Perrito adoptado, ama su plato de comida y se convierte en su posesión más preciada
Cuando fue adoptado, este perrito conoció muchas cosas que para muchos son normales, pero para él eran únicas y especiales. Tras pasar 10 años sin una familia, cuando le dieron un plato para comer creyó que era un gran regalo y, por ello, dormía junto a él protegiéndolo como su bien más preciado.
Es increíble que los animales sin hogar sean tan agradecidos. No solo con los humanos que le han dado una segunda oportunidad, sino con los objetos que les son dados después de no tener nada. Sigue esta historia para conocer los detalles sobre la vida de Neville.
Este perrito adoptado ama su plato de comida
Neville es un perrito que fue adoptado a sus 10 años. Es una cruza de Jack Rusell, que pertenece al grupo de los Terrier. De todo lo que le obsequiaron en su nuevo hogar, ama como a nada en el mundo a su plato de comida.
El can fue rescatado de las calles, Susanne lo vio y quedó enamorada de él. Cuando lo llevó a casa, le compró todo lo que podía necesitar. Ella fue quien viralizó a través de Twitter la foto de su peludo durmiendo con su adorado plato.
“¡Tenía 10 años y supe al instante que lo amaba! Hice cola durante tres horas fuera del centro de rescate para asegurarme de ser la primera en registrar mi interés y nos unimos en el momento en que nos miramos“, dijo la mujer en su momento.
Así fue el proceso de adaptación de Neville
Este perrito fue adoptado cuando tenía 10 años, es decir, ya era considerado un can senior. Los años más importantes de su vida los pasó en condiciones deplorables. Según su nueva madre, es probable que él fuera utilizado para la reproducción de la raza.
Ella cree que era maltratado y despreciado porque cuando llegaba la hora de comer, él se desesperaba como un loco por los alimentos. Fue por eso por lo que ella tuvo que enseñarle a comer en un tazón sin tirar todo por el piso. Una vez comprendió que la comida iba dentro del comedero, empezó a amarlo y a dormir con él.
“Creo que nunca tuvo uno propio y ahora se da cuenta de que finalmente tiene uno y se le garantiza una fuente confiable de comida decente y nutritiva. Parece tan desgarradamente agradecido por un simple tazón. Pienso que representa comodidad y hogar para él”, contó la tutora.
Este lindo can vivió una vida digna y llena de amor
El can fue adoptado junto a otro perrito que se convirtió en su hermano. Ellos hicieron una excelente relación y fueron inseparables. El objetivo de la publicación de Susanne era crear conciencia sobre los resultados de la adopción y parece que lo logró. Su historia se ha conocido en gran parte del mundo, pese a que Neville murió.
Sin duda alguna, esta mujer le dio los mejores años de su vida, aunque fueron pocos en comparación con el tiempo que duró en las calles.