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3 causas de la cistitis en perros

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La cistitis en los perros es una enfermedad muy molesta que impide a la mascota orinar con normalidad. Es necesario tratarla.
3 causas de la cistitis en perros
Última actualización: 21 abril, 2021

La cistitis en perros es una afección relativamente común que puede llegar a afectar distintos niveles dentro del sistema urinario. Aunque la causa más común suele ser una infección del tracto urinario en cánidos, no siempre tiene por qué ser este el origen de tan molesta patología.

Los signos clínicos de la cistitis en estos animales suelen ser evidentes, ya que el perro siente muchas molestias al orinar. De todos modos, una prueba rápida en la clínica veterinaria puede sacar de dudas al tutor y dilucidar con seguridad qué le ocurre a la mascota. A continuación, se exponen las causas más comunes de esta dolencia en los perros.

Síntomas y tratamiento de la cistitis en perros

El signo clínico más común que suelen detectar los tutores cuando las mascotas desarrollan cistitis es la hematuria o sangre en la orina. Por otro lado, otra de las cosas de las que se dan cuentan las personas es que el perro pasa varios minutos posicionado mientras expulsa muy poca cantidad de orina, lo que se conoce como disuria.

Asimismo, podrán ser detectadas en el perro varias conductas que delatan su molestia. Por ejemplo, es normal que los canes con cistitis pasen más tiempo acicalándose los genitales. Cada vez que intentan orinar, sufrirán dolor. La manera de aliviarse es a través del lamido.

La aparición de fiebre también puede darse ante cistitis más avanzadas y causadas por una infección urinaria en los perros. En ocasiones, puede haber cierto dolor abdominal que acompaña a toda esta sintomatología.

Esta patología, por lo general, suele tener un tratamiento bastante sencillo. No obstante, todo dependerá de la causa o el origen de la cistitis. En la mayoría de ocasiones, al tratarse de una infección bacteriana, el uso de antibióticos es más que suficiente para superar la enfermedad.

Cuando las causas son otras —como enfermedades hereditarias, tumores o cálculos— habrá que tratar la patología primaria que ha tenido como efecto secundario una cistitis en el animal.

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1. Infección urinaria como causa de la cistitis en perros

Una de las causas más comunes por las que un perro desarrolla una cistitis es la infección del tracto urinario. Esta infección puede causar la inflamación de la vejiga, o lo que es lo mismo, la cistitis que aquí nos atañe. 

Antes de nada, se debe saber que no todas las infecciones de orina en perros son iguales. Aunque la mayoría están causadas por E. coli, la bacteria más común presente en los intestinos, esto no siempre será así.

La única forma de determinar qué microorganismo está provocando la infección es a través de un cultivo de orina. En ocasiones, algunos animales con cistitis recurrente necesitarán un estudio de mayor profundidad para que el veterinario pueda recetar el antibiótico más específico.

Las infecciones de orina no son igual de comunes en todos los perros. Las hembras de avanzada edad parecen desarrollar cierta predisposición a este tipo de patología. Lo mismo ocurre con aquellos perros que sufren diabetes mellitus.

Por otro lado, aquellos canes que presenten otros problemas a nivel del sistema urinario también tendrán más posibilidades de desarrollar una infección y, como consecuencia, una cistitis.

2. Cálculos en la vejiga urinaria

Otra de las patologías que puede desembocar en una cistitis son los cálculos en la vejiga. Estos urolitos que se forman en la vejiga están compuestos por minerales, por lo que son realmente piedras. 

Cuando estos cálculos tienen un tamaño tan diminuto que es prácticamente arena, no son tan peligrosos. Por otro lado, en el momento en el que empiezan a adherirse unos a otros y forman cálculos más grandes, comienzan a dañar la pared de la vejiga y provoca su inflamación o cistitis. 

No es de extrañar que, a veces, este daño tisular pueda facilitar la aparición de otras enfermedades secundarias, como son las infecciones de orina. La forma de tratar este tipos de cistitis, además del uso de antibióticos, son cambios en la dieta que ayuden a disolver los cálculos o, incluso, tener que extraerlos mediante cirugía.

En el caso de que no se tomara ningún tipo de medida para solucionar el problema de los cálculos, si estos crecen demasiado podría obstruir por completo la uretra. Esto causaría la muerte del animal en poco tiempo.

3. Cáncer de vejiga

En ciertas ocasiones, cuando el perro se hace mayor puede ocurrir que desarrolle un tumor en la vejiga. Estos tipos de masas tumorales no tienen por qué ser de tipo maligno, aunque es lo más normal. 

El sobrecrecimiento descontrolado del tejido puede provocar su inflamación a largo plazo. En estos casos, solo el tratamiento quirúrgico podría solucionar el problema.

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Como dijimos, aunque la causa más común de cistitis en perros sea la infección urinaria, a veces puede tener otra naturaleza. Si la mascota comienza a presentar problemas para orinar o siente dolor, lo mejor es visitar al veterinario de confianza con urgencia. Si no se actúa de manera apremiante, la patología puede volverse muy grave.


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