Razas de gatos: el gato Persa

Razas de gatos: el gato Persa

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 30 noviembre, 2017

El gato persa es una de las razas de gatos más conocidas del mundo. Aunque en cine y televisión se le haya retratado muchas veces como el gato del malo (en “Como Perros y Gatos” es el gato malo), el persa es en realidad un gato muy tranquilo, apacible y juguetón. Aquí te contamos todo lo que hay que saber sobre el gato persa.

¿De dónde viene el gato Persa?

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Los gatos de pelo largo no son comunes en la naturaleza. Apenas existen gatos salvajes de pelo largo, aunque se sabe que los gatos de pelo largo proceden de hibridaciones con el gato de Pallas. Estos gatos fueron introducidos en Italia desde Persia en 1620, aunque no es hasta el siglo XIX que la aristocracia empezó a pedir gatos de pelo largo. Cruces de estos gatos con el gato de Angora turco, dieron lugar a la raza de gato persa definitiva a finales del 1800.

¿Qué pinta tiene el gato Persa?

El gato persa es un gato mediano tirando a grande, cuya característica más prominente (aparte del pelo largo) es su cara ancha y plana. Su cabeza es redonda y maciza y su cráneo ancho con frente redondeada, pómulos prominentes, hocico corto y chato, y mentón fuerte. Sus ojos son grandes, redondos, separados, de color intenso y brillante y los lleva siempre bien abiertos.

Sus orejas son pequeñas y redondeadas y están cubiertas de pelo, al igual que su cuerpo musculoso y redondeado con patas pequeñas y gruesas. La cola es peluda y redondeada en el extremo y el pelaje de esta raza es largo, abundante, espeso y sedoso, y requiere cuidados especiales.

Los gatos persas pueden ser de colores muy variados que van del negro al blanco, pasando por el azul, el lila, el chocolate, el rojo y el crema, aunque también pueden presentar una combinación de varios colores. La impresión general que dan estos gatos es que no son esbeltos, sino redondos y rechonchos.

¿Cuál es el temperamento del gato Persa?

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Al haber sido criado y cruzado específicamente para ser un gato doméstico, el gato persa tiene un temperamento excepcionalmente apacible y doméstico, no posee instintos salvajes y es poco aficionado a la caza. Es tranquilo, sosegado y cariñoso y congenia muy bien con humanos y otros animales. Es una raza especialmente buena para los niños, porque son juguetones y tienen mucha paciencia.

Esencialmente es un gato faldero y le gusta mucho dormir y descansar, aunque no es conveniente que pase demasiado tiempo durmiendo porque tiene tendencia al sobrepeso. Por eso es conveniente jugar con él y obligarle a hacer ejercicio de vez en cuando. Es muy presumido y, aunque no lo parezca, exige mucho cuidado y dedicación por parte de los dueños.

¿Cuál es la salud general del gato Persa?

El gato persa es un gato particularmente longevo, puede vivir entre 15 y 20 años y su salud general es buena. Sin embargo, necesita cuidados especiales, como son el cepillado diario para que no se le formen nudos en su largo pelaje, y los baños regulares (aunque no le gusten) porque la falta de higiene puede ocasionarle problemas de salud.

Además, sus ojos tienden a lagrimear, por lo que se deben limpiar diariamente para que no se produzcan infecciones. Además, tienen tendencia al sobrepeso, lo que les fuerza a llevar una dieta controlada y equilibrada porque son gatos muy cómodos y hacen poco ejercicio.


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