Ciervo ratón: visto en Vietnam después de 30 años

A pesar de lo que señala su nombre, el ciervo ratón no forma parte de los cérvidos ni de los roedores. De hecho, está más relacionado con camellos, jirafas y ovejas (ungulados).
Ciervo ratón: visto en Vietnam después de 30 años
Cesar Paul Gonzalez Gonzalez

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 17 octubre, 2022

El ciervo ratón es el ungulado más pequeño que existe, pues apenas alcanza los 48 centímetros de longitud. Tiene un pelaje áspero y unas grandes orejas color marrón rojizo que sobresalen de su cabeza. Se caracteriza por exhibir un contrastante pelaje gris plateado en la mitad de su cuerpo y por poseer pezuñas en sus patas.

Su nombre científico es Tragulus versicolor y fue descrito por primera vez en 1910. Sin embargo, después de que se encontrara un ejemplar muerto por cacería en 1990, desapareció durante casi 30 años sin dejar huella. Sigue leyendo este espacio y descubre la historia detrás del redescubrimiento del ciervo ratón.

Descubrimiento del ciervo ratón

Esta especie no fue descubierta de manera directa en el campo, sino que se describió a partir de ejemplares que se resguardaban en el museo británico de historia natural. El encargado de este suceso fue Thomas Oldfield, quien en 1910 publicó un artículo en el que describió 3 nuevas especies de mamíferos asiáticos. Entre ellas se encontraba por primera vez al ciervo ratón.

El único problema que existía con este descubrimiento era que no se sabía casi nada sobre la especie. De hecho, los ejemplares en los que Thomas basó sus descripciones solo decían provenir de Vietnam, más no aportaban ninguna otra información de su origen.

Un ciervo ratón vietnamita.

La última vez que fue visto

Debido a que no existía información suficiente para buscar a la especie, se tuvo que esperar a que algún investigador se topara con ella. No fue hasta 1990 que una expedición en la provincia de Gia Lai recuperó un ciervo ratón muerto. Dicho evento permitió conocer la ubicación de sus poblaciones, aunque también se presenció la intensa cacería que sufría el mamífero por parte de los ciudadanos.

Esta situación fue la que propició que algunos expertos sugirieran que la especie se encontraba en riesgo. Por desgracia, se pronosticaba que podría desaparecer por completo si no se hacía algo al respecto. Sin embargo, poca atención se le puso al tema y el ciervo ratón no volvió a aparecer por casi 30 años.

Los animales más buscados en el mundo

En 2017, una organización sin fines de lucro llamada Global Wildlife Conservation publicó una lista con las 25 especies desaparecidas y más buscadas del momento. Esto tenía como objetivo generar una campaña de información para realizar la búsqueda de dichos animales. Claro está, con la esperanza de que aún no se encontraran extintos.

Entre estas 25 especies se encontraba el ciervo ratón, por lo que varios especialistas comenzaron a idear expediciones para poder encontrarlo (de nuevo). De hecho, poco después de publicar la lista se redescubrieron varias especies como la salamandra de jackson, la abeja gigante de wallace y el camaleón de voeltzkowi. Esto provocó que el entusiasmo creciera y se aumentaran las expectativas de todos.

El camino para redescubrir una especie

El principal reto para redescubrir a esta especie era la escasez de información sobre su hábitat. Aunque se conocía que algunos ejemplares procedían de la provincia de Gia Lai, los primeros ciervos ratones que se describieron provenían de Nha Trang. Ambos sitios se encontraban alejados y nada aseguraba que los datos fueran certeros.

Un grupo de investigadores se dieron a la tarea de buscar pistas, fotos y cualquier indicio que les pudiera servir para ubicar a esta especie. De manera afortunada, uno de los científicos encontró una foto antigua de lo que parecía ser un ciervo ratón, aunque no se podía asegurar nada por la mala calidad de la imagen. Sin embargo, había sido tomada en los bosques de Nha Trang, de modo que decidieron acudir a esta provincia.

A pesar de ello, dicho sitio aún era una zona bastante extensa y poco fácil de censar. No obstante, al científico An Nguyen se le ocurrió resolver este problema de la forma más sensata posible. En el 2018, realizó una serie de encuestas a las personas que vivían cerca de donde se debería encontrar el ciervo ratón. Con ello, el equipo podría aprovechar el conocimiento local y se tardaría menos en ubicar a la especie perdida.

En poco tiempo la estrategia dio sus primeros resultados, con lo cual ubicaron una zona en la que algunos pobladores reconocían y describían bien al mamífero. Así pues, lo único que restaba era poner cámaras trampa para intentar fotografiar al ciervo ratón.

Las cámaras que salvaron el día

El equipo de investigación colocó 3 cámaras trampa alrededor de una misma área y las dejó funcionando por alrededor de 5 meses. Dichos aparatos se encargaban de tomar fotos cada vez que detectaban movimiento cerca de su lente, con lo que se podrían capturar las imágenes de cualquier animal que las activase.

Cuando regresaron a revisar el contenido que se obtuvo, los investigadores se dieron cuenta de que las cámaras tomaron 275 fotos de este mamífero tan evasivo. Gracias a ello, en el 2019 se redescubría al ciervo ratón después de casi 30 años de estar desaparecido. Aquí están las pruebas de ello en formato vídeo.

La odisea apenas comienza

El simple hecho de que la especie haya sido redescubierta no es el final de la historia. Es posible que la “desaparición” del ciervo ratón sea debido a que su población es muy reducida, por lo cual es difícil verla en su hábitat natural. Esto solo indica que es necesario comenzar lo más pronto posible las acciones para conservarla y protegerla.

La reaparición de esta especie perdida otorga esperanza a los grupos enfocados en la conservación, pues es un animal más que aún no está extinto. Sin embargo, la odisea apenas comienza y es necesario ponerse manos a la obra para evitar que desaparezca. Aún estamos a tiempo de salvar a la especie, aunque para lograrlo se deben unir los diversos actores claves: los gobiernos, los científicos y la sociedad.


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