Podenco ibicenco: características y cuidados

Originaria de la isla de Ibiza, esta raza destaca por sus grandes aptitudes como perro sabueso y animal de compañía. ¡No te quedes sin conocer a uno de los linajes más representativos y con más historia de toda España!
Podenco ibicenco: características y cuidados
Sebastian Ramirez Ocampo

Escrito y verificado por el médico veterinario y zootecnista Sebastian Ramirez Ocampo.

Última actualización: 08 marzo, 2024

Si hablamos de perros enérgicos, hábiles, astutos y con mucha capacidad de aprendizaje, el podenco ibicenco figura, sin duda, en los primeros lugares. Si bien son poco conocidos fuera de España, en el país ibérico son muy populares, sobre todo, por sus habilidades para la caza.

Su nombre hace referencia a su lugar de origen (ibicenco: gentilicio utilizado para los originarios de Ibiza) y a sus características de trabajo (podenco: término español usado para describir ciertos tipos de perros sabuesos).

También llamado Ca eivissenc —en lengua catalana—, esta raza canina española cuenta con algunas particularidades que harán que cualquier persona quiera tenerlos en su hogar. Continúa la lectura de este artículo y descubre los orígenes, comportamientos, cuidados y demás características de este espectacular animal de compañía.

Origen del podenco ibicenco

Ficha del podenco ibicenco que especifica su origen, peso y altura promedio por género, así como la esperanza de vida, color y pelo.

La raza se desarrolló en las islas de Mallorca, Menorca, Formentera y, en especial, en Ibiza. De acuerdo con el artículo Los Canidos Españoles. Orígenes y Clasificación, el podenco ibicenco proviene de perros egipcios traídos a las islas baleares hace más de 2000 años.

Se cree que los comerciantes fenicios, cartaginenses o romanos fueron los responsables de su introducción a este territorio. No obstante, también se sugiere que sus antepasados llegaron mucho más tarde, junto con los musulmanes, hace unos 700 años.

El reconocimiento oficial como una raza ocurrió en el año 1982, por parte de la Federación Cinológica Internacional (FCI). Su clasificación se dio en el grupo 5 (perros primitivos) y sección 7 (canes de caza). De acuerdo con esta entidad, se pueden distinguir tres variedades:

  • Pelo liso: de un aspecto fuerte y brillante, más no suave.
  • Pelo duro: áspero y bien poblado.
  • Pelo largo: sedoso y de una longitud de 5 centímetros.


Características físicas  

Se trata de un perro de figura esbelta y cuerpo bien proporcionado. Se cataloga como un can dolicocefálico, es decir, que tiene un hocico largo y aplastado. Posee grandes orejas que permanecen en posición vertical y unos pequeños ojos color ámbar.

Tanto el cuello como las extremidades son largas y musculosas. Se trata de distintivos propios de los canes que pueden movilizarse a grandes velocidades y en ambientes de espesa vegetación.

Por su parte, el torso es delgado, su pecho es estrecho y su cola larga permanece erguida. Gracias a todas las características mencionadas, es considerado un excelente perro sabueso o cazador.

En cuanto a su manto, se lo puede encontrar en varias tonalidades:

  • rojizas,
  • blancas,
  • combinación de ambos colores.
En edad adulta, alcanzan de 20 a 25 kilogramos de peso y los 70 centímetros de altura.
Podenco ibicenco al aire libre.
El aspecto del podenco ibicenco es muy similar al de los perros inmortalizados en los jeroglíficos egipcios. Crédito: Petfinder.

Temperamento del podenco ibicenco

Por regla general, los sabuesos son animales muy cercanos y leales a sus tutores: el podenco ibicenco no es la excepción. Su carácter —templado, dócil y afectuoso— le permite convivir sin problemas en hogares con niños o donde se encuentren otros perros.

Eso sí, es importante hacer una socialización desde temprana edad, con el objetivo de evitar comportamientos agresivos en la adultez.

Entre otras cosas, responde muy bien al entrenamiento positivo, pues se distingue por su capacidad de aprendizaje y astucia en diferentes actividades. Este es un rasgo heredado de sus antepasados, que también eran cazadores.

Por el contrario, no suele aprender órdenes si el refuerzo es negativo, como por ejemplo, a base de regaños y golpes. Además, se trata de una raza muy enérgica y activa, por lo que necesita de estimulación constante para no aburrirse.

Aunque podría pensarse que solo es apto para vivir en medios rurales, la realidad es que se adapta bien a la ciudad, siempre y cuando tenga sus momentos de paseos y esparcimiento.

Cuidados generales

Por tratarse de una raza rústica y resistente, el podenco ibicenco no requiere de muchos cuidados especiales. Los canes de manto corto, liso y duro necesitan de un cepillado cada 15 días, mientras que los de pelo largo lo precisan una o dos veces por semana.

En cuanto al baño, realizarlo una vez al mes será suficiente para mantenerlos limpios e higiénicos.

De acuerdo con lo indicado, una buena dosis de ejercicio diario es fundamental para su bienestar físico y mental. Su alimentación debe estar basada en concentrados de buena calidad, con altos niveles de proteínas y calorías que suplan sus necesidades nutricionales.

Es importante resaltar que, por su contextura corporal y tipo de pelaje, no son perros que resistan mucho al frío. Por ello, en las épocas de invierno deben estar bien protegidos, en caso de salir al exterior.

Por último, como cualquier animal que esté bajo responsabilidad de un tutor, las visitas al médico veterinario deben ser oportunas. De igual forma, es importante llevar su esquema de desparasitación y vacunación al día para evitar enfermedades indeseadas.

Salud del podenco ibicenco

A decir verdad, esta raza canina no suele aquejar muchas patologías a lo largo de su vida. De hecho, su esperanza de vida es de unos 10 a 12 años, bajo un cuidado normal y adecuado.

Sin embargo, al igual que ocurre con otras razas puras, puede heredar ciertas condiciones que afectan su bienestar. Por ejemplo, según información de la Universidad de la Isla del Príncipe Eduardo, el podenco ibicenco tiene predisposición a padecer las siguientes patologías:

Asimismo, las enfermedades oculares como las cataratas y la degeneración vítrea también pueden estar presentes en esta raza.

No obstante, un artículo reciente de la revista Parasites & Vectors, señala que su resistencia a patógenos —como la Leishmania infantum— es mucho mayor a la de otras razas caninas.

Este es un aspecto importante, pues el protozoo, responsable de la enfermedad de la leishmaniasis, tiene mucha presencia en la región del mar Mediterráneo. Además, puede transmitirse desde las mascotas a los seres humanos. Por lo tanto, al tener un sistema inmune fuerte, este tipo de enfermedades infecciosas son una preocupación menos para sus tutores.

Dos podencos ibicencos en el bosque.
Gran parte de las enfermedades se deben a la endogamia presente en los perros de raza pura. Crédito: Kristiinatammik/iStockphoto.


Un compañero de vida ideal

Si piensas en un animal de compañía que alegre tu vida, no dudes de que el podenco ibicenco puede cumplir ese papel a la perfección. Por sus características físicas, comportamentales y resistencia, esta raza canina es apta para vivir en cualquier entorno y en todo tipo de familias.

Sin embargo, es importante que recuerdes evaluar tus condiciones económicas y disponibilidad de tiempo, pues como pudiste observar, son animales que requieren de cierto grado de atención. Además, asesorarte con un profesional capacitado —antes de integrar esta magnífica especie al hogar— será clave para brindarle los cuidados necesarios y el bienestar que merece.


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