Tipos de agresión de los perros
Actualmente, las diferentes formas de agresión de los perros se han identificado y categorizado. Sin embargo, hay consenso en que la agresión canina no se presenta, en la práctica, bajo una sola categoría.
Lo común es que se presenten conjuntamente varios tipos de agresión en el perro. Además, un perro agresivo también puede tener otros problemas de comportamiento. Esto, a veces, puede complicar el diagnóstico y el tratamiento.
Es importante tener presente que la agresividad es una conducta social natural de los perros. Gracias a ella, se establece una jerarquía entre los miembros de una manada. Con esto en mente, es necesario, que en el hogar, hagamos un manejo cuidadoso de este instinto para evitar un problema que dificulte la convivencia.
La insustituible educación materna en el manejo de la agresividad
Es importante resaltar que la conducta agresiva se inhibe, se redirige y se controla. La primera maestra de este manejo es la madre de los cachorros, durante la impronta. Por esta razón, es tan importante no separar la madre de la camada durante las primeras semanas de vida.
En este periodo, el cachorro está sensible a este aprendizaje. La madre tratará de fijar unos patrones de comportamiento en los cachorros parecidos a los suyos. Así, les enseñará a inhibir el mordisco, a adoptar la postura de sumisión, a socializar con sus hermanos sin propasarse y les enseñará en su propio lenguaje.
En este periodo, el cachorro aprende cuáles son las señales de advertencia y las consecuencias de no reconocerlas. Cada vez, será castigado cuando insista o muestre pocas ganas de aprender.
Los detonantes de la agresión de los perros
Según opinión de expertos, más allá de comprender los tipos de agresión de los perros, comprender los desencadenantes de la agresión resulta vital.
Desentrañar cuál es la secuencia de eventos y circunstancias que ocurren antes de que el perro se vuelva agresivo, en principio, depende de mantener registros detallados que pueden comenzar a revelar un patrón.
Es de suma importancia poder llegar a un tratamiento adecuado, para lo cual es vital hacer la anamnesis en el domicilio. Esto permite observar el comportamiento del perro, su lenguaje gestual y las situaciones desencadenantes que disparan la agresión.
Agresión relacionada con la salud
Es importante destacar la importancia de descartar una causa orgánica como causa de la agresión canina. Se cree que la salud es la causa del 15 % de los reportes; la reacción agresiva puede resultar del hecho de que el perro esté padeciendo dolor u otro padecimiento.
Mientras el dolor puede ser fácilmente detectable, debes tener en cuenta otras causas más difíciles de detectar a primera vista. Por ejemplo, en casos de hipotiroidismo, hidrocefalia, tumores intracraneales, epilepsia. También deben descartarse padecimientos como enfermedades víricas, bacterianas o tóxicas que cursan con afecciones encefálicas y síntomas neurológicos.
Clasificación de la agresividad no relacionada con la salud
Indudablemente, la agresión se puede clasificar en una gran variedad de tipos distintos. Sin embargo, según opinión de expertos, la gran mayoría de casos que pueden llegar a la clínica se pueden resumir en tres: agresividad por dominancia, agresividad territorial y agresividad por miedo.
La agresión de los perros por dominancia
Esta es la categoría de agresión más común y compleja. Se estima que, aproximadamente, uno de cada cinco problemas de agresión presentados a un veterinario están relacionados con el dominio.
La agresión de ‘dominación’ tiene un nombre erróneo, pues los perros verdaderamente ‘alfa’ suelen ser bastante tolerantes con los miembros subordinados de su manada. Mas comúnmente, la agresión por dominio se expresa ante aquellos que el perro considera que están en una posición cercana a la suya.
Por este medio es que el perro, que no está seguro de su rol social en su manada, usa comportamientos agresivos para determinar qué se espera de él.
Agresión de los perros por miedo
Esta conducta se presenta en animales inseguros y de poco carácter que, al ver que serán tocados por alguien y no tener posibilidad de escapar, se sienten acorralados y muerden. En general, nunca producen mordidas graves, pues no lo hacen con convicción.
Su móvil es alejar el estímulo que les produce el miedo. Son animales a los que no se los debe tratar con brusquedad. Necesitan una terapia conductual y una medicación para superar sus fobias, y esta debe ser prescrita siempre por un facultativo.
Agresión territorial
Debemos resaltar que esta es una conducta normal en el perro y, en muchos casos, buscada por los propietarios cuando desean que sean guardianes de su propiedad.
En ocasiones, el animal se excede en esta conducta y resulta un problema que hay que solucionar. Es el caso de los animales que intentan agredir a las visitas, carteros y cualquier persona ajena al núcleo familiar. La educación del perro desde cachorro es la mejor prevención para evitar esta situación.
Por tanto, no se recomienda fomentar excesivamente esta conducta, pues el animal por sí mismo la va a presentar.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Snitcofsky, M. (2017).Desarrollo comportamental y crianza adecuada en caninos. eukanuba.com.ar
- Castillo Simón, I., & Muñoz González, S. (2011). ¿Perros potencialmente peligrosos? el papel del veterinario en la agresividad canina. Universidad Autónoma de Barcelona. Deontología i Veterinaria Legal.
- Fernández Foruny, A. (2008). Agresividad por dominancia. ETCAN. Etología Canina. Voraus.com El Perro de Utilidad y de Deporte. http://www.voraus.com/adiestramientocanino/modules/wfsection/html/a000543_agresividad_por_dominancia.pdf