7 mascotas para niños, los mejores compañeros de juego

Las mascotas ayudan a que los niños estimulen sus sentidos, desarrollen empatía y se vuelvan más responsables. Siempre que exista la supervisión adecuada, tener un animal de compañía traerá muchos beneficios a la vida diaria de toda la familia.
7 mascotas para niños, los mejores compañeros de juego

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 07 noviembre, 2022

Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, pero también de los niños y hasta se pueden convertir en los mejores compañeros de juegos para ellos. Pero eso no es todo, la interacción con diferentes mascotas puede ser beneficiosa para niños que sufren o padecen alguna enfermedad. Tener una mascota es una experiencia muy gratificante.

Está demostrado que los niños que tienen una mascota en casa, son más sociables y se vuelven más responsables. Otro de los beneficios es que pueden prevenir las enfermedades, siempre con el cuidado y la responsabilidad de que las mascotas son seres vivos que hay que cuidar, atender y darles mucho cariño.

Si habéis decidido que vuestros hijos tengan una mascota, tenéis que tener claro e informaros de todas las necesidades y cuidados que va a necesitar vuestro nuevo miembro de la familia. También debéis escoger qué tipo de mascota queréis y la raza. Así que os vamos a explicar qué mascota es más recomendable para vuestros hijos, como compañeros de juego.

El perro, una de las mejores mascotas para niños

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Si le preguntamos a un niño qué animal prefiere, de seguro la respuesta sería “un perro”. Y es que hay siempre una conexión muy especial entre los niños y los perros. Son los perfectos compañeros de juegos y además se les puede enseñar muchas cosas, como que se siente, que te dé la patita, etc. Esto produce mucha satisfacción a los niños.



Los perros son muy cariñosos y agradecidos, además el jugar con ellos es como un premio. Les encanta jugar a que le tiren la pelota e incluso al escondite. De manera particular, conozco el caso de un mastín, que le encantaba que la niña le pusiera su cadena y tirar de ella mientras tenía sus patines. Tanto la niña como el mastín, disfrutaban de lo lindo.

Hay muchas actividades que tanto el perro como el niño pueden disfrutar juntos. Pueden jugar con los juguetes de la mascota a esconderlo y que el perro los encuentre, después se le premiará con alguna galleta especial para ellos. No hace falta comprar los juguetes, el niño los puede fabricar y eso le dará más satisfacción.

Por ejemplo, se puede agarrar una pelota de tenis y se mete en un calcetín limpio, se anuda a los extremos y está listo para que el niño juegue con el perro, cada uno tirando de un extremo.

En cuanto a la elección de la raza del perro, es conveniente consultar, cuál sería la más apropiada para los niños, dependiendo de las necesidades. Según los expertos, el labrador retriever, es una raza muy recomendable para los niños, suelen ser muy cariñosos, fácil de educar y es muy utilizada con niños y personas invidentes, además para distintas terapias.

Pero hay también otras razas de perros que son muy cariñosos con los niños y que son estupendos compañeros de juego, es el caso de los beagle, son muy dóciles e inteligentes. El mastín, aunque es una raza grande de tamaño, son muy niñeros y les gusta jugar.

Otros compañeros de juego para tus hijos

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Aunque los perros son los más famosos, no son las únicas mascotas que se pueden hacer feliz a un niño. Algunas alternativas son los siguientes animales:

1. Gato

El gato puede ser otra de las mejores mascotas para niños. Pueden ser muy cariñosos e incluso jugar con ellos, además de no necesitar tantas atenciones, como por ejemplo un perro, que hay que llevar a pasear. El gato se puede quedar sin problema en casa. Hay que tener un especial cuidado con ellos, porque cuando no quieren jugar o que se les acaricie, hay que dejarlos, ya que se pueden molestar.

2. Conejo

Cada vez más padres eligen un conejo como mascota para sus hijos, pues ocupa poco espacio, son bastante limpios y no requieren de mucho mantenimiento, aunque hay que darles algunos cuidados. Es muy tierno ver a los conejitos detrás de los niños saltando y hasta jugando con la pelota. El conejo puede ser una opción como compañero de juego para los niños.

3. Hámster

El hámster es un tierno roedor pequeño que no necesita tener muchos cuidados específicos. Basta con que tenga un hábitat amplio, agua y comida para que sea muy feliz. Además, incluso cuando su casa debe ser grande, no ocupa tanto espacio dentro de casa. Eso sí, recuerda que es un animal que suele ser presa, así que se le debe enseñar a los niños a tener cuidado y ser precavidos al momento de interactuar con él.

4. Peces

Los peces son las mascotas más fáciles de mantener en cautiverio, pues solo necesitan comida y la limpieza de su hábitat para vivir bien. Claro está, depende mucho del tipo de pez que se elija, pero algunos bastante resistentes como el beta son excelentes para los niños. El único problema es que tu pequeño no podrá interactuar tanto con ellos como lo haría con un gato o un perro.

5. Jerbo

El jerbo se ha comenzado a hacer popular recientemente como uno de los roedores más adorables como mascota. En esencia, sus cuidados son bastante parecidos a los de un hámster, pero con el beneficio de que los jerbos son un poco más sociables y cariñosos. Eso sí, recuerda que estos animales son asustadizos al principio, por lo que debes enseñarle a los niños a respetar su privacidad.

6. Aves

Las aves también suelen ser la opción más recurrida en el ámbito hogareño, pues sus colores hermosos y su canto armoniza cualquier espacio. Para los niños, este puede ser un primer acercamiento al cuidado de animales sin tener que manipularlos de manera directa, pues las aves no necesitan de caricias. Claro está, supervisa siempre a tus hijos y lava bien sus manos cada que entre en contacto con el hábitat del ave.

Beneficios de las mascotas para los niños

Aunque no lo parezca, las mascotas son compañeros increíbles que sirven como un sustento emocional para los niños. Además, con una buena guía y educación, generan consciencia del cuidado y el respeto a los animales. Otros de los beneficios que aportan las mascotas a la vida de los pequeños son:

  • Fomenta la responsabilidad: las tareas rutinarias del cuidado de la mascota permiten que fortalecer el sentido de la responsabilidad en los niños.
  • Reduce el estrés: los animales domésticos escuchan sin juzgar los problemas que enfrenta el pequeño, lo que reduce su estrés y les ofrece consuelo.
  • Mitiga los sentimientos negativos: el contacto con las mascotas reducen y estabilizan las emociones negativas de los niños.
  • Aprende a desarrollar vínculos emocionales de manera saludable: el desarrollo de un vínculo fuerte con la mascota conlleva cierto esfuerzo, lo que le enseña al niño a como fortalecer sus relaciones sentimentales.
  • Reduce la probabilidad de padecer alergias: según un estudio publicado en el Journal of the British Society for Allergy and Clinical Immunology, la exposición temprana a las mascotas reduce la probabilidad de presentar alergias a los animales.
  • Estimula los sentidos y las capacidades motrices del niño: los juegos y las actividades con las mascotas estimulan el desarrollo de las capacidades motrices y los sentidos.
  • Aumenta la actividad física: gracias al ejercicio que suelen necesitar algunos animales domésticos, los niños mantienen una rutina de ejercicio saludable que los ayuda a mantener su salud.


Algunas recomendaciones

Tenemos que educar a los niños y hacerles entender que las mascotas son seres vivos, que necesitan cuidados, atenciones, cariño y también ser responsables con ellos. Los niños deben sentirse que son los cuidadores de las mascotas, aunque los papás estén siempre pendientes de todos. Que se aseguren de darle la comida, que siempre tengan agua en su platito, enseñarles a los niños cómo jugar con sus mascotas, etc.

Tener una mascota no es una decisión que deba tomarse a la ligera, pues se pone en riesgo la vida de un animal. Sin embargo, con el cuidado, la orientación y la precaución necesaria, la experiencia podría ayudar a desarrollar buenos hábitos y estabilidad emocional en los niños.


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