Logo image
Logo image

Gingivoestomatitis crónica felina (GECF): síntomas, causas y tratamiento

6 minutos
Las enfermedades a las que tu gato se encuentra expuesto son muchas, algunas muy similares entre sí. Por su signología, la gingivoestomatitis crónica felina puede llegar a confundirse con otras patologías. Pon mucha atención para saber como identificarla.
Gingivoestomatitis crónica felina (GECF): síntomas, causas y tratamiento
Última actualización: 28 agosto, 2021

¿Has notado que tu gato ha disminuido su apetito y que al comer muestra algún signo de dolor? ¿Su aliento huele muy mal y se muestra decaído? Observa muy bien cada uno de los comportamientos extraños que presente tu gato, pues podría padecer una delicada enfermedad llamada gingivoestomatitis crónica felina.

Esta, al igual que muchas otras patologías, tendrá un mejor pronóstico si se logra identificar a tiempo. El hacer un diagnóstico diferencial que te encamine a llegar al cuadro definitivo permitirá empezar a tiempo un tratamiento con tu mascota. Lo más importante siempre será mantener un bienestar general en su estado de salud. No dejes de leer, pues en este artículo te hablaremos sobre como conseguirlo.

¿Qué es la gingivoestomatits crónica felina?

La gingivoestomatits crónica felina es una enfermedad que presentan los gatos en su cavidad oral. Se caracteriza por una inflamación proliferativa de las encías y presencia de ulceración local. En casos graves, las úlceras pueden alcanzar su lengua, paladar y los carrillos. Esta patología suele prolongarse por varios meses e incluso años, convirtiéndose en un proceso crónico muy doloroso para tu mascota.

Conforme se presente y vaya progresando la enfermedad, la gingivoestomatitis crónica felina se puede clasificar como leve, moderada o grave. Además, dependiendo de las zonas en las que se localicen las alteraciones, su clasificación se puntualiza de la siguiente forma:

  • Estomatitis caudal: afecta a la parte más interna de la boca.
  • Estomatitis labial o bucal: en los casos severos se aprecia una inflamación de los labios y la parte superior de las mejillas.
  • Glositis: una inflamación de la lengua.
  • Estomatitis alveolar: una inflamación en la zona de la encía que rodea los dientes).

Se ha observado que los gatos adultos presentan mayor predisposición a padecer gingivoestomatitis crónica felina. Si bien es una enfermedad que podría atacar a cualquier raza, himalayos, persas, burmeses y siameses son los que más frecuentemente se ven afectados.

Some figure

Causas de la gingivoestomatitis crónica felina

Aunque aún no se conoce la causa exacta de la gingivoestomatitis crónica felina, numerosos estudios han coincidido en que se trata de una enfermedad autoimune multifactorial. El sistema inmunitario del gato podría encontrarse inestable, permitiendo que las inmunoglobilinas presentes en la saliva se vean alteradas y respondan de manera exagerada a estímulos antigénicos crónicos, como estos:

  • Patologías dentales (tales como enfermedad periodontal o procesos de resorción odontoclástica felina, en la que el tejido dental comienza a desaparecer de manera progresiva)
  • Reacción por proteínas alimentarias.
  • Placa bacteriana o sarro.
  • Enfermedades víricas (calicivirus felino, virus de la inmunodeficiencia felina y virus de la leucemia felina) en el 70 % de los gatos afectados.

Otro factor detonante de la gingivoestomatitis crónica felina es el estrés. Ya sea que tu mascota se encuentre apenas en el comienzo o bien atravesando la enfermedad, el estrés reducirá su inmunidad. Como consecuencia, se facilitará el desarrollo de la enfermedad, aumentando la signología y manifestándose con mayor rapidez en su organismo.

Síntomas de la enfermedad

Como te habrás dado cuenta, la zona afectada protagonista de la gingivoestomatitis crónica felina es la cavidad bucal, sin embargo, tu mascota podría mostrar algunos comportamientos atípicos a cualquier otro gato sano. En respuesta al intenso dolor, no será extraño que deje de tragar incluso teniendo hambre, disminuyendo su peso paulatinamente.

Los gatos son animales que pasan gran parte del día acicalándose y gracias a ello mantienen su pelaje limpio y en buen estado. Cuando atraviesan un cuadro de gingivoestomatitis crónica felina, el malestar provocará que dejen de hacerlo. Será común que veas a tu mascota descuidada y decaída, debido a que esta conducta también le causará dolor.

La halitosis (mal olor bucal), el ptialismo (exceso de salivación) y la presencia de sangrados son signos que también pueden presentarse en esta patología. Por tratarse de una enfermedad crónica, es importante que desde el primer síntoma o comportamiento anormal acudas con el médico veterinario para su valoración y se atienda el problema con brevedad.

¿Cómo diagnosticar la gingivoestomatitis crónica felina?

Existen numerosas patologías que pueden presentar algunos signos parecidos a la gingivoestomatitis crónica felina. Tumores orales, pénfigo, traumatismos, lupus eritematoso sistémico, ulceras bucales por insuficiencia renal y diabetes mellitus son solo unas de las enfermedades con signología similar. Es necesario realizar un diagnóstico diferencial para llegar a la causa del problema.

La respuesta inmunomediada causante de la gingivoestomatitis crónica felina puede ser detectada mediante algunos procedimientos médicos. Te recomendamos llevar a tu gato a una clínica veterinaria especializada en la que los profesionales puedan realizar los siguientes estudios.

Biopsias

Mediante un análisis histopatológico de la zona afectada, se puede observar en detalle la estructura de los tejidos y la presencia de alteraciones. En el caso de la gingivoestomatitis crónica felina, la mucosa tendrá ulceraciones e infiltraciones de tipo inflamatorio. Los linfocitos, histiocitos y neutrófilos serán las células predominantes.

Radiografía dental

Una placa radiográfica de la cavidad bucal permitirá realizar una valoración general de los dientes y de las estructuras que los soportan. Es importante identificar cuál es la condición que está causando el problema y esta será una herramienta útil para detectar enfermedad periodontal, procesos de resorción odontoclástica felina y gingivoestomatitis crónica felina.

Cultivo bacteriano

Es necesario conocer los microorganismos presentes en la cavidad bucal de tu gato, observar aquellos que sean predominantes y, en su caso, realizar antibiogramas. En la mayoría de los cuadros, la zona en la que se toma la muestra para realizar el cultivo bacteriano es el arco glosopalatino.

PCR de calicivirus

Con el fin de comprobar la presencia del calicivirus en tu mascota, se recomienda realizar un estudio de PCR (reacción en cadena de la polimerasa). Más del 60 % de los animales afectados por gingivoestomatitis crónica felina presentan algún proceso vírico, ya sea calicivirus o algún otro de los antes mencionados.

Con esta técnica, se podrá identificar específicamente cual es el virus que aqueja al felino.

Tratamiento de la gingivoestomatitis crónica felina

La gingivoestomatitis crónica felina es una enfermedad de difícil tratamiento. En la mayoría de casos, el médico veterinario indicará la administración de medicamentos para reducir los signos que presente tu gato (disminuir las alteraciones en la boca, controlar la inflamación y el dolor). El tratamiento para pacientes con esta enfermedad se basa en los siguientes puntos:

  • Control del dolor: con el uso de opiáceos como la buprenorfina y la administración de antiinflamatorios no esteroideos (a largo plazo), mejor conocidos como AINES, se puede lograr que el paciente disminuya el dolor y atraviese este proceso de manera más tranquila.
  • Control de la placa bacteriana: se recomienda administrar clindamicina a razón de 5 miligramos/kilogramo cada 12 horas por 3 semanas. Además, los lavados bucales con clorhexidina junto con un cepillado dental serán muy efectivos para reducir la placa bacteriana. Ten cuidado al realizar estas técnicas y recuerda que tu gato presenta mucho dolor en esta zona.
  • Extracción de dientes afectados: en los casos graves en los que haya un gran deterioro dental, será indicada su extracción. Si no se logra observar mejoría después de unos meses, el paciente con gingivoestomatitis crónica felina tendrá que ser sometido a una exodoncia de todos los dientes molares y premolares.
  • Dieta novel: en la medida de lo posible, trata de ir reemplazando su pienso por uno hipoalergénico, con el fin de evitar posibles reacciones que alteren aún más la inestabilidad de su organismo.
Some figure

Ahora que ya tienes muchas herramientas para detectar una posible gingivoestomatitis crónica felina en tu gato, desde el primer momento en el que percibas un comportamiento anormal en tu mascota no dudes en acudir con el médico veterinario para su valoración. Recuerda: cuanto más pronto se diagnostique la enfermedad mejor será su pronóstico y recuperación.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.