Cómo prevenir la dependencia canina

Muchas personas se dan cuenta después de llevar cierto tiempo conviviendo con su mascota que esta depende mucho de ellos. Es cierto que un perro debe tener un cierto nivel de dependencia hacia nosotros, pues nos necesita para comer, beber y mantenerse limpio.

No obstante, cuando esta dependencia se va a los extremos, esto no es beneficioso para ninguna de las dos partes. ¿Qué hacer pues ante la dependencia canina?

Qué es la dependencia canina

Los perros que sufren de dependencia canina son aquellos que necesitan estar cerca de sus dueños todo el tiempo para estar felices y sentirse seguros. De otra manera, sufren. Esta no es una conducta con la que un perro nazca, sino que se hace con el tiempo y mucha de la culpa la suelen tener los dueños, aunque hay otros factores que influyen, como por ejemplo:

• Destete temprano.
• Estrés de la madre durante la gestación.
• No tener herramientas de autogestión para su educación y crianza.
• Excesiva estimulación durante la fase de cachorro.

No obstante, no debemos confundir la ansiedad por separación con la dependencia canina. La ansiedad por separación es algo que normalmente pasa a los cachorros, y que se debería ir con el paso del tiempo cuando la confianza entre el perro y sus dueños creciera. La ansiedad por separación también es algo puntual que luego se pasa en el momento en que el animal se queda solo.

Sin embrago, la dependencia canina va más allá, pues significa que un perro no puede ser feliz en los momentos en que sus dueños no están con él.

Cómo influye en el perro la dependencia canina

La dependencia canina genera en el animal la falta de felicidad, ya que esta depende de estar con sus dueños. Además, puede generar mucho estrés y esto podría ocasionarle problemas graves de salud, porque puede dejar de comer o llegar a la depresión.

Según un famoso adiestrador profesional  “el desgaste metabólico que supone tener niveles altos de estrés funciona igual que en las personas. Esta dependencia hace que el perro llegue antes a anciano, y su calidad de vida en edades avanzadas sea mucho peor”

Hay quienes creen que existen razas con mayor dependencia que otras a sus dueños, pero esto no es del todo cierto. Las razas de perro no nacen siendo dependientes, sino que como hemos comentado antes se hacen por diversos factores, especialmente por la educación recibida. ¿Qué hacer entonces para no criar a un perro con dependencia canina?

Cómo no criar a un perro con dependencia canina

Hay varias cosas que podemos hacer a lo largo de la crianza de un perro para que este no sea dependiente. Estas son algunas:

1. Si tu perro tiene la tendencia a seguirte, quizá porque es lo que le has enseñado desde cachorro, esto tiene que terminar. Cuando llegues a casa y os hayáis saludado con mimos y cariño, será el momento de que cada uno vaya a su sitio. Enséñale dos o tres palabras que le hagan entender que debe irse a su camita o a su lugar.
2. Sé firme y constante. Si decides que debe irse a su sitio después del saludo, hazlo siempre. No lo dejes una vez y luego no, esto no le hará entender nada y no podrás conseguir que no sea dependiente.
3. Dale cariño. Que no queramos que nuestro perro tenga dependencia canina no significa que debamos echarlo de nuestra vida ni mucho menos. Solo debemos encontrar el equilibrio entre que dependa de nosotros y darle mimos de vez en cuando.
4. No lo humanices. Un perro es y siempre será un perro. Dale su lugar pero no lo humanices. Si lo haces, el animal dependerá de ti y no podrá ser feliz si tú no estás con él.

Fuente de la imagen principal: freestocks.org