La reproducción en perros

La reproducción en perros
Francisco María García

Escrito y verificado por el abogado Francisco María García.

Última actualización: 17 noviembre, 2017

El primer celo de las perras se produce al llegar a la pubertad, más o menos sobre los 6 meses en las razas pequeñas, y con el año de edad para las razas de gran tamaño. Normalmente las hembras caninas tienen dos celos al año. Este detalle es importante para estudiar su reproducción.

Fases del periodo sexual canino

Generalmente son cuatro las fases del periodo sexual caniano:

perra embarazada
  • Anestro. Este espacio de tiempo es el que pasa entre dos celos. Es la fase de inactividad sexual o llamada de reposo sexual. Es la más larga y va desde que pasa el primer ciclo de la perra hasta el siguiente, unos 6 meses.
  • Proestro. Es la siguiente fase, anterior al estro. Las señales más evidentes son la dilatación de la vulva y la expulsión de una mucosidad sanguinolenta de color oscuro que irá aclarándose progresivamente según vaya avanzando el ciclo. La mucosa vaginal es de un color rosáceo. Esta fase se extiende hasta los 10 días pero puede variar entre 72 horas y 3 semanas.

En este periodo, los machos se ven atraídos por las hembras, pero ellas aún no tienen la receptividad adecuada y rechazan al macho, con gestos, gruñidos, girándose y sentándose para imposibilitar la monta. El sangrado a veces no es visible, pues son muchas las perras que se lamen la vulva.

  • Estro o celo auténtico. Comienza cuando la hembra comienza a estar receptiva y termina en el momento en que empieza a rechazar de nuevo al macho. De forma parecida a la fase anterior dura unos 10 días aproximadamente.
  • Metaestro o diestro. Fase de dos meses de duración aproximadamente en que las hormonas se regulan tras el estro.

El momento del celo

El celo es la fase óptima para que la hembra se quede preñada. Se produce una subida de la llamada hormona luteinizante, que va a provocar la ovulación. Entre los signos visibles, la vulva alcanza su máxima turgencia, la mucosa vaginal se va a tornar pálida y blanquecina y a la palpación presenta visibles contracciones.

El momento ideal para el acoplamiento sucede entre los días 9 y 14 del ciclo. Suelen realizarse dos montas, con un día de diferencia entre ambas.

Metaestro o Diestro

Como hemos dicho, la fase del metaestro o diestro dura alrededor de 2 meses, en función del tiempo que tarden las hormonas en regularse de nuevo. En este periodo, la vulva vuelve a su estado normal.

En esta última fase ya no hay atracción entre los dos sexos y si ha habido monta y gestación se desarrollarán los signos típicos de la preñez: crecimiento del abdomen, aumento de peso, la aparición de leche en las mamas al final de estos 2 meses, etc.

Edades del acoplamiento en la reproducción

La edad ideal para la reproducción comienza a partir de 10 meses en los machos y de los 12 en las hembras, con una edad máxima de 9 años en las hembras y 10 en los machos. Hay muchas asociaciones que no reconocen el pedigree a los cachorros nacidos fuera de estas edades.

En el aspecto técnico, la excitación que provoca en el macho la presencia de la hembra en celo origina un aumento de la irrigación sanguínea del pene con el consiguiente aumento de volumen y erección del mismo. Cuando la perra está relajada la duración es menor. Si por el contrario está activa, se mueve de forma moderada y con tirones en dirección contraria al macho, por lo que la duración será mayor.

Acoplamientos asistidos

ecografia perra

Estos acoplamientos tienen que realizarse de una forma controlada. Por ello, lo ideal es estar presentes con el fin de ir solucionando los inconvenientes que se pudieran presentar. En los actuales acoplamientos asistidos, el criador ayuda al macho para obtener un mejor resultado final.

Puede darse el caso de que haya incompatibilidad física entre macho y hembra, y el acoplamiento asistido es la mejor forma de solucionar estos desajustes. Un inconveniente que se deriva de este sistema artificial es que algunos machos se acostumbran a que las hembras estén siempre dispuestas y a que les ayuden, por lo que posteriormente no realizan la monta de forma natural.

Si la mota natural y la asistida son imposibles de realizar, lo mejor es recurrir a la inseminación artificial.

Reproducción en la hembra primeriza

Si la hembra realiza el acoplamiento por primera vez, lo mejor es tranquilizarla y sujetarla. Aunque se sienta con ganas e impulso de copular, al no tener experiencia se muestra nerviosa y rechaza al macho. Este inconveniente puede solucionarse recurriendo a vaselina estéril para lubricar la vulva y facilitar la penetración.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.