Estudio afirma que la mayoría de los gatos recuerdan su nombre y el de sus allegados

Los resultados de esta investigación son un gran avance para comprender su desarrollo social. Una vez más, los felinos nos sorprenden.
Estudio afirma que la mayoría de los gatos recuerdan su nombre y el de sus allegados

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 05 mayo, 2023

¿Y si te contáramos que no es casualidad que tu gato reaccione cuando mencionas su nombre? Seguro hemos llegado a pensar que por su conducta independiente y a veces, distante, poco pueden entender nuestras palabras, pero lo cierto es que años de evolución y cercanía siguen demostrado todo lo contrario.

Ahora no solo se trata de comunicación a través del lenguaje corporal, sino también mediante la palabra. Quédate para conocer el resultado de este interesante estudio.

Los gatos recuerdan su nombre y algunos otros datos

Durante los últimos años grupos enteros de investigación se han interesado en analizar el funcionamiento de los vínculos entre los seres humanos y otras especies, entre ellos los gatos. Es así que se han encontrado grandes hallazgos como este.

Por complejos y alejados que parezcan lo cierto es que los gatos tienen un vínculo bastante profundo con los seres humanos. Esto se ha visto, especialmente, mediante la comunicación en sus movimientos, pero también en sus conductas sin la presencia humana.

Los gatos recuerdan: una posibilidad con estudios.

Sin embargo, lo que más ha sorprendido al grupo de científicos ha sido que posiblemente los gatos recuerdan sus nombres, una habilidad que otras especies han desarrollado a mayor escala como los perros. Este podría ser un gran paso para saber más de nuestros peluditos felinos.

“Lo que descubrimos es asombroso (…) Quiero que la gente sepa la verdad. Los felinos no parecen escuchar las conversaciones de la gente, pero de hecho lo hacen.” -Saho Takagi.

Un estudio muy interesante

La investigación tuvo lugar en la Universidad de Azabu, Japón, por un grupo de científicos liderado por Saho Takagi. Allí, a través de un estudio aplicado a gatos domésticos y gatos que residen en “cafeterías de felinos” obtuvieron información crucial sobre esto.

En concreto, la prueba consistía en presentar a cada gato un gato familiar, ya porque fuera del mismo hogar o lugar donde vivía, y también uno desconocido. A la vez, se reproducía una grabación de voz con la que el propietario decía su nombre en voz alta o el nombre de otro gato. De esta manera se pudo ver cómo cada estímulo era percibido de manera distinta así como su reacción.



El resultado: posiblemente los gatos recuerdan y algo más

Al finalizar la prueba, los científicos hallaron que los gatos domésticos permanecían más tiempo observando la imagen del otro gato, probablemente porque les era completamente desconocido cuando era el caso. Esta sería la razón por la que les inquietaba verlos.

Pero algo interesante sucedía con los gatos de la cafetería y era que no pasaban tanto tiempo observando a los gatos que no les eran familiares. Esto podía deberse a que en sus lugares de residencia vivían con otros gatos y no era una situación muy desconocida para ellos, por lo que la podían pasar por alto.

Datos interesantes del recuerdo en gatos

Además del recuerdo en sí, este procedimiento le permitió al equipo de científicos obtener algunos otros datos interesantes sobre la interacción de los felinos, entre ellos los siguientes:

  • Relacionan nombres y rostros: podría ser que los gatos domésticos aprendan esta conducta a partir de la interacción con otros gatos dentro el hogar. Por su parte, los gatos que viven en cafés con otros gatos, no tienen la misma posibilidad de asociar a través de nombres.
  • Los gatos recuerdan personas: en otra prueba, se les presentaba la imagen de una persona con la que vivían y se decía el nombre de ella, o bien, otro distinto. Los gatos parecían poner atención cuando no coincidía el nombre y la imagen, en especial con quienes convivían con más personas y llevaban allí más tiempo.
  • Algunos gatos no realizan una asociación: esto sucedía principalmente en los gatos que vivían con docenas de otros gatos, o bien, veían a personas distintas todo el tiempo. En estos casos, tienen menos oportunidad de escuchar nombres concretos y recordar rostros precisos.

“En otras palabras, la frecuencia y la cantidad de exposición a los estímulos pueden hacer que la asociación nombre-cara sea más probable”. Mencionaron los investigadores.

Por otro lado, es importante tener en cuenta que este análisis sobre el vínculo y la interacción de humanos y gatos a partir de expresiones humanas y aspectos sociales es solo un pequeño paso en lo que debe ser una investigación más amplia y a mayor escala, pues en este caso fue a penas un fragmento de la población felina analizada.

En este sentido, los científicos afirman que aún nos queda mucho por aprender acerca del desarrollo social de esta interesante especie.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.