¿Cómo tener un jardín libre de pulgas y garrapatas?

Los trucos para mantener un jardín libre de pulgas y garrapatas están en este artículo. Un adelanto: el cuidado y el mantenimiento de la vegetación es la mejor prevención.
¿Cómo tener un jardín libre de pulgas y garrapatas?
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 23 diciembre, 2021

Si vives en una casa con patio, seguro que quieres mantener tu jardín libre de pulgas y garrapatas. Estos parásitos no solo pueden infestar a los animales con los que convives, sino que también son capaces de picarte a ti. Además, el mayor problema no es tanto la picadura como las enfermedades que portan estos pequeños animales.

Por eso, en este artículo tienes las claves para mantener alejadas a pulgas y garrapatas de tu entorno doméstico. Si sigues estos consejos, tu pequeño trocito de terreno verde lucirá hermoso sin que ningún parásito aceche entre sus hojas. No te lo pierdas.

Mantener el jardín libre de pulgas y garrapatas

La mejor arma que tendrás contra la presencia de estos peligrosos parásitos es la prevención. El adecuado mantenimiento del jardín implica medidas que, de por sí, alejan a insectos y arácnidos que puedan suponer un problema. Vamos con las medidas preventivas.

Haz que dé el sol en tu jardín

A las pulgas y las garrapatas (y al igual que a muchos otros parásitos e insectos) les atraen las zonas húmedas y oscuras, pues es donde mejor sobreviven y se reproducen. Por eso, trata de que no haya áreas en tu jardín en la que nunca dé el sol. Con este fin, poda las plantas altas y no riegues en exceso aquellos recovecos que pasan a la sombra muchas horas.

En algunos casos también será de utilidad deshacerse de decoraciones y rocas que puedan servir como refugio. 

Corta el césped

Un césped descuidado siempre atrae a invertebrados que buscan un lugar en el que quedarse y reproducirse. El mero hecho de tu presencia, pisar el terreno y cortar el césped ya es una forma de ahuyentarlos y quitarles cobijo. Eso sí, ten cuidado de no dañar a la fauna autóctona en el proceso.

Mantén una buena limpieza en el jardín

Aunque parezca que no, mover de vez en cuando los elementos del jardín (tiestos, muebles, herramientas, etcétera) y limpiar los rincones también es importante. Además, conviene realizar un exhaustivo mantenimiento de los mismos, pues la madera y otros materiales se estropean y liberan suciedad que atrae a las pulgas y a las garrapatas.

Una persona cortando el césped.

Atrae a los depredadores de pulgas y garrapatas

Un jardín colorido con flores atraerá a pájaros y otros insectos que se alimentan de invertebrados. Además, es una buena acción darle a las abejas (Apis mellifera) un sitio en el que alimentarse, pues son una especie muy necesaria en los ecosistemas y que se enfrenta a muchas amenazas.

Aprovecha las ventajas de las plantas aromáticas

Otra buena idea es tener plantas aromáticas en el jardín. Algunas de ellas son fáciles de mantener, atraen a las abejas y a los pájaros y al mismo tiempo mantienen alejadas a pulgas, garrapatas y otros invertebrados indeseados, como mosquitos o avispas. Incluso, puedes usarlas para cocinar. Las más efectivas son estas:

  • Lavanda.
  • Manzanilla.
  • Romero.
  • Menta y hierbabuena.
  • Citronela.
  • Hierba gatera.

Mantén desparasitados y protegidos a tus animales

Aunque te esfuerces en mantener un jardín libre de pulgas y garrapatas, no servirá de nada si son tus animales quienes las traen encima. Perros, gatos y cualquier otro animal que pase tiempo en el exterior deben estar correctamente protegidos contra los parásitos externos con collares y pipetas.

Preservar la salud de tus mascotas implica protegerte a ti también. Las garrapatas, por ejemplo, en ocasiones portan la enfermedad de Lyme. Esta es una infección bacteriana peligrosa para los humanos que comienza con sarpullido, fiebre y fatiga, pero que termina afectando al sistema nervioso y causando la muerte si no se trata a tiempo.

¿Qué hago si ya tengo una infestación de pulgas o garrapatas en el jardín?

En caso de que ya tengas una infestación en el jardín (y probablemente en casa), es muy posible que sí debas recurrir a eliminar los parásitos en vez de ahuyentarlos. En estos casos, lo mejor es evitar los insecticidas en aerosol y los químicos que sean tóxicos para más especies de pulgas y garrapatas. Existen otros métodos que son útiles en estos casos.

Tierra de diatomeas

Las diatomeas son algas fosilizadas que se utilizan con frecuencia para fertilizar las plantas. Además de ello, a partir de ellas se crea un insecticida ecológico y natural con cero toxicidad para los animales domésticos y los humanos. Elimina a las pulgas y las garrapatas mediante la deshidratación.

Nematodos patógenos de los parásitos

Una forma de control biológico de los parásitos que atacan a los animales, como las pulgas y las garrapatas, es liberar productos que contienen nematodos que parasitan a estos invertebrados. Las especies más usadas son las de los géneros Steinernema y Heterorhabditis.

Los nemátodos se consideran un método seguro porque no parasitan a otros animales ni a los humanos. Además, no llegan a convertirse en plaga, pues mueren una vez se quedan sin pulgas y garrapatas a las que infestar.

Productos de limpieza especializados en pulgas y garrapatas

Acabar con una infestación avanzada en casa y en el jardín requiere una limpieza profunda y a conciencia, pues también es necesario eliminar los huevos que se dispersan por las superficies. En el mercado existen numerosos productos de limpieza específicos para ello y que no suponen un riesgo para la familia.

En la mayoría de ocasiones es necesario aplicar los tratamientos múltiples veces para acabar con todas las generaciones de parásitos.

La garrapata es la causante de la anaplasmosis canina.

En cualquier caso, si no consigues mantener tu jardín libre de pulgas y garrapatas, es posible que necesites acudir a un profesional desinsectador. Las infestaciones graves son imposibles de contener mediante métodos tradicionales y suponen un peligro para la salud de tus animales y la tuya propia, así que no dudes en pedir ayuda antes de que la situación se te vaya de las manos.


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