5 tipos de cáncer comunes en gatos

Los cánceres son comunes en el reino animal, incluyendo a perros, gatos y otras mascotas. Por desgracia, su tasa de supervivencia una vez se detecta la neoplasia maligna es bastante corta.
5 tipos de cáncer comunes en gatos

Escrito por Samuel Sanchez

Última actualización: 30 agosto, 2021

Según fuentes que citaremos con posterioridad, 1 de cada 5 gatos padecen un proceso cancerígeno a lo largo de sus vidas. Esto es especialmente común en aquellos felinos que están llegando al ocaso de su existencia, pues en la etapa senior las probabilidades de que algo vaya mal en el organismo son mucho más altas. Así pues, ciertos tipos de cáncer son comunes en gatos mayores.

No todos los cánceres responden de la misma forma frente a un tratamiento, pero en animales de compañía el pronóstico no suele ser muy positivo. Sigue leyendo para detectar una neoplasia maligna en tu felino antes de que sea demasiado tarde.

¿Qué es un cáncer felino y cuáles son los más comunes?

El término “cáncer” engloba a varias enfermedades con una etiología similar. En estos cuadros clínicos, una estirpe de células muta a nivel de su ADN y comienza a crecer más rápido de lo normal. Al no seguir los patrones de división y senescencia esperables, se agolpan los cuerpos celulares y se forma una masa denominada tumor. Si este es maligno, se puede expandir a otras partes del cuerpo.

Tal y como indica el Flint Animal Cancer Center, 1 de cada 5 gatos tendrán cáncer a lo largo de su vida. Vamos más allá, pues el 32 % de los felinos mueren a causa de este cuadro clínico y cada año solo en Estados Unidos se detectan hasta 6 millones de ejemplares con tumores malignos. A continuación, te presentamos los 5 tipos de cáncer más comunes en gatos y cómo detectarlos.

La mayoría de cánceres se presentan con tumores, pero otros (como las leucemias) pueden instaurarse con síntomas más generales.

1. Linfoma

El linfoma es un tipo de cáncer de sangre que se caracteriza por la proliferación excesiva de linfocitos (glóbulos blancos B o T). Dependiendo del lugar en el que se localice el foco del problema, esta enfermedad puede ser gastrointestinal, multicéntrica o miscelánea. Se ven afectados los intestinos, la mandíbula, la nariz, el centro del tórax u otras áreas dependiendo de la variante.

Los síntomas generales son los siguientes: pérdida de apetito, debilidad, vómitos, sangrados, dificultad para respirar, cojera, depresión y mal olor. Al tratarse de un cáncer de tipo diseminado, siempre se trata con quimioterapia. El pronóstico no es muy positivo, pues la mayoría de pacientes mueren tras el tratamiento a los 6 meses.

Se estima que 48 de cada 100 000 gatos presentarán un linfoma a lo largo de su vida. 

Un ejemplo de linfoma en la sangre.
En este tipo de cáncer, se producen células inmunitarias de forma excesiva.

2. Cáncer de mama

Tal y como indican estudios, hasta hace no mucho se creía que la prevalencia del cáncer de mama en gatas era baja, de 25 casos por cada 100 000 ejemplares. De todas formas, se ha descubierto en publicaciones recientes que el 90 % de los tumores mamarios en esta especie son malignos, por lo que la cifra ha aumentado de forma drástica, a 230 pacientes por cada 100 000 gatos sanos.

El síntoma más claro de esta condición es la presencia de masas nodulares debajo de la piel, específicamente en una o más de las mamas. La extracción quirúrgica del tumor siempre es el primer paso ante este cuadro, pero a veces este ya ha provocado una metástasis y el abordaje se complica mucho.

La supervivencia media 2 años después del diagnóstico es de un 17, 7 %. Si el tumor es muy grande y ha crecido a otras partes del cuerpo, la cosa se complica aún más.

3. Carcinoma de las células escamosas (SCC)

Este es uno de los tipos de cáncer más comunes en gatos, con una incidencia variable del 15 al 48 % de los felinos con neoplasias de la epidermis. Como su propio nombre indica, el tumor deriva de las células escamosas, componentes principales de la superficie de la piel.

En general, la masa tumoral aparece en secciones del cuerpo poco pigmentadas, como los párpados, el borde de la nariz, los labios y las orejas. El crecimiento se parece a una “coliflor” y se ulcera con el paso del tiempo. La cirugía al uso o la criocirugía pueden llegar a permitir la extirpación del tumor al completo, lo cual salva la vida del animal.

De todas formas, el cáncer puede reaparecer en otras partes del cuerpo con el tiempo. El pronóstico general es pobre, de 1 a 3 meses de vida.

4. Fibrosarcoma

El fibrosarcoma es un tipo de cáncer que se forma en el tejido fibroso, afectando a las células encargadas de generarlo (fibroblastos). No es nada común en seres humanos, pero sí que se ha observado un aumento de su prevalencia en félidos con los nuevos métodos diagnósticos. Curiosamente, surge como reacción a ciertas vacunas en 1 de cada 10 000 gatos.

El síntoma más claro es la aparición de una masa tumoral en el lugar de administración de la vacuna. De nuevo, el tratamiento principal es la resección quirúrgica del tumor, aunque también se puede acudir a la quimioterapia en los casos en los que el cáncer se ha expandido más allá de la zona esperable.

Es un tipo de cáncer que no tiende a la metástasis. En sus primeros estadios, solo el 3-5 % de los tumores se han expandido a otras zonas del cuerpo.

5. Cánceres provocados por el virus de la leucemia felina

Aunque no sea uno de los tipos de cáncer en gatos al uso, la infección por el virus de la leucemia felina (VLFe) es causante de muchos tipos de neoplasias malignas. En los últimos estadios de la enfermedad, este agente patógeno invade la médula ósea y trastoca la producción de glóbulos blancos y rojos, lo que se traduce en cuadros como el linfoma ya descrito.

Se estima que el 15 % de los gatos infectados con este patógeno desarrollarán cáncer en el curso de su enfermedad. Por desgracia, se trata de una condición crónica que no tiene una cura evidente y el único abordaje en muchos casos es paliativo.

Este virus infecta al 1-2 % de la población de gatos domésticos habitantes en hogares.

Uno de las razas de gatos naranjas.

Anotaciones finales

La edad media de presentación de un cáncer en gatos es de 12 años, es decir, en la etapa adulta-senior. Por ello, en muchos casos los veterinarios deciden tomar un enfoque paliativo y no tratar de forma directa el tumor, sobre todo si hay metástasis y la salud del felino ya está muy debilitada. Es comprensible, pues a veces el propio abordaje clínico podría acabar con la vida del animal.

En cambio, en otros casos merece la pena intentar contrarrestar la neoplasia maligna, pero siempre teniendo presente que la tasa de supervivencia general en los tipos de cáncer más comunes en gatos es bastante baja. Nunca hay que tirar la toalla, pero es necesario ser realista y prepararse para lo que pueda venir.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Common cancer in cats, Flint Animal Cancer Center. Recogido a 26 de agosto en https://www.csuanimalcancercenter.org/2019/11/20/common-cancers-in-cats/
  • Chocteau, F., Boulay, M. M., Besnard, F., Valeau, G., Loussouarn, D., & Nguyen, F. (2019). Proposal for a histological staging system of mammary carcinomas in dogs and cats. Part 2: feline mammary carcinomas. Frontiers in veterinary science, 6, 387.

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