atrae las miradas de todos, este es el galgo ruso. También se le conoce por el nombre de Borzoi y fue durante años el perro de Zares y nobles rusos, los cuales lo usaban para la caza de lobos.
Además de lobos, también cazaban liebres, con lo que podemos hacernos una idea de la velocidad que este perro era capaz de alcanzar. No obstante, a pesar de sus habilidades, su belleza fue lo que más admiraban los monarcas y, por ello, fue parte de los palacios de ellos.
Se especula que esta raza surgió de un cruce con los galgos árabes, especialmente al observar su pelo, el cual lo cubre en los climas más fríos.
Galgo Azawakh
Este galgo proviene de África, de una de las zonas cercanas al desierto. Se cree que fue criado por la tribu de los Tuareg. Se emplea para la caza de conejos y liebres gracias a que puede alcanzar velocidades de hasta 40 km/h.
A diferencia de otras razas de galgos, este es más alto que largo. Fue, como sucedió con el galgo afgano, durante años, símbolo de la tribu, por lo que jamás se consideró su venta ni su exportación hasta que en la década de los 70, que se pudo introducir en Europa. Esto sucedió gracias a un cazador que salvó a la tribu de un ataque de elefantes y, como obsequio, le regalaron una pareja de este galgo.
Galgo escocés
Aparentemente no parece un galgo, y es que solo podría notarse por sus largas patas y su cuerpo esbelto, así que su aspecto es cuanto menos peculiar. Durante años se usó en Escocia para la caza de venados y jabalíes gracias no solo a su velocidad, sino también a su fortaleza.
No se sabe muy bien de dónde surgieron los primeros ejemplares de este galgo, ya que algunos creen que los llevaron a Escocia los fenicios, mientras que otros piensan que fueron los celtas.
Su pelo largo parece haber sido magistralmente creado para protegerse de los fríos inviernos escoceses. Curiosamente, el pelo largo de su cuerpo no está presente en la parte baja de sus patas, que se presentan pelonas, como sucede con las ovejas por ejemplo.
Galgo banjara
Esta puede que sea una de las razas de galgo más desconocidas, ya que proviene de Banjara, en la India, el único lugar en el que parece que se conoce. Muchos incluso creen que aún no se le puede considerar como una raza.
Su apariencia larga, alta y esbelta no deja lugar a dudas de que sí es un galgo, pero en su cara hay algunas características que advierten de un cruce con otra raza, motivo por el que muchos dudan realmente de su origen. Sea como sea, su velocidad y habilidades lo han hecho ganarse un puesto entre las razas de galgo más famosas.