Mi perro se lame las patas: ¿qué le pasa?

¿Tu perro no deja de lamerse las patas y te preocupa? Sigue leyendo y descubre por qué lo hace.
Mi perro se lame las patas: ¿qué le pasa?

Escrito por Samuel Sanchez

Última actualización: 30 julio, 2022

Si tu perro se lame las patas en exceso, es posible que tenga un problema a nivel dermatológico, sistémico o emocional. Para el tutor es muy estresante ver cómo el can no se queda quieto y se daña a sí mismo de forma indirecta, pero como todo comportamiento en la naturaleza, el lamido de las heridas y de otras zonas afectadas tiene una clara razón de ser.

La saliva de los perros entraña muchos más secretos de los que puede parecer a simple vista y, además, el motivo de esta conducta a veces se aleja de las razones meramente fisiológicas. Si quieres saber por qué tu perro se lame las patas de forma obsesiva y constante, sigue leyendo.

¿Por qué mi perro se lame las patas?

Tal y como indica el portal profesional Plos One la saliva de los vertebrados es de extrema importancia. Tiene muchísimas funciones en la cavidad oral: humedecer la comida, favorecer la formación del bolo alimenticio, lubricar la mucosa oral, mantener la mineralización de los dientes, defender los tejidos y actuar como un buffer de pH ante la entrada de ciertas comidas.

Hasta hace poco, el conocimiento acerca de la saliva de los perros era muy limitado. De todas formas, gracias al estudio citado se ha descrito que los cánidos presentan 2532 proteínas en este fluido con patrones de expresión diferentes a los humanos, 79 de ellas únicas de la especie Canis lupus domesticus. 

Muchas de estas proteínas tienen función metabólica, pero otras responden a procesos inmunológicos, regeneración y diferenciación tisular y regulación, entre muchas otras cosas. Con estos datos acerca de la saliva canina, estamos preparados para explorar algunas posibles razones de por qué tu perro se lame las patas todo el rato. No te lo pierdas.

¿Por qué mi perro se chupa las patas todo el rato?

Lesiones

La mucosa oral de los vertebrados sana más rápido que el resto de tejidos externos, lo cual nos indica que la saliva podría tener propiedades regenerativas. Sin entrar en muchos detalles, se ha detectado que este fluido contiene factores tisulares que promueven la coagulación externa de las heridas y, por tanto, la recuperación del tejido.

Este hecho se contrasta con estudios de la revista Nature, pues se ha confirmado que el lamido social en pequeños vertebrados promueve la sanación temprana de las heridas. Por ello, si tu perro se lame las patas constantemente, lo más seguro es que se haya hecho daño en el paseo con algún objeto punzante o haciendo ejercicio.

Diversos experimentos apuntan a que la saliva promueve la coagulación y sanación de las heridas.

Infecciones bacterianas

De igual manera, la saliva de los perros —y de todos los vertebrados que se lamen, podríamos asumir— contienen lisozimas, peroxidasas, defensinas, cistatinas y anticuerpos del tipo IgA. Todos estos vocablos hacen referencia a moléculas con actividad autoinmune y bactericida, es decir, que atacan a ciertos patógenos de forma general.

Vamos más allá, pues estudios han demostrado que la saliva de los canes posee propiedades sorprendentes. Por ejemplo, limita el crecimiento y destruye a los patógenos Escherichia coli y Streptococcus canis. Si tu perro se lame las patas, es posible que esté intentando evitar una infección o combatiendo la ya instaurada.

Las propiedades bactericidas de la saliva no evitan una visita al veterinario. Si tu perro muestra malestar, necesita ayuda profesional.

Seborrea

En la seborrea canina se produce un exceso de sebo en la piel, de células muertas o de ambos a la vez. La epidermis se muestra con “escamas”, maloliente y sucia. En este cuadro clínico, la epidermis del perro se reemplaza demasiado rápido y se acumulan las células muertas, evento que se suele traducir en picor y malestar muy evidentes.

Si tu perro presenta seborrea, es posible que se lama las patas continuamente con la intención de reducir el picor. Esto siempre es un motivo de visita al veterinario, pues la condición ocurre casi siempre por una enfermedad subyacente. Los problemas autoinmunes, los desequilibrios hormonales y las patologías congénitas son algunas de sus causas principales.

Espigas y otros cuerpos foráneos

Las espigas son unos de los mayores enemigos durante el paseo de los canes, sobre todo en el verano. Terminados en punta y con forma de arpón, estos elementos vegetales pueden introducirse entre las almohadillas de las patas del perro e internalizarse hasta el punto de ser invisibles a ojos del tutor. Con el paso de los días, la zona se inflama y el perro se lame con insistencia.

Si tu perro se ha clavado una espiga de forma superficial, puedes intentar retirarla desde casa con ayuda de unas pinzas. De todas formas, en casos de mayor delicadeza, lo mejor es acudir de forma inmediata al veterinario. Cuanto más tiempo pase, más probabilidades habrán de que se instauren infecciones secundarias.

Ansiedad y aburrimiento

Como hemos dicho en líneas previas, no todas las conductas caninas se justifican con lo físico. A veces, un perro se lame las patas por falta de estímulos, por aburrimiento o para canalizar su ansiedad. Los comportamientos sin sentido repetidos se denominan estereotipias y el lamido patológico es uno de ellos.

Las estereotipias indican que algo está mal en el entorno del can, no siguen ningún motivo fisiológico y pueden llegar incluso a lesionar al animal. “Cazar moscas” sin parar, morderse el rabo de forma compulsiva, dar vueltas sobre sí mismo continuamente o ladrar las 24 horas al día son otras estereotipias que hay que tener en cuenta.

La causa emocional se sospecha cuando todas las constantes fisiológicas del animal están bien. En estos casos, toca buscar ayuda de un educador canino.

Otras posibles causas

Te hemos mostrado los cuadros más comunes que pueden fomentar el lamido excesivo en perros, pero también existen muchos más. En la siguiente lista, te los citamos de forma somera:

  • Alergia: las alergias por contacto aparecen cuando el perro toca algo que le irrita y que en una situación normal no es dañino. Puede lamerse para intentar calmar el picor y la inflamación típicos de los procesos de hipersensibilidad.
  • Garrapatas: estos artrópodos pueden insertarse en casi cualquier parte del cuerpo del animal, incluso entre los dedos de las patas. Vigila bien a tu mascota después de cada paseo.
  • Problemas gastrointestinales: por extraño que parezca, los perros que tienen patologías gástricas tienden a lamer más superficies, tal y como indican estudios.
  • Desequilibrios hormonales: a veces, las patologías que engloban la producción hormonal pueden manifestarse de forma epidérmica, incluyendo las patas y sus estructuras.
Un perro con una pata rota,

¿Qué hacer si mi perro se lame las patas?

Si tu perro se lame las patas de forma constante, lo mejor que puedes hacer es acudir al veterinario para recibir un diagnóstico. En los cuadros más simples —heridas, espigas e infecciones— basta con desinfectar la zona, extraer cualquier cuerpo foráneo, curar la herida y recetar antibióticos orales o tópicos para prevenir el empeoramiento del animal.

Además, será necesario colocarle un collar isabelino al can mientras sana. La saliva aplicada sobre una lesión puede ser eficaz en primera instancia, pero también es capaz de empeorar el cuadro si el lamido es compulsivo o si el fluido lleva consigo otras bacterias dañinas. Por ello, lo mejor es siempre poner al can en manos de un veterinario y vigilarlo durante la recuperación.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Sanguansermsri, P., Jenkinson, H. F., Thanasak, J., Chairatvit, K., Roytrakul, S., Kittisenachai, S., ... & Surarit, R. (2018). Comparative proteomic study of dog and human saliva. PLoS One, 13(12), e0208317.
  • Bécuwe-Bonnet, V., Bélanger, M. C., Frank, D., Parent, J., & Hélie, P. (2012). Gastrointestinal disorders in dogs with excessive licking of surfaces. Journal of Veterinary Behavior, 7(4), 194-204.
  • Hart, B. L., & Powell, K. L. (1990). Antibacterial properties of saliva: role in maternal periparturient grooming and in licking wounds. Physiology & behavior, 48(3), 383-386.
  • HUTSON, J. M., Niall, M., Evans, D., & Fowler, R. (1979). Effect of salivary glands on wound contraction in mice. Nature, 279(5716), 793-795.
  • Wang, L., Marti, D. W., & Anderson, R. E. (2019). Development and validation of a simple LC-MS method for the quantification of oxytocin in dog saliva. Molecules, 24(17), 3079.
  • Lucena, S., Coelho, A. V., Capela-Silva, F., Tvarijonaviciute, A., & Lamy, E. (2018). The effect of breed, gender, and acid stimulation in dog saliva proteome. BioMed research international, 2018.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.