Rescatada desde cachorrita, pasan 6 años y aún no ha encontrado familia
Trabajar en un refugio de animales significa poder formar parte de historias conmovedoras. Algunas veces tristes y otras muy esperanzadoras, pero todas tienen el mismo fin, que cada perrito encuentre un lugar donde lo cuiden, lo amen y pueda ser feliz.
Sin embargo, cada cuidador sabe que a los perritos del refugio se les hace más difícil encontrar familia a medida que envejecen. Es difícil no preocuparse y encariñarse con el perrito que siempre está detrás de una jaula viendo como todos son adoptados.
Así pasó con Nami, una cachorrita que fue rescatada junto a sus dos hermanitos en abril de 2016 por Caninos 911, A.C. una fundación de Villahermosa, en Tabasco, México. Con el paso del tiempo, sus hermanos consiguieron hogar y Nami fue envejeciendo sin perder las esperanzas de encontrar la familia indicada.
El refugio puso todos sus esfuerzos desde un inicio. Realizaron publicaciones y presentaban a Nami a cada nueva visita al recinto. Pero hoy, cerca del cumpleaños número 6 de Nami, aún sigue esperando una segunda oportunidad para vivir la vida que siempre ha soñado.
“Ella es Nami y el 26 de Abril cumple 6 años con nosotros. Deseamos con todo el corazón que encuentre una familia. Es una perrita súper amorosa, exageradamente limpia, obediente, cariñosa, juguetona e inteligente. Es una perrita muy sana”. Afirma el refugio en una de sus publicaciones.
Los perritos ancianos son los que más nos necesitan
Si bien es cierto que al adoptar queremos disfrutar toda una nueva vida con nuestro perrito, viéndolo crecer desde cachorro, debemos recordar que los perritos ancianos también merecen una oportunidad.
Muchas veces son estos canes los más nobles y más llenos de amor. Anhelan una vida plena pues siempre han vivido encerrados sin contar con la familia que se atreva a darles todo el amor que se merecen.
El amor y la lealtad de estos perritos te puede cambiar la vida, mientras tú se las cambias a ellos. Sabemos que adoptar un perrito anciano conlleva muchos retos, pues ellos tienen necesidades específicas. Pero vale la pena todo el esfuerzo por la compañía de estas nobles criaturas.
¡Ánimos Nami!