¿Qué hago para que mi perro deje de comer piedras?

¿Qué hago para que mi perro deje de comer piedras?

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 febrero, 2022

¿A tu perro le da por comer piedras y otros elementos indigeribles? Debes saber que se trata de un trastorno que puede tener causas diversas pero al que debes buscarle una pronta solución para impedir que sufra daños -más o menos graves- en su organismo. Te contamos qué puedes hacer para evitar esta práctica.

Esa manía perruna de ingerir cosas extrañas

Los canes suelen ingerir, sobre todo cuando son todavía cachorros, sustancias que para nosotros son absolutamente desagradables. Por ejemplo, caca, sea propia o ajena.

Este comportamiento puede ser considerado como normal, y se encuadra en el afán exploratorio y de conocer el mundo de los pequeñines.

El problema se presenta cuando estas actitudes perduran en el tiempo o cuando, por ejemplo, les da por masticar y/o comer piedras y otros objetos que pueden terminar causándole graves inconvenientes de salud.

Si a tu peludo le da por comer piedras u otros objetos extraños, consulta al veterinario para determinar los motivos de este comportamiento que puede ocasionarles serios daños a su organismo.

Conoce un trastorno llamado pica

perro que se atragantó con su juguete

El trastorno se conoce como p ica y no se da solo en canes. También a otros animales e incluso a los humanos les da por comer distintos elementos “no alimenticios”. Así, un perro -además de trozos de roca- puede masticar y tragar, por ejemplo:

  • Ropa, sobre todo calcetines.
  • Libros o revistas.
  • Zapatos u otro tipo de calzado.
  • Bolsas de papel.
  • Pedazos de juguetes.
  • Arena, cemento, cenizas.

Posibles motivos para que un perro coma piedras

¿Pero por qué un perro querría comer piedras? Y, en todo caso, ¿cómo podemos evitarlo?

Se cree que con la ingesta de estos y otros elementos, al igual que en el caso de la hierba, el animal está intentando provocar el vómito para aliviar molestias ocasionadas por problemas digestivos o renales de distinta gravedad.

Pero también puede haber otros motivos, tanto físicos como de comportamiento. Y es que quizá el peludo, por ejemplo, está demandando una mayor atención de tu parte con estas actitudes.

Así que si encuentras a tu perro en estos menesteres, mejor realiza una consulta con el veterinario para hallar la causa precisa y buscarle la mejor solución posible.

¿Qué consecuencias puede tener la ingesta de trozos de roca?

De todas formas, ya sea por una patología, por curiosidad juvenil o por un hecho ocasional, lo mejor es que vigiles a conciencia a tu peludo para evitar que ingiera piedras o cualquier otro objeto que pueda causarle daño.

Las trozos de roca, sobre todo si son muy grandes o tienen aristas, pueden inflamar el aparato digestivo del perro. Así, el animal suele mostrarse inapetente o presentar diarreas y gastritis.

Pero en algunos casos las piedras llegan a perforar el intestino, poniendo al can en riesgo de muerte. O quedan atrapadas en su estomágo generando una gastritis crónica. Entonces se impone una intervención quirúrgica para poder extraerlas.

Además, el hecho de masticar estos elementos desgastan e incluso rompen los dientes del perro y provocan heridas en su boca. También este comportamiento  puede ocasionar que los animales se atraganten al intentar ingerir un trozo de roca y corran riesgo de asfixia.

Consejos para que tu peludo deje de comer piedras

abandono de mascotas

Descartados las causas físicas, entre las cosas que puedes hacer para que a tu mascota no le de por comer piedras están:

  • Dile NO con firmeza cuando veas que se lleva cualquier objeto inapropiado a su boca.
  • Evita juegos que incluyan estos elementos. Por ejemplo: no le tires piedras como si fuera una pelota para que las vaya a buscar y te las traiga.
  • Préstale la debida atención. Si el animalito se siente ignorado, o está aburrido, quizá empiece a manifestar distintos comportamientos extraños para que te fijes en él, entre ellos, comer piedras.
  • No lo expongas a situaciones estresantes -como dejarlo solo o encerrado mucho tiempo- porque pueden también desencadenar actitudes como las de ingerir objetos no comestibles.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.