Cómo limpiar los oídos de un perro

La higiene de las orejas de los canes es clave por lo sencillo que es que estas se ensucien y que, a partir de ahí, se produzcan infecciones
Cómo limpiar los oídos de un perro

Escrito por Yamila

Última actualización: 05 julio, 2018

Se trata de una de las partes más sensibles de un animal y, al mismo tiempo, y que más fácilmente se ensucian. ¡Y pueden desarrollar infección enseguida! Por ello, es fundamental aprender a limpiar los oídos de un perro y evitar mal olor, enrojecimiento y acumulación de bacterias. Entérate cómo en este artículo.

¿Cuándo limpiar los oídos del perro?

Se suele restar importancia a la higiene de esta parte del cuerpo de la mascota, ya que solo nos enfocamos en el manto o en las patas, incluso en la boca. Sin embargo, limpiar los oídos del perro es muy importante debido a que se trata de un área muy sensible y vulnerable a sufrir infecciones.

Se recomienda revisar las orejas del animal una vez por semana o al menos dos veces al mes. La periodicidad dependerá de la forma y el tamaño de las orejas (no son iguales las de un cocker spaniel que las de un doberman).

Algunas razas son más propensas a sufrir infecciones de oídos debido a que estos están ‘tapados’ como es el caso de los basset hound, de orejas caídas.

También deberíamos limpiar los oídos de nuestra mascota si le ha entrado agua de lluvia o se ha sumergido en el mar o piscina. Otros factores externos a considerar son las actividades que realiza y los lugares que visita. Por ejemplo, si ha ido a la playa, si se ha ensuciado con tierra en el parque o revolcado en el barro.

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Tips para limpiar los oídos al perro

Para evitar infecciones, acumulación de gérmenes y bacterias, se recomienda limpiar los oídos del perro al menos una vez al mes. Podemos aprovechar la hora del baño, siempre y cuando al terminar sequemos bien la zona. Presta atención a estos consejos:

1. Examina las orejas del perro

Colócate a la altura del animal y levanta las orejas. Inspecciona para ver si solo hay cerumen o suciedad, como puede ser tierra o arena. En ese caso, sí puedes limpiar los oídos tú mismo.

Sin embargo, cuando veas líquido drenando, la zona muy enrojecida, una cera espesa de color marrón, gris o amarillento e incluso sangre, llévalo de inmediato al veterinario. Lo mismo si presenta un fuerte olor en las orejas, ya que puede indicar infección.

2. Busca garrapatas o cuerpos extraños

En sus oídos, el perro puede albergar diferentes organismos… ¡Son el lugar elegido por las garrapatas! Sobre todo si tu mascota frecuenta áreas con pasto o tierra, es más probable que algún cuerpo extraño se aloje en sus orejas.

Si tiene garrapatas, humedece un algodón con alcohol y presiona encima del parásito. Mantén unos segundos hasta que se desprenda solo de la piel. Si tratas de arrancarlo por la fuerza lastimarás a tu perro.

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3. Compra una solución especial

En las tiendas de mascotas venden productos específicos para limpiar los oídos de tu perro. Muchos utilizan alcohol, pero este solo se recomienda para la parte externa, para las orejas. Para el interior, mejor una solución que no genere efectos adversos.

4. Utiliza una bola de algodón

Haz una bola con un poco de algodón y humedece con la solución de limpieza. Introduce con mucho cuidado en el oído del perro. Ten en cuenta que el aseo debe ser superficial, así que evita que el algodón quede alojado en el tímpano.

Quita toda la suciedad y los residuos que veas. Quizás necesitas repetir la operación varias veces hasta eliminarlos por completo. Recuerda ser muy delicado para no provocar una lastimadura en la piel del animal y, sobre todo, para que se quede lo más quieto posible.

5. Irriga los oídos

Utilizando la misma solución anterior, y si el veterinario lo aconseja, puedes irrigar los oídos y eliminar el cerumen y suciedad alojados a mayor profundidad del canal auditivo. Es fácil: coloca la punta de la botella en el oído y presiona para que salga líquido. Masajea con cuidado y gira la cabeza del can para que caiga el agua mezclada con cera y otros elementos.

Por último, te recomendamos que despejes los oídos al perro al terminar la limpieza. Su primera reacción será mover la cabeza para ambos lados. No te preocupes, es normal.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.