Los vómitos en perros son algo muy común, pero es importante tomar una serie de medidas y precauciones para que no vayan a más. Pueden no ser nada o sí, aunque en ambos casos no es cómodo para tu mascota y por ello debes ayudarlo a que esa incomodidad se calme cuanto antes.
En este artículo te daremos varios consejos para saber cómo cuidar a tu perro si tiene vómitos. No te pierdas detalle y tenlos a mano, nunca sabes cuándo los vas a necesitar.
Cuidados de los vómitos en perros
Aunque los vómitos no tienen por qué alarmarnos, si ya ha pasado un tiempo prudencial (2 días a los sumo) y tu perro sigue vomitando, lo mejor es que vayas al veterinario cuanto antes.
Pero mientras tanto, intenta esto para que tu perro se sienta mejor:
- No le des alimento durante al menos dos horas después de sus primeros vómitos. Esto permitirá que su aparato digestivo se recupere.
- Agua en pequeños intervalos. Los vómitos en perros hacen que el animal se deshidrate, por lo que necesitará beber agua. Deberá ser administrada en pequeñas dosis, ya que si le damos demasiada, el mismo agua lo hará vomitar de nuevo. Entonces más que ayudar habremos empeorado la situación.
- Dieta blanda. Si tu perro ha dejado de vomitar por al menos seis horas podrás darle algo de comer. Eso sí, deberá ser dieta blanda, lo mismo que darías a un niño con vómitos. Lo recomendable es un poco de arroz y un poco de pollo hervido sin piel, huesos ni sal.
- No mediques a tu perro. Aunque haya quien te recomiende algún tipo de medicamento, no te fíes. Estos deben ser supervisados por el veterinario. Que haya funcionado a otro animal no significa que lo hará con el tuyo. Dar un medicamento no prescrito solo podría ocasionar más daño a tu mascota.
- Incluir su alimento. Después de dos días, en los que se supone que el tiempo entre vómitos se ha ido alarganado, podremos comenzar a incluir el alimento normal de nuestra mascota con la dieta blanda, siempre a partes iguales.
Cuándo los vómitos en perros son peligrosos
Hay casos en que los vómitos pueden ocasionar males mayores en tu perro. Debes vigilarlo de cerca, a él y también a su vómito. He aquí varias causas por las que deberías tomar acción inmediata:
- Si encuentras plásticos. Si en los vómitos aparecen pequeños trocitos de plástico o de bolsa de plástico, ve al veterinario, ya que esto podría ocasionar un trombo intestinal y traer grandes problemas a tu amiguito.
- Olor fuerte. Si los vómitos de tu perro huelen mucho a químico es posible que haya ingerido una sustancia que pueda hacerle un daño mayor. En este caso, ve al veterinario sin demora.
- Sangre. No te excuses creyendo que si hay sangre en el vómito fue porque al animalito le costó expulsarlo y se hizo daño en la garganta. La sangre en los vómitos nunca suele ser buena señal.
- Exceso de saliva. Un exceso de saliva también nos puede estar avisando de un mal mayor. Mientras está vomintando y casi deshidratado no es normal que un animal segregue tanta saliva, por lo que has de acudir a tu veterinario sin demora.
- Regurgitar. Si sigue regurgitando a pesar de no tener nada e intenta vez tras vez vomitar de nuevo, es mejor acudir al médico.
- Si quiere vomitar y no puede. Esto puede suceder cuando hay una obstrucción gástrica que puede llegar a cortar el flujo sanguíneo y desarrollar necrosis.
- Reniega la comida o el agua. Si tu animal no acepta ni siquiera un poco de agua, ve rápidamente al veterinario, es posible que haya algo interno que no sepas.
Son muchas las cosas que puedes hacer en casa por cuidar de tu mascota cuando tiene vómitos, pero si no consigues saber la razón, tienes dudas o notas algo extraño, ve al veterinario.