Poliuria y polidipsia en perros: causas y tratamiento

La poliuria y la polidipsia en perros son 2 mecanismos comportamentales que ayudan a reajustar la hidratación del cuerpo. Descubre aquí cómo funcionan.
Poliuria y polidipsia en perros: causas y tratamiento
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 03 diciembre, 2021

Parte del trabajo de homeostasis que realiza el cuerpo es el mantenimiento del volumen y la composición de los líquidos, es decir, el nivel de hidratación general. Cuando los valores óptimos de esta variable se alteran, el organismo activa ciertos comportamientos destinados a devolver el equilibrio: la poliuria (incremento de la producción de orina) y la polidipsia (aumento de la ingesta de agua).

Este balance entre la ingesta y la eliminación de líquidos se mantiene gracias a diversos mecanismos. Asimismo, las causas que activan estas conductas también son múltiples. En este artículo encontrarás una revisión general a esta cuestión.

Definición de poliuria y polidipsia en perros

Estos 2 mecanismos son caras opuestas de la regulación de líquidos en el organismo y están modulados por diferentes órganos y procesos fisiológicos. Es por eso que vamos a verlos por separado en los siguientes apartados.

Poliuria

La poliuria es un aumento de la diuresis (producción de orina) por encima de lo normal. Se considera que un perro está sufriendo esta condición cuando micciona más de 40-50 mililitros de orina por kilogramo de peso en un solo día.

No se debe confundir esta entidad clínica con la poliaquiuria, que consiste en orinar una mayor cantidad de veces, pero expulsando menos volumen de orina de lo normal.

El proceso diurético está regulado por la hormona antidiurética o argipresina (ADH). Esta sustancia estimula la reabsorción de agua en los riñones. Por tanto, cuando existe un déficit de ADH, se reabsorbe menor cantidad de agua y esta va a parar al exterior en forma de orina.

Un perro hace pis en un sofá.

Polidipsia

Por su parte, la polidipsia consiste en un aumento de la ingesta de agua. En este caso, se considera que un perro bebe más de lo normal cuando supera los 100 mililitros de agua por kilogramo de peso en un día.

La ingesta de agua está regulada por el hipotálamo. Esta estructura subcortical posee células especializadas en detectar los niveles de agua intracelulares, llamadas osmorreceptores . Cuando falta hidratación, se desencadena el mecanismo de búsqueda de agua, así como la liberación de la hormona antidiurética.

Síndrome poliuria-polidipsia

En el momento en el que alguna patología altera la regulación de líquidos en el organismo, aparece el síndrome poliuria-polidipsia, que provoca que el perro beba y orine más de lo normal. En realidad, estas 2 conductas forman parte del mismo ciclo, pues si el can micciona demasiado necesitará beber más, y si aumenta la ingesta de agua producirá mayor cantidad de orina.

Por lo general, primero se origina la poliuria y esta da pie al comienzo del ciclo. No obstante, esta condición es un síndrome, es decir, un conjunto de síntomas producto de una enfermedad subyacente. No basta con equilibrar el nivel de hidratación corporal, sino que se deben tratar las causas directamente.

Causas de la poliuria y polidipsia en perros

Son varias las enfermedades que cursan con síndrome de poliuria-polidipsia, ya que alteran directamente los mecanismos de la sed y la producción de la hormona ADH. A continuación puedes encontrar las más frecuentes: 

  • Piómetra: se trata de una infección purulenta en el útero. Las toxinas producidas por las bacterias interfieren con la producción de la hormona antidiurética.
  • Pielonefritis: es un proceso inflamatorio en la uretra por causas bacterianas. Afecta también a los riñones, impidiendo que se reabsorba el agua y aumentando la cantidad de orina que se expulsa (poliuria).
  • Síndrome de Cushing: esta enfermedad causa una mayor actividad de las glándulas adrenales, encargadas de segregar los glucocorticoides naturales del cuerpo. El exceso de estas hormonas hace disminuir la producción de ADH e impide la reabsorción de agua en los riñones, causando poliuria.
  • Síndrome de Addison: esta dolencia es la inversa al síndrome de Cushing, pues la producción de glucocorticoides en las glándulas adrenales se ve reducida. En este caso, el equilibrio sodio-potasio se encuentra alterado, por lo que no se absorbe la suficiente cantidad de agua y aparece la poliuria.
  • Feocromocitoma: es un tumor de las glándulas adrenales que incrementa el flujo renal y, por tanto, la cantidad de orina.
  • Diabetes mellitus: en esta enfermedad se altera la utilización de la glucosa en las células o la producción de insulina. De esta manera, este tipo de azúcar termina expulsándose por la orina, que a su vez impide la reabsorción de agua en los riñones.
  • Insuficiencia renal crónica: en esta enfermedad, el tejido de los riñones se va deteriorando de forma progresiva, lo que acaba por impedir la correcta filtración de la sangre y la reabsorción del agua, causando poliuria.

Trastornos relacionados con la polidipsia

Como has podido comprobar, los trastornos del anterior apartado impiden que el agua del cuerpo se reutilice, de modo que se aumenta la producción de orina y, por consiguiente, la ingesta de agua. No obstante, hay algunos trastornos específicos que inician el ciclo poliuria-polidipsia por el otro extremo. Los más importantes son estos:

  • Polidipsia psicógena: en este caso, el exceso de ingesta de agua tiene su origen en una alteración psicológica, como una estereotipia. El estrés, la falta de enriquecimiento y las situaciones de abuso son los desencadenantes más habituales de esta conducta.
  • Alteraciones cerebrales: los tumores, los traumatismos y los accidentes cerebrovasculares son patologías capaces de alterar el funcionamiento del centro neurológico de la sed.
  • Encefalopatía hepática: se trata de una enfermedad en la que se pierden funciones cerebrales debido a la acumulación de toxinas que el hígado no es capaz de eliminar por diversas causas, como una hepatitis. En este caso, se vería alterado el centro de la sed y el perro bebe más de lo que debería.

Tratamiento de la poliuria y polidipsia en perros

Puesto que las causas de ambas alteraciones se sitúan en patologías subyacentes, el tratamiento se orienta a curarlas antes que a disminuir la poliuria y polidipsia en perros. En el caso de que la ingesta o la producción de orina estén causando problemas graves al animal, el veterinario añadirá medicamentos diuréticos o antidiuréticos.

¿Por qué mi perro lame la orina de otro perro?

Si observas que tu can bebe u orina más de lo necesario, no tardes en acudir al veterinario. Como has podido leer, las causas que originan estos comportamientos requieren un diagnóstico completo y un tratamiento específico que no vas a poder llevar a cabo por ti mismo.


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