¿Es normal que mi perro se rasque mucho las orejas?

Si tu perro se rasca mucho las orejas y te preocupa, inspecciónalas en busca de cuerpos extraños, parásitos, heridas y otras causas frecuentes que encontrarás aquí.
¿Es normal que mi perro se rasque mucho las orejas?
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 14 enero, 2022

Es difícil determinar cuándo un perro se rasca mucho las orejas, es decir, más de lo normal. Por lo general, es un comportamiento que suele detectarse al cabo de un tiempo de observar esta conducta.

Sin embargo, los oídos son una parte delicada del cuerpo del animal, así que conviene tenerlos bajo control. Si sospechas que tu can se rasca más de lo necesario, es posible que se deba a alguna patología. En este espacio te indicamos cómo examinar las orejas del perro y qué signos de alerta buscar. No te lo pierdas.

Cómo saber si un perro se rasca mucho las orejas

Quizá parezca un asunto sin importancia, pero darse cuenta de pequeños detalles en el comportamiento del perro (como un rascado excesivo) puede suponer la diferencia entre una urgencia veterinaria o un tratamiento sencillo en casa. Como se suele decir, el mejor abordaje en todos los casos es la prevención antes de que la condición se agrave.

No hay un número concreto de veces que indiquen que un perro se rasca mucho las orejas. Sin embargo, hay señales que acompañan a esta conducta que son significativas. Destacamos las siguientes:

  • Que el perro se rasque siempre el mismo oído.
  • Que sacuda la cabeza antes del rascado (o la tenga ladeada).
  • Muestra señales de pérdida de audición.
  • Presenta heridas o dermatitis en la oreja que se rasca.
  • La duración del rascado se extiende en el tiempo, es decir, no es un comportamiento ocasional.

¿Qué hacer en caso de que confirmes que tu can se rasca demasiado los oídos? La respuesta es sencilla: acude al veterinario. Solo los profesionales en medicina animal tienen los medios necesarios para detectar las causas que subyacen a esta conducta y solucionarlas.

Si examinas los oídos de tu can, es posible que encuentres señales de que algo va mal, como un exceso de cerumen, cuerpos extraños, inflamación, heridas y otros.

Un perro Shiba rascándose la piel.

Problemas óticos más frecuentes en el perro

Las causas que originan un comportamiento de rascado excesivo recogen un amplio abanico de dolencias que, por lo general, tienen fácil solución si acudes a tiempo a consulta. A continuación tienes las más habituales.

Parásitos externos

Las infestaciones de parásitos suelen producir un intenso prurito e incluso dolor, por lo que es normal que el can se rasque las orejas a menudo. Muchos de estos invertebrados se instalan en las orejas porque es un punto donde se alimentan fácilmente y el perro tiene dificultades para quitárselos de encima. Los más comunes son estos:

  • Garrapatas: existen muchas especies de este arácnido, como las pertenecientes a los géneros IxodesHaemaphysalis, Hyalomma Dermacentor. Estos arácnidos entierran la cabeza bajo la piel del animal para alimentarse de su sangre, así que se debe retirar con cuidado. Si no te ves con seguridad para hacerlo, acude a la clínica.
  • Pulgas: estos parásitos, por el contrario, se reparten por todo el cuerpo del animal, así que no le verás rascarse solo la oreja, sino toda la piel. Son visibles sin microscopio y los apreciarás correr entre el pelaje del perro y saltar. El animal (y también tu casa) requerirá un tratamiento antipulgas.
  • Ácaros: existen 2 especies de estos parásitos que afectan casi siempre a las orejas de los perros, Otodectes cynotis y Demodex canis. Ambos provocan sarna localizada que cursa con secreciones excesivas de cerumen oscuro, costras y sacudidas de la cabeza. Necesita tratamiento veterinario.

Hongos

La señal más distintiva de las micosis es la alopecia. En el caso de la tiña, por ejemplo, las calvas son de una forma redondeada característica. Estas condiciones requieren tratamiento veterinario, y este suele ser largo, pues cuesta eliminar las esporas de las superficies. Además, muchos de los hongos que infectan a los canes también afectan a los humanos.

Las infecciones fúngicas suelen tratarse con antifúngicos tópicos, ya sea en forma de crema o de gotas. 

Otitis e infecciones de oído

Se trata de la inflamación del canal auditivo, por lo general a causa de una infección bacteriana. También puede estar provocada de manera secundaria por alergias, parásitos o cuerpos extraños. El tratamiento requiere la administración de fármacos antiinflamatorios y antibióticos, así que debes acudir al veterinario.

Presencia de cuerpos extraños

La intrusión de un cuerpo extraño en el oído causa dolor y picor, por lo que el perro se rascará la oreja a menudo para aliviarse. Si el elemento foráneo está muy profundo en el pabellón auditivo, es posible que no consigas ver directamente qué se le ha metido. Es por esto que la mejor opción es, de nuevo, ir al veterinario.

Unos de los cuerpos extraños más frecuentes son las temidas espigas, que causan infecciones y heridas si no se retiran enseguida.

Heridas y traumatismos

El dolor es más frecuente en estos casos que el prurito, aunque también verás al can rascarse la oreja con insistencia. Una pelea con un perro, una caída, un golpe o cualquier otro accidente son causas habituales de la aparición de heridas.

El problema es que estas heridas atraen a las infecciones oportunistas, por lo que debes desinfectar a fondo la zona de forma regular. Del mismo modo, intenta evitar que el can se rasque demasiado, pues seguramente sienta picor durante el proceso de cicatrización y lo retrase quitándose las costras.

Dermatitis seborreica

Este tipo de dermatitis se caracteriza por la secreción excesiva de sebo o grasa. Los hongos, los parásitos, una alimentación inadecuada o las enfermedades autoinmunitarias son las causas más frecuentes de esta inflamación de la piel.

A esta producción de grasa corporal se une el cerumen, que también se crea en exceso y causa picor en los oídos. Si examinas el conducto auditivo del can lo podrás ver sin problemas, y además tendrá mal olor. Es importante encontrar la causa de la dermatitis para dar un tratamiento adecuado.

Un perro al que se le están masajeando las orejas.

Para terminar, recuerda la utilidad de inspeccionar las orejas de tu can con regularidad. Además, también es bueno que se las limpies, sobre todo si sus orejas son caídas, pues ventilan peor. Con los cuidados básicos, seguro que tu animal disfruta de una buena salud y de grandes momentos a tu lado.


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