Dragón barbudo: cuidados en cautiverio

Manipular a un dragón barbudo es bastante sencillo, ya que no suelen correr ante la presencia de su tutor.
Dragón barbudo: cuidados en cautiverio
Cesar Paul Gonzalez Gonzalez

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 19 marzo, 2022

Los dragones barbudos son unos curiosos lagartos de tamaño mediano que se han vuelto populares como mascotas. Estos se caracterizan por su temperamento dócil y su apariencia llamativa. Sin embargo, necesita de cuidados especiales en cautiverio para mantenerse saludable.

El término dragón barbudo se utiliza para denominar a varios organismos del género pogona. A pesar de esto, la especie más común en cautiverio es pogona vitticeps, por lo que las siguientes recomendaciones están más enfocadas en ella. Sigue leyendo este espacio y descubre todo sobre los cuidados del dragón barbudo.

Características del dragón barbudo

Los dragones barbudos exhiben tamaños que oscilan entre los 50 y 60 centímetros de longitud, con un peso promedio de casi medio kilogramo. Su cuerpo tiene una forma alargada y su cabeza termina en forma de flecha. Además, posee una serie de escamas por toda su piel que parecen espinas duras.

Estos reptiles reciben su nombre por el pliegue espinoso que tienen bajo su cuello, el cual luce como barba a simple vista. De hecho, emplean este exceso de piel para inflarla con aire y así intentar intimidar a sus competidores o a sus depredadores. En época de apareamiento, dicha zona se torna negra y les sirve para atraer a las hembras.

Hábitat en cautiverio

El dragón barbudo es originario del suroeste de Australia, en específico de las regiones desérticas más alejadas de la población, también llamadas outback. Por esta razón, disfruta de los ambientes arenosos con altas temperaturas, aunque también necesitan escondites donde se puedan refrescar en caso de ser necesario.

Es importante recordar que los reptiles regulan su temperatura de manera externa, así que necesita el calor del sol o de un foco incandescente para sobrevivir. Además, su piel agradecerá siempre el mantener cierta humedad en el aire. Esto es esencial para los procesos de muda y ayuda a mantener fresco su cuerpo.

También es fundamental que el dragón barbudo tenga un ambiente con gran cantidad de escondites, piedras, cuevas y ramas. Su hábitat debe adecuarse bien para que se sienta cómodo y sea capaz de refugiarse. A pesar de su apariencia temible, puede llegar a asustarse y su hogar debe estar listo para hacerlo sentir seguro.

Preparación del terrario

El terrario para los reptiles suele estar constituido de un tanque de cristal. En el caso del dragón barbudo, se necesita un hábitat con al menos 80 centímetros de largo y 50 de ancho. Un acuario de 200 litros o más puede ser perfecto para ellos, solo asegúrate que sea más largo que ancho y su altura impida que escape con facilidad.

El hábitat deberá tener una cama de sustrato como arena gruesa o papel en trozos. También existen algunas alfombras especiales para reptiles, las cuales pueden ser una buena opción de inicio. Sin embargo, a los dragones barbudos les encanta excavar y es mejor optar por un fondo adecuado para ello. Evita a toda costa emplear arena para gato, tierra, aserrín y virutas de madera.

Características del hábitat

Todo el hábitat necesita ser iluminado con focos especiales para reptiles. Estos le proveerán rayos UV y calor que le permitirán realizar su digestión de manera adecuada. Aunado a ello, se debe dividir el hábitat en dos secciones, una que se mantenga bien iluminada con temperaturas de 28 grados Celsius y otra más oscura con temperaturas de 24 grados Celsius.

Los ciclos de luz deben de simular los de la naturaleza, con al menos 12 horas de iluminación y 12 horas de oscuridad. Claro está, es normal que la temperatura baje en la ausencia de luz, lo cual no es un problema siempre que no disminuya por debajo de los 10 grados Celsius. Además, el hábitat necesita entre 20 y 40 % de humedad.

Como te podrás dar cuenta, es necesario tener un termómetro y un higrómetro para medir la temperatura y la humedad dentro del hábitat. Es posible automatizar todo el proceso con ciertos accesorios, pero esto dependerá de la inversión que el tutor quiera hacer.

Alimentación

Cuidados de dragón barbudo.

Los cuidados en la alimentación del dragón barbudo son sencillos, pues su dieta en cautiverio se basa en un 80 % de alimento vivo como insectos y un 20 % de vegetales verdes. Algunos ejemplos de los tipos de comida que se le pueden ofrecer son los siguientes:

  • Insectos: como grillos, saltamontes, cucarachas, gusanos de cera y tenebrios. Existen suplementos de calcio en polvo que se les debe espolvorear para mejorar la calidad nutricional del alimento. Además, recuerda que el tamaño del insecto debe ser proporcional al del ejemplar, de lo contrario se le podría ocasionar una impactación intestinal.
  • Vegetales: como hojas verdes (de frutas o vegetales), diente de león, zanahoria, espinaca, alfalfa, apio, acelgas o perejil. También se les puede ofrecer fruta como melón, manzana, plátano o uva. Recuerda que debe estar muy bien picada para evitarle problemas al reptil.

El agua no es un componente esencial para los cuidados del dragón barbudo, ya que se hidrata por medio de su comida. Sin embargo, se le debe ofrecer un recipiente para que pueda refrescarse si le es necesario. De hecho, este contenedor también ayudará a mantener la humedad del ambiente.

Reproducción

Alimentación del dragón barbudo.

Los dragones barbudos alcanzan su madurez sexual entre los 8 y 18 meses de edad, aunque para la reproducción es deseable que tengan mínimo 18. En cautiverio, el apareamiento puede tener lugar durante todo el año. Sin embargo, no se suele recomendar llevar a cabo este proceso porque le ocasiona mucho estrés a la hembra.

Ambos ejemplares deben criarse por separado y solo se mantienen juntos durante la reproducción. Al finalizar, la hembra pondrá cerca de 20 huevos, los cuales eclosionarán en 75 días como máximo. Durante el momento de la puesta se debe tener mucho cuidado con la humedad del hábitat. Esto se debe a que en un ambiente seco es más probable que existan problemas en el parto (distocias).

Es importante remarcar que algunas hembras ponen huevos incluso sin tener contacto con un macho, por lo que se les debe mantener en revisión constante. En caso de que exista algún conflicto, signos de enfermedad o dudas en los cuidados del dragón barbudo, acude de inmediato con un veterinario especialista en reptiles.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Lane, E. (2013). Sexual Selection of Beard Color in the Inland Bearded Dragon (Pogona vitticeps) (Doctoral dissertation).
  • Raiti, P. (2012). Husbandry, diseases, and veterinary care of the bearded dragon (Pogona vitticeps). Journal of Herpetological Medicine and Surgery, 22(3-4), 117-131.
  • Doneley, B. (2006, January). Caring for the bearded dragon. North American Veterinary Conference.
  • Rowland, M. (2009). Veterinary care of bearded dragons. In Practice, 31(10), 506-511.
  • De Vosjoil, P., Sommella, T. M., Mailloux, R., Donoghue, S., & Klingenberg, R. J. (2016). The Bearded Dragon Manual: Expert Advice for Keeping and Caring for a Healthy Bearded Dragon. Fox Chapel Publishing.
  • Efendić, M., Samardžija, M., Capak, H., Bačić, G., Žura Žaja, I., Magaš, V., & Maćešić, N. (2019). Induction of the oviposition in bearded dragon (Pogona vitticeps) with postovulatory egg retention (dystocia)-a case report. Veterinarski arhiv, 89(1), 131-142.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.