Abuelita madruga todos los días a cocinarle a perritos sin hogar, "su amor es mi medicina"

¿Barriguita llena, corazón contento? Definitivamente, sí. Por eso, nos complace compartir esta historia que nos inspira, pues nos muestra que el amor y la bondad son capaces de unir fuerzas para quienes más lo necesitan, esta vez para perritos sin hogar.

Quédate hasta el final para conocer la historia de esta abuela de 90 años que conmueve al mundo.

Perritos sin hogar, pero alimentados con mucho amor

En los días fríos, en los calurosos, en las celebraciones de fin de año o en los días feriados, siempre los espera un platito de comida preparado con mucho amor por una abuela de 90 años, dispuesta a ayudar estos perritos que tristemente deambulan por las calles.

Nuestra historia transcurre en la ciudad de Ghaziabad, exactamente en el estado de Uttar Pradesh en India. Allí está instalada la organización Paws in Puddle que cuenta con cerca de 120 perritos sin hogar a quienes ofrece bienestar y cuidado.

Además de su importante labor, el refugio empezó a acaparar las miradas por una de las voluntarias más importantes. Se trataba de una mujer de 90 años que cada día madruga para preparar alimento para todos los canes de la organización.

La situación se dio a conocer a través de las redes sociales del refugio y desde entonces, ha sido fuente de inspiración para muchos amantes de los animales que se conmovieron con su bondadosa acción.

¿Quién es la mujer que alimenta corazones?

Según información suministrada por la misma organización, la mujer de 90 años tampoco ha tenido días fáciles. Recientemente, pasó por varias operaciones complejas que la obligaron a permanecer en reposo, sin embargo, esto no fue un obstáculo entre ella y su amor por los peluditos.

Cada día, a las 4:30 de la mañana, la abuela se levanta y cocina para más de 120 perritos. Lo que más le gusta es variar sus recetas, pues no siempre prepara lo mismo y se esfuerza por satisfacer su apetito, aunque no había podido verlos debido a su estado de salud.

“Después de cada comida vuelvo y ella pregunta -¿todos comieron bien hoy?, ¿a todos les gustó?, y luego le muestro los videos que hacen que su rostro muestre una gran sonrisa. Hoy me decidí, la llevaré conmigo por primera vez”. -Mencionaron en Instagram.

Así es, el gran momento había llegado. La abuela no podía esperar más tiempo, quería ver los rostros de los perritos sin hogar a los que ha alimentado y alegrado el corazón con mucho amor en cada plato. Pese a que la visita debía ser corta y con sumo cuidado, pudo más la ilusión de compartir con ellos.

Seamos testigos de este mágico momento:

 

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“No hay medicina, pero hay amor de perros. Hoy mi edad es gracias a ellos, es tan larga, solo quiero esta felicidad”. -Dijo la abuela.

Y así fue como por primera vez podía acariciar y tener de cerca a los más de 120 perritos que se habían enamorado del amor puesto como ingrediente principal en cada plato.

Una historia que nos enseña que no hay excusas para el amor, la bondad y el cuidado que podamos brindar a quienes más nos necesitan, en especial a tantos peluditos que han sido víctimas de humanos que los han condenado al olvido, pero que hoy reciben una nueva oportunidad gracias a seres como ella.

¡Que se sigan multiplicando los corazones bondadosos en el mundo!