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¿Cómo vaciar las glándulas anales en perros?

4 minutos
Vaciar las glándulas anales en perros puede ser un proceso algo desagradable, pero es importante hacerlo correctamente para evitar problemas a largo plazo en el can.
¿Cómo vaciar las glándulas anales en perros?
Última actualización: 14 octubre, 2022

Las glándulas perianales caninas pueden ser muy desagradables de vaciar, pero en ciertas ocasiones es necesario. Si quieres conocer cómo vaciar las glándulas anales en perros de la forma más eficiente y limpia posible, aquí lo puedes leer.

Saber hacerlo correctamente no solo permite a los tutores realizar la acción de forma pulcra, sino también eficiente. Gracias a este procedimiento, el can de la casa evitará ciertas molestias e incluso problemas de salud.

¿Qué son las glándulas perianales?

Antes de explicar el proceso, vamos a definir qué son estas glándulas y qué complicaciones pueden aparecer en relación a ellas. Esto te ayudará a conocer un poco mejor esta parte del bienestar de tu compañero canino.

Las glándulas perianales son dos sacos situados bajo la piel del can a ambos lados del ano. Estos sacos excretan una sustancia de color amarillento o marrón y de olor desagradable hacia el exterior, con la finalidad de lubricar las heces a la hora de defecar.

De todas formas, esta no es la única función de estas glándulas: ¿te has preguntado alguna vez por qué los perros se huelen el trasero unos a otros? Pues es precisamente porque este líquido del que hablamos no solo sirve para lubricar, sino que contiene información sobre el sexo, estado de salud e incluso el temperamento del animal.

Además, en caso de miedo extremo, los perros poseen un reflejo que vacía estos conglomerados celulares para que el mal olor ahuyente a su posible agresor. Por lo tanto, es una estructura con finalidad fisiológica, de comunicación y de defensa.

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Problemas de las glándulas perianales

Estas glándulas, como cualquier otra, pueden derivar en problemas de salud. Son especialmente propensas a las infecciones debido a su cercanía al ano. Aquí tienes los problemas más frecuentes de las glándulas perianales:

  • Impactación: el líquido se acumula y la bolsa se inflama, por lo que las glándulas son difíciles de vaciar debido a la presión.
  • Saculitis: ocurre cuando las bacterias del tracto digestivo o del exterior del ano infectan el líquido del interior de los sacos anales, volviéndolo verdoso o amarillento debido al pus.
  • Absceso: si el pus se encapsula, puede quedarse acumulado en el saco u obstruir el conducto de vaciado.

Cuando tu perro pueda estar teniendo problemas con los sacos perianales, las señales más claras de ello serán lamerse la zona en exceso, arrastrar el ano por el suelo para intentar vaciarlos, mostrarse apático o presentar fiebre alta por la infección. Además, el can desprenderá un olor muy desagradable por la zona anal.

Si tu compañero canino necesita ayuda debido a alguno de estos problemas, no desesperes. En las siguientes líneas podrás leer cómo vaciar las glándulas anales en perros.

¿Cómo vaciar las glándulas anales en perros?

Lo primero que hay que saber es que, en un perro sano, no es necesario vaciarlas. El líquido que excretan y producen suele ser el justo y necesario para cumplir su función.

Sin embargo, pueden haber muchas razones por las que un can pueda requerir su vaciamiento: mala alimentación u obesidad, diarreas recurrentes, un traumatismo o incluso deformaciones inherentes a ciertas razas.

El procedimiento para vaciar las glándulas anales en perros es el siguiente:

  • Siempre que se pueda, es necesario ponerse guantes y usar un pañuelo desechable para vaciarlas.
  • Una vez preparado, el tutor debe sujetar las bolsas entre el pulgar y el índice.
  • Tras esto, es necesario masajearlas de delante hacia atrás para sacar el líquido poco a poco.
  • Si la obstrucción del conducto es muy persistente, puede ser necesario introducir un dedo en el ano y masajear hacia la apertura.
  • Por último, hay que limpiar las excreciones y desinfectar la zona.

Precauciones a la hora de vaciar las glándulas anales en perros

A modo de conclusión, es necesario recalcar que la obstrucción de las glándulas perianales es un problema de salud, por lo que es necesaria una visita al veterinario. Si el can pudiera necesitar un vaciado regular de sus glándulas, es un profesional el que tiene que enseñar al tutor a hacerlo correctamente.

Por esta misma razón, no se debe experimentar en casa, ya que hacerlo de forma incorrecta puede provocar lesiones en la zona. Vaciarlas de forma preventiva muy a menudo tampoco es recomendable, ya que de esta manera se estimulan a las glándulas a producir más líquido y esto llevaría precisamente al problema que se quiere evitar.

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Por último, es necesario recalcar que en ocasiones es necesario recurrir a la cirugía o administrar antiinflamatorios y/o antibióticos después del vaciado, por lo que un especialista, de nuevo, sería la mejor opción para asegurarse de que el can recibe la mejor atención posible.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


Problemas en las glándulas anales - Veterinarios de AlicanteEnfermedades del tracto urinario caudal de los perros

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.