Leyes de protección de animales en el mundo

El año 1978 quedaría en la historia de la protección de animales en el mundo tras la proclamación de la primera Declaración Universal de los Derechos de los Animales. Esta importante compilación fue creada por la Liga Internacional de los Derechos de los Animales y leída ante la UNESCO.

Entre las muchas contribuciones para la lucha animalista, esta iniciativa viene a reconocer que todos los animales tienen igual derecho a la existencia. En consecuencia, la acción del ser humano sobre ellos debería obedecer ciertos límites éticos. A este respecto, el preámbulo de dicha declaración determina lo siguiente:

“b) El hombre, en tanto que especie animal, no puede atribuirse el derecho a exterminar a los otros animales o explotarlos violando su derecho. Tiene la obligación de poner sus conocimientos al servicio de los animales.

c) Todos los animales tienen derecho a la atención, a los cuidados y a la protección del hombre.”

La proclamación ante la UNESCO de esta Declaración Universal dividió el movimiento animalista en el mundo durante los años 70 y 80. Y es que a partir de la reivindicación del concepto de derechos de los animales, surgen dos corrientes con propósitos diferentes.

La corriente más tradicional seguiría enfocada en la protección del Estado hacia los animales. Por otra parte, una nueva corriente empezaría a luchar por el reconocimiento de los derechos de los animales a nivel jurídico.

Bienestar animal en la UE: el Convenio Europeo para la protección de los animales de compañía

Casi 10 años después de la Declaración Universal de los derechos de los animales, se publicaría el Convenio Europeo para la protección de animales de compañía. Esta iniciativa impulsó las leyes de protección de animales en el mundo, en especial en los países miembros de la UE.

Esta normativa preveía mejoras prácticas e inmediatas en la calidad de vida de muchos animales. Esto se conseguía a través de cuestiones como la prohibición de las mutilaciones estéticas y la regulación de la utilización de animales en actividades recreativas, entre las que se encontraba la caza deportiva.

El convenio europeo también supuso un significativo avance en las políticas públicas relacionadas a la tenencia responsable, así como sobre el control de la sobrepoblación callejera.

Se ratificaba la responsabilidad de los gobiernos centrales en la promoción de medidas concretas para luchar contra el maltrato y el abandono, así como para promover la adopción responsable de animales de compañía.

Avances y límites de las leyes vigentes en España

En España aún no contamos con una ley marco a nivel nacional que regule específicamente el bienestar o los derechos de los animales silvestres o domésticos. En cada comunidad autónoma es posible encontrar diferentes ordenanzas que combatan el maltrato animal; en cada región se establecen las sanciones aplicables a los casos de abandono, violencia y abuso físico o emocional.

No obstante, el artículo 337 del Código Civil español prevé pena de hasta un año de prisión, además de la posibilidad de inhabilitación especial a todo aquel que:

“(…) por cualquier medio o procedimiento maltrate injustificadamente, causándole lesiones que menoscaben gravemente su salud o sometiéndole a explotación sexual a:

a) un animal doméstico o amansado,

b) un animal de los que habitualmente están domesticados,

c) un animal que temporal o permanentemente vive bajo control humano, o

d) cualquier animal que no viva en estado salvaje”.

A su vez, el Código Penal de España, mediante su artículo 334.1, habla sobre la protección de animales silvestres, y prevé pena de prisión de seis meses a dos años a todo aquel que:

“(…) contraviniendo las leyes o disposiciones de carácter general:

a) Cace, pesque, adquiera, posea o destruya especies protegidas de fauna silvestre;

b) Trafique con ellas, sus partes o derivados de los mismos; o

c) Realice actividades que impidan o dificulten su reproducción y migración”.

Protección de animales en Argentina, Colombia y México

En 1954 el Congreso Nacional de la República Argentina aprobaría la Ley 14.346, cuyo texto aún se encuentra en vigencia a día de hoy. Además de definir qué se entiende como maltrato y crueldad contra los animales en el territorio nacional, dicha ley también prohibió el sacrificio de perros y gatos en la provincia de Buenos Aires.

Respecto a las sanciones, se prevé que podrá ser “reprimido con prisión de 15 días a un año, el que infligiere malos tratos o hiciere víctima de actos de crueldad a los animales“.

Varios años después, concretamente en 2013, se publicaría en Ciudad de México la primera ley de protección animal de este país. Su texto prevé pena de prisión de hasta cuatro años, así como importantes sanciones económicas, para quienes cometan actos de crueldad en contra todos los animales no humanos, ya sean de compañía, silvestres o domesticados.

En 2018 Colombia también aprobaría la ley 1774 sobre el maltrato animal y la protección de animales en su territorio nacional. A partir de su publicación, se empiezan a considerar como delitos los actos de crueldad, maltrato o violencia en contra animales domésticos, silvestres o exóticos vertebrados. Las penas aplicables podrían variar de 12 a 36 meses en prisión.