Mujer solicita en su trabajo permiso de faltar porque su perrita está enferma y necesita cuidarla
En Argentina, específicamente en la provincia de Salta, una mujer solicita que su mascota, una perra salchicha, sea reconocida como hija no humana. Esto, para poder tener los beneficios de la ley y apoyarla en su enfermedad.
Se trata de Silvia Colletti y su perra salchicha Dharma, la cual tiene una condición de salud grave, por lo cual su dueña quiere tener una el respaldo legal para asistir a su mascota. Sigue leyendo para conocer todos los detalles de esta bella historia.
Lo que esta mujer solicita es empatía con su situación
En una entrevista en Radio 2 de Rosario dijo: “Mi lugar de trabajo está a 25 kilómetros y se me dificultaba. Y no podía dejarla ingresada en soledad porque era peor el estrés para ella. Entonces la quise inscribir como una hija no humana a cargo, porque esa figura ya existe legalmente, se habla de una familia multiespecie. Hice el trámite interno en la institución y quedó en stand by. No lo saben resolver porque no podía poner un DNI”.
La mujer ha sido entrevistada por varios medios del país, ya que es una lucha que muy pocos se animan a llevar a cabo. El camino no es sencillo y lo que ella busca es que Dharma sea reconocida legalmente como su familia y así ella pueda tener los beneficios que le brinda la ley a los niños y así poder cuidarlos cuando están enfermos.
Esta valiente mujer es ingeniera del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria – INTA. Allí realizó la presentación para que se replantee la idea de familia y que las mascotas tengan los mismos derechos que las personas. Sin embargo, su jefe rechazó su solicitud afirmando que existe “un convenio colectivo de trabajo que no dice nada al respecto”.
Silvia ha buscado apoyo de muchas personas
Silvia asegura que desea dedicarle tiempo completo a su mascota porque es un tema de crisis y en esa línea debe analizarse lo que propone, ya que no se trata de “ir a ponerle una vacuna”. Así mismo, afirma que a raíz de la pandemia los animales se han apegado más a sus dueños.
También dijo: “Mucha gente se va a sentir identificada, otros por supuesto no. Yo vivo sola y ella es mi compañía, así que hay un lazo sumamente estrecho”.
En busca de tener un mayor apoyo y de que otras personas puedan gozar de estos beneficios, buscó la ayuda de un abogado constitucionalista de Buenos Aires, quien le afirma que ve una luz para este caso. Algo realmente esperanzador, no solo para Silvia, sino para todos los dueños de mascotas que tengan una situación similar.
Al respecto, la mujer concluye que esta es una lucha por seres sintientes, no un tema de caprichos: “Seguramente habrá quienes piensen que busco obtener días no laborales. Nada más alejado de la realidad, porque la iniciativa apunta cuestiones de salud. Es darle el derecho al animalito a ser atendido, en casos como el mío que no tengo a nadie que lo haga por mí. Cuento con todo el historial veterinario que avala lo que estoy diciendo”.